Читать книгу Pensadores de frontera - Jaime Nubiola Aguilar - Страница 6
ОглавлениеPRESENTACIÓN
AUNQUE HAN PASADO CASI CUARENTA años, todavía resuenan en mis oídos las palabras pronunciadas por san Juan Pablo II en la Facultad de Derecho de la Universidad Complutense en la mañana del 3 de noviembre de 1982: «La síntesis entre cultura y fe no es solo una exigencia de la cultura, sino también de la fe. Una fe que no se hace cultura es una fe no plenamente acogida, no totalmente pensada, no fielmente vivida». Me impactaron aquellas palabras —que el papa reiteraría en muchos otros lugares— y me impresionó muchísimo el aplauso atronador —que se prolongó durante tres o cuatro minutos— de los representantes de las universidades, las academias reales y el mundo de la investigación y el pensamiento que abarrotábamos el aula, revestidos de nuestros trajes académicos. En cierto modo, desde aquel día adopté como lema para mi trabajo como profesor universitario aquellas palabras que urgían a una valiente y renovada síntesis entre la cultura y la fe.
Este libro aspira a ser una invitación a repensar más a fondo la fe en el horizonte cultural de nuestro tiempo, precisamente para poder acogerla más plenamente e intentar vivirla más fielmente. En uno de sus capítulos se cuenta cómo el poeta estadounidense Christian Wiman se acercó a la fe gracias a aquel pasaje de Simone Weil de los dos prisioneros confinados en una cárcel. Entre ellos hay una gruesa pared de piedra y con el paso de los años aprenden a comunicarse mediante toques en la piedra. La pared es lo que les separa, pero también es el único medio que tienen para comunicarse. «Es lo mismo entre nosotros y Dios —explica Weil—. Lo que separa es lo que une». Para Wiman el muro de piedra es el lenguaje poético, pues al otro lado del esfuerzo creativo siempre está Dios. Cuando la cultura contemporánea parece alejarse de Dios, los ojos de la fe descubren que esa cultura realmente puede unirnos a Él.
Merece quizá la pena transcribir las palabras finales de aquel discurso del papa Juan Pablo II en la Complutense a los representantes del mundo de la cultura en nuestro país: «Ojalá que, en vuestro deber bien cumplido, en vuestro servicio a la humanidad, encontréis esa Verdad total, que da sentido pleno al hombre y a la creación. Esa Verdad que es el horizonte último de vuestra búsqueda». Me parece que quienes buscan la verdad en el arte, la poesía o la filosofía están en última instancia buscando a Dios. Por eso son pensadores de frontera, porque tienden puentes y abren caminos que nos ayudan a cada uno de nosotros a pensar más y quizás a acercarnos a Dios.
En cada capítulo presento a un pensador o pensadora del pasado reciente cuya lectura me ha interpelado y que me parece del todo relevante para seguir pensando hoy. Se trata de exposiciones breves que, sobre todo, invitan a leer directamente los textos del autor abordado en cada caso para aprender qué nos dicen hoy a cada uno de sus lectores. Los veinte autores presentados son ampliamente conocidos. Cuando en el cuerpo del texto no se desarrolla el perfil biográfico, incluyo una nota inicial con algunos datos básicos de su biografía.
He secuenciado los capítulos por orden alfabético de apellidos y, aunque el volumen tiene gran unidad, pueden ser leídos cada uno independientemente. Varios capítulos han sido escritos en colaboración con otros autores expertos en los pensadores estudiados: a ellos va mi gratitud.
Agradezco también al editor Santiago Herraiz su implicación y ayuda para dar forma final a este volumen. Además, agradezco las correcciones a mi borrador de Marinés Bayas, María Rosa Espot, Ainhoa Marin y Ramon Nubiola.
Pamplona, 28 de enero 2020