Читать книгу El juego infantil y su metodologia. SSC322_3 - Ana María Venegas Rubiales - Страница 44
4.4. Juegos según la actividad que promueve en el niño
ОглавлениеContinuamente, los educadores necesitan emplear juegos para fomentar en los niños determinados conocimientos y aprendizajes concretos. Según la actividad que el juego provoca en el niño, podemos establecer los siguientes tipos de juego: juegos sensoriales, juegos motores, juegos manipulativos, juegos de imitación, juegos simbólicos, juegos verbales, juegos de razonamiento lógico, juegos de relaciones espaciales, juegos de relaciones temporales, juegos de memoria y juegos de fantasía.
Los juegos sensoriales
Aquellos juegos en los que los niños ejercitan los sentidos se denominan juegos sensoriales. Los juegos sensoriales se inician desde los primeros días del nacimiento hasta los dos años de edad, generalmente son juegos de ejercicios específicos del periodo sensoriomotor.
Según el sentido en el que se centre principalmente la actividad del juego, podemos distinguir entre juegos visuales (diferenciar colores, tamaños, formas...), auditivos (reconocer voces, cajas de música...), táctiles (experimentar con diferentes texturas, volúmenes, temperaturas...), olfativos (distinción de frutas olorosas, de plantas aromáticas...) y gustativos (diferenciar sabores, texturas...). Cuando se trabaja más de un sentido en el mismo juego, o se entrena la coordinación sensoriomotriz de sentidos y movimiento, se establecen los juegos audiovisuales (identificar sonidos con sus imágenes...), audiomotores (moverse al ritmo del pandero, el corro...) y visomotores (coordinación óculo-manual).
Cuando promueven una coordinación entre la vista y el movimiento de la mano se denominan juegos visomanuales (recortar, ensartar bolas en un cordón, juegos de puntería...).
En la vida diaria continuamente se promueve el desarrollo de los sentidos de los niños. Además, hay gran cantidad de materiales y juegos en el mercado cuyo objetivo es el ejercicio de los sentidos. Por ejemplo, cuando un niño salta al ritmo de una canción está trabajando la coordinación audiomotriz.
Nota
Con el juego libre el niño se desarrolla, experimenta, aprende y siente de una forma globalizada. Aprende a conocerse a sí mismo (fortalece su autoestima, construye su propia identidad y subjetividad) y a su entorno. Debemos fomentar que este juego aparezca de forma espontánea.
Los juegos motores
Los movimientos y gestos involuntarios que se producen en los niños desde las primeras semanas del nacimiento se pueden considerar juegos motores. estos tienen una gran evolución durante toda la infancia y adolescencia, pero su desarrollo se produce principalmente durante los dos primeros años de vida. En la edad adulta también se desarrollan en forma de juegos y actividades deportivas.
El juego motor desarrolla la percepción y orientación espacial (lejos, cerca, a un lado...) y la percepción de la velocidad (lento, rápido...).
Los juegos de corro, de comba, el escondite y otros muchos juegos tradicionales son juegos motores, pudiendo realizarse en ocasiones combinados con juegos simbólicos (policías y ladrones, indios y vaqueros...).
La pelota, la cuerda, los toboganes, etc., son objetos que favorecen el juego motor.
Los juegos de experimentación son muy beneficiosos, pues generan un pensamiento científico, crítico, reflexivo y analítico en los infantes; desarrollando así la capacidad esencial del pensamiento científico.
Los juegos manipulativos
Estos juegos están relacionados e intervienen directamente en acciones como apretar, sujetar, coger, agarrar, abrochar, picar, ensartar, golpear y enroscar.
Desde los tres o cuatro meses, los niños consiguen sujetar el sonajero cuando se lo colocamos entre las manos. De modo progresivo, irá cogiendo todos los objetos que tiene a su alcance. Más tarde, sujetará cualquier objeto que le demos y se lo llevará directamente a la boca. Y antes de cumplir el año, el niño será capaz de sujetar la cuchara para intentar comer solo. Todas estas acciones del niño se basan en el desarrollo de la manipulación y este lo hace jugando.
