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ОглавлениеPRÓLOGO DE ZHANG YUN
La primera vez que me encontré con Lu Shengli fue en casa de mi maestro Luo Shuhuan en 1975. Por aquel entonces él acababa de volver a Pekín después del servicio militar. Para tomarse un descanso después de años de trabajo físico muy intenso, quería probar algo diferente. La caligrafía china es muy buena para calmar la mente y también el cuerpo, y eso es lo que él estudiaba con el maestro Luo. Después de aquel primer encuentro no nos volvimos a ver mucho durante un año. Al final de aquel período, él ya estaba lo suficientemente regenerado, y volvió a la práctica de las artes marciales. Aprendíamos y practicábamos juntos todo el tiempo, y desde entonces hemos sido buenos amigos.
Lu Shengli empezó su entrenamiento en las artes marciales a los 10 años de edad. Estudió muchos estilos diferentes, entre ellos Shuai Jiao (lucha libre china), Shaolin Quan y Tongbei Quan. Debido a su práctica dura desde una edad muy temprana, sus técnicas básicas de kungfu son extremadamente sólidas. Mientras estaba en el ejército también recibió entrenamiento en el combate cuerpo a cuerpo. Empezó su entrenamiento en las artes marciales internas cuando empezamos a vernos asiduamente. Al maestro Luo le gustaba que Lu Shengli practicara siempre con diligencia y que aprendiera rápido; por esta razón, más tarde el maestro Luo le presentó a su propio maestro, el gran maestro Wang Peisheng. Esto le dio a Lu Shengli la oportunidad de recibir un entrenamiento intensivo y privado directamente con el gran maestro Wang. Durante muchos años estuvo yendo a casa del maestro Wang dos o tres veces por semana. Su objetivo esencial era principalmente el Bagua, posteriormente incluyó el Taichi, el Xingyi, armas y Qigong.
En 1984, cuando el clima político cambió y los rituales tradicionales fueron permitidos de nuevo, Lu Shengli y un servidor fuimos aceptados, mediante una ceremonia tradicional, como discípulos internos del maestro Luo. En esta ocasión, el gran maestro Wang nos dio a Lu Shengli y a mí el permiso especial de abrir las puertas inmediatamente y aceptar a nuestros propios discípulos. Esto fue un gran honor, una recompensa por nuestro duro trabajo, pues fuimos los primeros de nuestra generación en tener ese permiso.
Lu Shengli es un pensador profundo, alguien muy serio y muy meticuloso. Cree firmemente que la verdad sólo puede venir de la experiencia auténtica. En su entrenamiento nadie puede convencerle de nada sin mostrarle antes tanto las bases teóricas que expliquen por qué algo funciona de una manera determinada, como la aplicación, en la vida real, de las técnicas que concuerdan con esos principios básicos. Con cada técnica invierte una gran cantidad de energía física y mental. En el ámbito físico, muchas veces repite un sólo movimiento unas mil veces sin detenerse. En el ámbito mental, analiza cada técnica en detalle y confirma sus conclusiones utilizando situaciones de la vida real.
Durante muchos años, sin importar el tiempo que hacía, practicó al aire libre cada mañana a partir de las 5 de la mañana. Su nivel progresaba muy rápido. Por esta razón, el gran maestro Wang Peisheng escogió a Lu Shengli como su asistente para enseñar artes marciales. En 1993, cuando el gran maestro Wang fue a Estado Unidos para dirigir su primer seminario, escogió a Lu Shengli para que le acompañara.
Las artes marciales chinas tradicionales son algo más que simples técnicas de lucha. Estas técnicas están profundamente arraigadas en la cultura tradicional china, especialmente en las filosofías, y no pueden ir por separado. Por esta razón, cuando enseño artes marciales en Occidente, siempre aliento a mis estudiantes a visitar Pekín, ya que practicar estas artes en su ambiente original puede proporcionar un sentido más correcto y auténtico que forma parte integral de su comprensión. La necesidad de comprender las ideas tradicionales de las artes marciales chinas no puede pasarse por alto. Cada vez que mis estudiantes van a Pekín, Lu Shengli se hace cargo de todos los detalles de su entrenamiento y de su alojamiento. Debido al cuidado genuino que ha mostrado por todos los estudiantes, todo el mundo le admira tanto por su habilidad en las artes marciales como por su carácter.
