Читать книгу Guía Práctica para una transición exitosa de la empresa al nuevo paradigma de la Administración Electrónica: cómo adaptarse a la Ley, evitar fracasos digitales e impulsar la empresa al siguiente nivel de eficiencia - Jan Sarsanedas Coll - Страница 6
Prefacio
ОглавлениеSi buscamos “revolución digital” en internet nos aparecen millones de entradas sobre el tema. Sin embargo, es difícil encontrar alguna información clara, útil y fácilmente aplicable sobre cómo afrontar desde las empresas y organizaciones la transformación digital de las Administraciones Públicas.
Todos sabemos que la era digital supone un cambio en las reglas de juego para nuestras empresas u organizaciones. Pues bien, esto es igualmente cierto para las Administraciones Públicas y, por consiguiente, lo es también para nuestras relaciones con ellas.
Siempre que hablo con directivos o abogados de empresas u organizaciones, me preocupo por cómo van las cosas y mi misión es ayudarles a anticiparse y resolver las problemáticas jurídicas que puedan tener con las Administraciones Públicas. Y las comunicaciones electrónicas con las Administraciones Públicas es uno de los aspectos que me han ocupado en los últimos años, desde que se aprobaron las llamadas leyes siamesas, las Leyes 39 y 40 de 2015.
Aunque la Administración electrónica había dado pasos antes de que se aprobaran esas leyes, es con ellas que se estableció la obligación para las personas jurídicas de relacionarse con las Administraciones Públicas de forma 100% electrónica, con unos potenciales daños para las empresas que no lo hagan (acceso tardío a las notificaciones, presentación defectuosa de documentos, pérdida de oportunidades, quiebras de seguridad y otros fracasos digitales).
Así pues, una de mis preguntas para esos directivos o abogados es si están adaptados a la Administración electrónica, si es que no han venido ellos antes con esa inquietud. Algunas empresas que se relacionan habitualmente con las Administraciones Públicas son conscientes de los riesgos de incumplir la ley y se han apresurado a tomar cartas en el asunto. En otros casos, por el contrario, me he encontrado con respuestas del tipo “No hemos tenido ningún problema” o “Tenemos un certificado digital para realizar las gestiones con la Administración”...
En un mundo caracterizado cada vez más por la demanda de inmediatez es tentador creer que todo se resuelve con un certificado digital o pensar que si no hemos tenido ningún problema relacionado con la Administración electrónica es que estamos a salvo de todo riesgo. Pero esto sería como pensar que para tener agua corriente en casa es suficiente con abrir el grifo. Lo cierto es que el grifo sirve de poco si no tuviéramos toda la infraestructura que hace posible la captación, depuración, transporte y distribución del agua potable desde su fuente hasta nuestras casas.
En este caso pasa algo parecido. Una adaptación exitosa a la Administración electrónica no es realizar trámites con las Administraciones Públicas mediante certificados digitales sino tener un sistema integral (organizativo, procedimental y tecnológico) que maximice las oportunidades de nuestra empresa u organización en la nueva era digital y minimice los riesgos de fracaso digital.
Los varios millares de Administraciones Públicas que hay en España y la disparidad en la forma en que aquéllas están avanzando hacia su transformación digital, juntamente con las múltiples áreas de una empresa u organización que se pueden ver afectadas y los varios aspectos a tener en cuenta en las relaciones con las Administraciones Públicas, hacen que un proyecto de adaptación al nuevo paradigma de la Administración electrónica pueda resultar muy complejo.
Este libro es una invitación a reflexionar sobre las implicaciones de la Administración electrónica para una empresa u organización. Éstas pueden ser variadas en función de la empresa u organización y del volumen y tipo de relaciones que tenga con la Administración Pública. Pero en todos los casos habrá relaciones a gestionar para evitar daños a la empresa.
En las siguientes páginas, basándome en mis ideas, estudio y experiencia, comparto lo más importante de lo que sé hasta ahora sobre Administración electrónica y propongo una sistemática para abordar un proyecto de adaptación a la Administración electrónica que espero resulte útil como orientación para quienes deseen acometer este proyecto, asesorar profesionalmente en el mismo o sencillamente tener un mayor conocimiento en este ámbito.
Además de mi experiencia práctica y mi trabajo de investigación sobre la materia, he tenido el enorme privilegio de contar con la complicidad del que sea considerado por muchos como el redactor de las Leyes 39 y 40 de 2015 y uno de los artífices de la Administración electrónica, tal y como ha sido concebida en la actualidad por aquellas dos leyes, el gran David Mellado.
A ello debo añadir la suerte de poder asistir a primera fila en el avance de la Administración electrónica desde una atalaya profesional excepcional, acompañado de brillantes profesionales multidisciplinares y expertos en Administración electrónica. Y he tenido la satisfacción de escuchar de primera mano a los responsables que lideran la digitalización de la Administración hablar sobre el futuro de la misma. En este sentido, me gustaría destacar a Fernando de Pablo Martín, Secretario General de Administración Digital en el Ministerio de Política Territorial y Función Pública, y a Javier Hernández Díez, Subdirector General de Tecnologías y Servicios de la Información en el Ministerio de la Presidencia para las Administraciones Territoriales.
Con todo, esta obra no tiene la ambición de ser un tratado doctrinal sobre la materia y se titula “guía práctica” porque mi objetivo con este libro es que usted tenga un mapa para interpretar el nuevo mundo de la Administración electrónica y proporcionarle los fundamentos para emprender de forma más sencilla, completa y exitosa un proyecto de adaptación a la Administración electrónica y que esté en mejor disposición para sacarle todo el partido.
La historia que se narra es ficticia, pero ilustra un caso hipotético que podría ser real. Los fracasos digitales que se explican son exactamente los mismos riesgos a los que se enfrentan las empresas. Y las recomendaciones que siguen los personajes podrían aplicar igual en el mundo real.
Aunque nadie conoce qué nos depara el futuro, hoy ya existen algunas iniciativas públicas y privadas que indican una tendencia: las comunicaciones electrónicas con la Administración no son el fin sino el inicio de la revolución digital en las relaciones entre empresas y ciudadanos con las Administraciones Públicas y ha abierto la puerta al uso de nueva tecnología (inteligencia artificial, big data, blockchain, internet de las cosas, etc.) para conseguir mayores niveles de eficacia y eficiencia. De aquí que, en mi opinión, si en el corto plazo el objetivo es adaptarse al cambio que supone la Administración electrónica, en el medio y largo plazo las organizaciones deberían estar pensando en cómo sacar más partido al cambio de paradigma digital.
Espero transmitirle el convencimiento de que es posible convertir el reto de la Administración electrónica en una palanca de progreso para su empresa u organización. Mi visión es que, para ello, cada vez será más indispensable tener una organización, procesos, arquitectura tecnológica y cultura empresarial resilientes y capaces de adaptarse rápida, suave y eficientemente a los constantes cambios de una realidad líquida como consecuencia del crecimiento exponencial de la tecnología. Este cambio de entorno puede dar mayor ventaja competitiva a aquellas empresas que aprovechen esas oportunidades para ser más eficientes y para encontrar nuevas formas de seguir aportando valor o incluso aumentar el valor que aportan a la sociedad.
Deseando que en estas páginas encuentre más de lo que esperaba, reciba mis mejores deseos. Buena suerte.
Barcelona, primavera de 2019.
Jan Sarsanedas
P.S. Estaré encantado de que comparta conmigo su historia y anécdotas de adaptación a la Administración electrónica a través de mi cuenta de LinkedIn y Twitter.