El juego manipulativo necesita materiales específicos en relación con las actividades que deseemos realizar con los niños. Por ejemplo, para entrenar las acciones de abrochar, picar, apretar, golpear, modelar o recortar necesitaremos materiales como botones, punzones y herramientas de plástico, moldes, tuercas...
Los juegos de imitación
En los juegos de imitación, como su propio nombre indica, los niños tratan de copiar, imitar los sonidos, los gestos o cualquier acción.
A los siete meses de edad, el bebé produce las primeras imitaciones, para ir ampliando y perfeccionando esta habilidad durante toda la infancia. Los cinco lobitos es un ejemplo claro de juego de imitación: el educador realiza el movimiento con las manos y el niño lo imita tras observarlo.
Para que el niño pueda imitar debe desarrollar antes algunas capacidades, como son las de atender, discriminar y memorizar, para, de esta manera, poder dar respuesta a los gestos del adulto.
En los juegos de imitación se trabajan con los niños acciones que deberán reproducir (como saltar como una rana, nadar como peces, volar como pájaros...), imitar sonidos de la naturaleza y del entorno (como el ruido del tráfico, un trueno, sonidos de animales, la lluvia, el ruido de un cristal al caer...) y, por último, reproducir los sonidos de roles sociales (como imitar a un policía, a mamá o papá...).
Una actividad muy interesante en este sentido es cantar canciones acompañadas por gestos para que ellos los imiten. Los educadores cantan una canción y los niños cantan al mismo tiempo que responden con gestos. Un ejemplo de este tipo de canción es el siguiente:
Yo se palmear, con mis manos palmeo así...
Yo se palmear, en mis piernas yo palmeo así...
Yo se palmear, en la mesa yo palmeo así...
Yo se palmear, en el suelo yo palmeo así...
Con esta pequeña canción, cantada por el educador, los niños van memorizando la letra y los gestos para poder reproducirlos cada vez con más precisión.
Con los juegos de imitación podemos enseñar y ayudar a los niños a entender, comprender, gestionar y reconocer los sentimientos de los demás y los suyos propios.
Nota
El juego heurístico proviene de la palabra griega eurisko, que significa descubrir. Es una actividad que se realiza con niños en edades comprendidas entre 12 y 24 meses de edad, entre sus objetivos están: descubrir, investigar, experimentar nuevas sensaciones, explorar, reforzar, afianzar la libertad de movimiento, etc. Su propósito es despertar los sentidos, texturas, formas, tamaños y aspectos, por lo que el niño o niña se desplaza hacia los distintos puntos donde están colocados los objetos y los manipulan libremente. El material puede ser muy diverso, como, por ejemplo: objetos naturales, materiales de la naturaleza, madera, metálicos, papel y cartón, tela, piel, goma y fieltro, esponjas...
El juego simbólico
El juego simbólico es un claro ejemplo de juego de ficción. En este, los niños dan nuevos y variados significados a los objetos que se presentan en el entorno, por ejemplo, dos niños que juegan a celebrar una corrida de toros en donde uno es el torero y el otro, el toro, o un palo de escoba transformado en un caballo, o cuando juegan a los médicos y un niño pone inyecciones a otro, etc.
Este tipo de juegos se inicia aproximadamente hacia los dos años.
Gracias al juego simbólico, el niño desarrolla conocimientos sobre los roles sociales y aprende a controlar sus emociones.
En el juego simbólico, los niños pueden jugar solos y en grupo. Para que esto ocurra, el niño anteriormente ha debido tener experiencias similares a las que representa mediante el juego. Es decir, para poder imitar, antes ha tenido que poder observar la conducta en un modelo.
Ejemplo
Cuando los niños juegan a las casitas, cada uno tiene su rol (padre, madre, hijo, incluso, a veces, alguno hace de animal de compañía). Otro ejemplo cotidiano puede observarse cuando el niño coge el teléfono de juguete y finge llamar a su madre para que venga a recogerlos a la escuela infantil (control de emociones).
