Читать книгу Inteligencia artificial y defensa. Nuevos horizontes - José Luis Domínguez Alvarez - Страница 37

Antes de iniciar cualquier actividad de diseño e implantación de soluciones basadas en IA, se debe conocer fielmente el proceso sobre el que se va a actuar. Para ello pueden utilizarse las siguientes cinco preguntas para saber el estado de madurez del proceso a refactorizar (sea o no con IA): ¿Qué proceso manual resulta tedioso en la organización?, ¿Qué problemas se resuelven en dicho proceso y por quién dentro de la organización?, ¿Qué datos son necesarios para resolverlo y qué respuestas se esperan?, ¿Qué aporta la IA existente a este proceso y qué desarrollos son necesarios abordar?, ¿Cómo se validarán los resultados del modelo?

Todas estas preguntas permiten minimizar el impacto y el riesgo sobre el futuro desarrollo de la solución deseada. Conocer el proceso y a sus responsables permite ubicar las ineficiencias y los puntos de mejora desde el inicio. Identificar las fuentes de datos y las respuestas que se esperan permite abordar el problema desde el punto de vista de disponibilidad de información a tratar. Conocer los diferentes algoritmos de IA permite seguir el principio básico de minimización de complejidad o también llamado Principio de Occam (la mejor solución suele ser la más sencilla). Conocer cómo evaluar los resultados permite discriminar si se ha mejorado el propio proceso en sí y calcular, por ejemplo, el retorno de la inversión.