Читать книгу Versos libres encadenados - Ladislao Feder - Страница 16
ОглавлениеVuela
¡Te acomodé las plumas, te apreté las alas, te di un abrazo y murmuré en tus oídos! ¡Tú puedes! Seguidamente te empujé al vacío. Un miedo atroz invadió por completo mi cabeza, se llenó de preguntas, se inundó de interrogantes, me dije “Habré hecho bien mi trabajo”,. En ese mismo instante vi que desplegaste las alas y diste tu primer aleteo, mi corazón se aceleró y se llenó de orgullo, mi querido pichón había aprendido a volar, y recordé cuando lo tuve en mis brazos por primera vez, recordé sus primeras palabras, recordé también que estaban extasiadas de rr, comencé a reír imaginando un sinfín de travesuras. Su primer día de jardín de infantes, su primera mascota que, aunque no lo crean, fue una centolla, después comprendió que también había perros, gatos y hámster. Puedo recordar todos sus días vividos porque quizás haya sido el hijo que más pude disfrutar, traté de darle libertad, lo llené de buenos consejos, no lo perseguí, solo quise que solo él pueda entender que lo malo es malo y lo bueno es bueno, le enseñé que a la vida hay que disfrutarla, pero también hay que respetarla. Lo preparé para que pueda volar solo, pero también que puede contar siempre con la bandada. No quedaron cosas por decir, aunque en verdad nunca alcanza la vida para decirlo todo. Pero yo creo que en esas están las más importantes. Hoy emprendes tu vuelo, hoy emigras como lo hacen las golondrinas, hoy vas a poner en práctica lo que te hemos enseñado, hoy comienzas a preguntarte por qué no presté atención en algunas cosas. Hoy comienzas a llenarte de interrogantes, pero también sé que te vas a armar de soluciones. Que tengas un hermoso vuelo y acuérdate que todo lo que hagas es para ti, no te debo nada, no me debes nada, comienza a llenarte de magia, aprende del mundo, llénate de sabiduría, saber desenvolverte te hará más hábil para todo. Respétate, respeta a los demás y ¡¡¡déjame repetirte algo!!! ¡¡¡Vamos que tú puedes!!!