Los juegos verbales
Los juegos verbales estimulan el desarrollo del lenguaje. Se inician desde los pocos meses, cuando los papás hablan a los bebes y, posteriormente, se imitan estos sonidos.
Existen distintos tipos de juegos verbales:
1 Juegos de expresión oral: se inician con los juegos preverbales, como son el balbuceo, los gorjeos, las vocalizaciones..., en los que se imitan y repiten los sonidos reproducidos. Los juegos de preguntas y respuestas o los de vocabulario son ejemplos claros de este tipo de juegos. Un cuento es un buen recurso para este tipo de juegos, ya que, gracias a la lectura de un cuento, se pueden aprender palabras nuevas y podemos hacer preguntas sobre él, favoreciendo la expresión oral del niño.
2 Juegos de comprensión oral: a través de los cuales podemos evaluar el reconocimiento y la diferenciación de las expresiones orales de los niños. Cuando le decimos a un niño que llame a otro estamos utilizando la comprensión oral, ya que es necesario que comprenda nuestra orden para realizarla. Por ejemplo, si le preguntamos a un niño “¿dónde está Marcos?” Esperamos que identifique a Marcos, lo localice y responda el lugar en el que se encuentra. También se consigue entrenar la comprensión oral cuando se cuenta un cuento y se realizan preguntas tras él, que los niños deben contestar.
3 Juegos para la mejora de la pronunciación y la articulación de los sonidos: aquí podemos utilizar como recursos didácticos las poesías, los trabalenguas, las retahílas, las rimas y algunas palabras que inciden en la pronunciación en determinados sonidos.
4 Juegos de onomatopeyas: las onomatopeyas que más les llaman la atención son las referentes a los animales y las que se presentan en su entorno más inmediato.
Los juegos de soplar (pompas de jabón, velas, molinillos de papel, ...) además de ser muy divertidos, son ejercicios recomendados para controlar el soplo, las salidas de aire, la respiración, aprender a modular la boca, y entrenar los músculos bucinadores, ... favoreciendo así la pronunciación.
Sabía que...
Hablarle frecuentemente a un bebé, cantarle, leerle cuentos... estimula su capacidad para hablar.
Juegos de razonamiento lógico
Estos juegos favorecen el conocimiento lógico-matemático. En ellos interviene la capacidad de los niños para relacionar objetos con sus características o con las de otros. Los juegos de asociación, clasificación, numeración, etc. son específicos para trabajar el razonamiento lógico. Pero, es importante tener en cuenta que los niños necesitan estar concentrados y lo más atentos posibles a la actividad realizada.
Estos juegos deben evitar las ambigüedades y utilizar características claras para que no confundan al niño. Si utilizamos dos cualidades en positivo o en negativo, el juego será más complejo y requerirá una mayor concentración del niño.
Las tablas de doble entrada se utilizan bastante en este tipo de juegos. En ellas el alumno deberá ir identificando los objetos según sus características y rellenar las filas y las columnas. Otro tipo de juegos de razonamiento lógico son aquellos en los que el niño o niña debe relacionar parejas por sus características.
Juegos de relaciones espaciales
Este tipo de juegos puede realizarse en grupo o individualmente, con apoyo de juegos educativos creados con este objetivo o con cualquier tipo de material. Según el planteamiento que se haga, los juegos de relaciones espaciales pueden estar vinculados con los juegos visuales y con los motores.
Todos los juegos que requieren reproducir escenas o imágenes, como pueden ser los puzles, le exigen al niño observar y reproducir las relaciones espaciales implicadas entre las piezas.
También en el juego motor se experimentan sensaciones espaciales, como acercarse, alejarse, ponerse al lado, subirse encima, esconderse detrás... En algunos juegos verbales los niños deben ir colocándose de acuerdo con la orden dada: encima del banco, detrás de la silla, dentro del armario, etc.
