Читать книгу El precio de la democracia - Julia Cage - Страница 8
Agradecimientos
Оглавление¿Por qué resulta problemático que algunos ciudadanos contribuyan financieramente mucho más que otros al funcionamiento de la democracia, por ejemplo comprando medios de comunicación, financiando think tanks o haciendo donaciones directas a los partidos políticos? La idea de este libro germinó en mi mente hace cuatro años, cuando ponía el punto final a mi libro anterior, Salvar los medios. Las distintas etapas de su gestación se dieron junto con la escritura de los artículos científicos con los que me he nutrido. En particular, mi artículo de investigación “The Price of a Vote: Evidence from France, 1993-2014” (CEPR Discussion Paper, 2018) desempeñó un papel sumamente importante en la escritura de este libro y los resultados sobre los efectos del gasto electoral en un país como Francia no hicieron más que reforzar mi convicción de la necesidad de un estudio comparativo de los diferentes modelos de financiamiento público y privado de la democracia a lo largo del tiempo. Mis primeros agradecimientos, entonces, son para mi coautora Yasmine Bekkouche, con quien llevé a cabo dicha investigación en Francia. También para Thomas Ferguson y el Institute for New Economic Thinking [Instituto para el Nuevo Pensamiento Económico] (INET), por su confianza y por haber accedido a financiar este proyecto de investigación y la importante labor de recolección de datos que implicó.
Este libro debe mucho, también, a todos los otros investigadores con quienes he estudiado y sigo estudiando hasta hoy el financiamiento privado de la democracia, pues la investigación es un largo río y está muy lejos de interrumpir su flujo. En la actualidad, Malka Guillot y yo trabajamos con datos fiscales de Francia para comprender mejor el papel de las desigualdades económicas en el reforzamiento de las desigualdades políticas y, en particular, los determinantes de las donaciones a los partidos políticos y las campañas electorales. Su dominio de los archivos FELIN ha resultado valiosísimo. Agradezco al Comité du Secret Statistique [Comité de Secretos Estadísticos] y al Centre d’Accès Sécurisé aux Données [Centro de Acceso Seguro a la Información] por habernos permitido trabajar con esos archivos.
Con Edgard Dewitte hemos abordado 150 años de historia británica para comprender mejor los efectos de los gastos electorales en los resultados de distintos partidos del Reino Unido. Debo agradecerle su confianza, pues remontarnos a la época en que los candidatos ofrecían viajes en carruaje a los electores no es cosa fácil. Agradezco doblemente a Edgard, pues a lo largo de la escritura de este libro me ayudó a recolectar documentos y a comprender la legislación de diferentes países. También tengo un agradecimiento especial para Eliza Mougin, que ha sido una asistente sin par, siempre dispuesta a añadir a sus talentos de investigadora su destreza como encuestadora en el campo, a veces minado, de la transparencia de los partidos políticos; así como para Benedetta Ruffini, cuyas investigaciones sobre Italia han resultado indispensables; para Alexandre Deine, que me ayudó con mi estudio de Alemania, y para Clara Martínez Toledano, quien documentó el caso de España. A veces, la ley es de difícil acceso para quienes no están acostumbrados a descifrar todas sus sutilezas y debo agradecer a Bastien Cueff por sus esclarecedoras explicaciones jurídicas.
En Sciences Po Paris [Instituto de Estudios Políticos de París], donde soy profesora-investigadora desde 2014, tuve la oportunidad de aprovechar un ambiente de investigación multidisciplinario, sobre todo en el Laboratoire Interdisciplinaire d’Évaluation des Politiques Publiques [Laboratorio Interdisciplinario de Evaluación de Políticas Públicas] (LIEPP), cuyo eje “evaluación de la democracia” tuve el placer de codirigir. Los estudiantes del instituto, provenientes de todos los países —desde Venezuela hasta Benín, pasando por China y Australia—, son una formidable fuente de inspiración, y mis diarias y numerosas interacciones con ellos, sobre todo en el marco de mis cursos sobre el futuro de los medios de comunicación, alimentan mis reflexiones y mi investigación.
A lo largo de los últimos años, mis investigaciones se han nutrido también de mi colaboración con Nicolas Hervé y Marie-Luce Viaud del Institut National de l’Audiovisuel [Instituto Nacional de lo Audiovisual] (INA), y de nuestras acaloradas discusiones sobre la crisis de los medios y la democracia, y sobre el recurso del sorteo. Marie-Luce, que tanto me enseñó y me aportó, falleció prematuramente y no alcanzó a leer este libro. Me da por pensar que le habría gustado, aunque sólo puedo imaginar las discusiones que no tendremos. Nos haces mucha falta, Marie-Luce.
Gracias a todo el equipo de Wedodata, en particular a Karen Bastien, Brice Terdjman y Nicolas Boeuf, que aceptaron acompañarme en este libro y dieron vida a las gráficas, que hasta entonces eran demasiado escolares. Gracias a ellos también por su formidable trabajo en el sitio leprixdelademocratie.fr, herramienta indispensable para continuar el debate después de la lectura de este libro.
Mi editora, Sophie Kuvoyanis, me ha dado campo libre y confianza total. Se lo agradezco. Gracias también a Agathe Cagé, que con su relectura siempre atenta me abrió los ojos a algunos puntos débiles de mi escritura y a la necesidad de hibridación entre los intelectuales.
Finalmente, gracias a Thomas, que ha vivido cada línea de este libro de manera cotidiana. Gracias por tu apoyo infalible, tu paciencia a toda prueba, tus invaluables contribuciones intelectuales y, sobre todo, tu amor infinito, que me dio la energía para llevar este proyecto a buen puerto.