Juegos de relaciones temporales
Estos juegos están estrechamente ligados a los auditivos. Los juegos sonoros y musicales son propicios para percibir las nociones temporales, por ejemplo, solicitándole al niño que diferencie la duración de un sonido, señalando cuándo empieza y cuándo termina.
El juego motor mejora la percepción de la velocidad (despacio, rápido).
Existen materiales para favorecer la percepción temporal. Son materiales con secuencias temporales, como pueden ser las historias secuenciadas, las viñetas de los comics, etc.
Para entrenar el manejo de la medida del tiempo existen materiales, como relojes y calendarios, que ayudan a conocer los días de la semana, los meses del año, las estaciones y el uso del reloj, aunque no será hasta después de la etapa de infantil cuando estos aprendizajes sean asimilados correctamente por los niños.
LUNES | MARTES | MIÉRCOLES | JUEVES | VIERNES | |
Ejemplo de calendario con pictogramas para educación infantil
Juegos de memoria
La repetición es un requisito indispensable para que la memorización sea posible. Es difícil pensar que los niños recuerden un juego sin haberlo repetido varias veces.
Existen varios tipos de juegos que desarrollan la capacidad para reconocer experiencias anteriores. Los niños, gracias a su memoria, aprenden los juegos de otros niños o de su educador.
Sabía que...
Es aconsejable hacer varias veces la misma actividad o cantar la misma canción o contar el mismo cuento, etc., ya que los niños disfrutan con la repetición de lo conocido, a la vez que les ofrece seguridad.
Hay diferentes tipos de memoria y cada una de ellas nos permite reconocer y recordar nuestras experiencias anteriores relacionadas con la percepción de los sentidos, así podemos diferenciar entre memoria visual, memoria auditiva, memoria táctil, memoria gustativa y memoria olfativa.
Para que los niños y niñas no se frustren y se desanimen a la hora de los estudios, es muy importante trabajar la memoria a corto y largo plazo, empezando desde pequeños con canciones, rimas, trabalenguas, pareados, cadenas de palabras, parejas de imágenes, imágenes descriptivas, ... y finalmente enseñarles las reglas nemotécnicas.
Para estimular la memoria visual en clase, usaremos a los propios niños, para que se observen unos a otros y, en base a esa observación, contesten a preguntas formuladas por el educador, relativas a las características físicas de sus compañeros. Un buen momento para aprovechar y entrenar este tipo de memoria es en una excusión o salida al exterior, formulándoles preguntas sobre lo que ven.
La memoria auditiva se trabajará pidiendo al niño o niña que trate de recordar diferentes sonidos, aprendiendo canciones, poesías sencillas, trabalenguas... Otras actividades para desarrollar la memoria auditiva pueden ser aquellas basadas en reconocer el sonido de diferentes instrumentos, del entorno más cercano.
Para afianzar la memoria táctil, podemos realizar una actividad consistente en introducir diferentes objetos en una bolsa que no se transparente. A los niños se les mostrarán estos objetos antes de que sean introducidos en la bolsa y, después, irán metiendo la mano y tocándolos para intentar reconocerlossolo por el tacto. Una variante de este juego puede ser introducir el mismo objeto con distintos tamaños y el alumno deberá reconocer por el tacto el tamaño que este representa (si es el cuadrado pequeño, mediano o grande, por ejemplo).
En los juegos de memoria olfativa y memoria gustativa los niños tratarán de reconocer e identificar olores y sabores.
Sabía que...
La estimulación del sentido auditivo aumenta la conexión entre neuronas en el cerebro del bebé.
Juegos de fantasía
Estos juegos sumergen al niño en un mundo imaginario, en el que se da rienda suelta a la fantasía creando historias.
Los juegos de exterior permiten al niño desarrollar bastante el juego de fantasía y les lleva a crear mundos fantásticos según el entorno en el que se encuentren y los recursos que tengan.
Para el juego de fantasía realizado en interiores es aconsejable que los niños puedan disponer de disfraces, telas y trapos viejos, que les permitan convertirse en personajes fantásticos.