Uno de los mayores obstáculos que tienen los estudiantes de las artes marciales internas es la transición del entrenamiento a la lucha. No es poco común que haya gente que practica artes marciales inter-nas durante muchos años y todavía no comprenda los principios de lucha, o no sepa cómo aplicarlos. Mucha gente no puede luchar, o no puede luchar utilizando básicamente técnicas externas. Después de muchos años de práctica, Lu Shengli se dio cuenta de este problema. Es por eso que, a partir de mediados de los años noventa, empezó a pensar cómo enfocar ese problema. Los resultados de esa investigación exhaustiva se presentan en este libro.
Bajo la guía del gran maestro Wang Peisheng, Lu destiló su vasta experiencia y ello dio como resultado esta nueva forma. En realidad, este libro describe algo más que una forma: también incluye principios y técnicas de entrenamiento. La esperanza de Lu es que el estudio de esta forma permita a la gente comprender de una manera más clara las artes marciales internas. Desde que empezó, ha recibido una buena respuesta por parte de gran número de personas, y por medio de muchas otras indicaciones ha tenido éxito con muchas más.
Cuando regresé a Pekín en 1997, Lu Shengli me mostró esta forma, y discutimos con gran detalle los principios y las técnicas incorporadas en ella. En ese momento le pedí que escribiera un libro, pero dijo que no estaba preparado; quería pasar más tiempo investigando. Conozco bien a Lu Shengli, y no forma parte de su naturaleza enseñar algo al mundo si antes no lo ha juzgado y lo ha considerado completamente satisfactorio en acuerdo con sus elevados parámetros. Así que no fue hasta dos años más tarde, con los ánimos del gran maestro Wang, cuando finalmente escribió este libro. Sin embargo, todavía dudaba, se preguntaba si ya estaría listo para publicarse. Cuando volví a Pekín en el año 2000, tomé una copia del manuscrito y me lo llevé a Estados Unidos. Le dije que no me importaba cuando lo publicara él en China, pero que yo seguía adelante y lo traduciría para que se publicara en Estados Unidos inmediatamente.
Empecé mis esfuerzos tan pronto como llegué. Mi estudiante Susan Darley me ayudó a traducir y a editar todo el libro. Mis otros estudiantes, Peter Capell, Paul Keane, David Ho, Paul Cote, Strider Clark y Vincent Sha, también contribuyeron de diferentes maneras. Estoy agradecido por todo su trabajo duro a la hora de crear la versión inglesa de este magnífico libro. Aquí también quiero dar las gracias al Sr. Jess O’Brien, cuya ayuda realmente hizo que la publicación de este libro fuera más fácil.
Debido a la gran diferencia que hay entre los trasfondos culturales de Oriente y Occidente, muchos conceptos y principios tradicionales son muy difíciles de traducir. Muchos conceptos y palabras no es posible traducirlos en Occidente con una sola palabra. Así que en este libro siempre tratamos de dar muchos ejemplos y utilizamos muchas maneras de ilustrar la misma idea con la esperanza de que juntas formen una imagen coherente de lo que la idea china original significa. Aunque lo hicimos lo mejor que pudimos, todavía encuentro frases cuyas traducciones pueden ser confusas, especialmente para los principiantes.
Cuando leas este libro, mantén estas observaciones en mente. Cuando abordes algunos puntos y surjan dudas, no te pares y no intentes captar la idea enseguida. Sigue adelante y lee los demás ejemplos y explicaciones que ofrecemos sobre el mismo concepto. Y haz lo mismo con cada concepto, sigue adelante y lee todos los conceptos relacionados con las artes marciales internas que presentamos en este libro. A continuación, después que lo hayas leído todo y hayas practicado un poco, vuelve a esos puntos en concreto. Verás que son más fáciles de entender cuando ya tengas una visión más global de todo el contexto.
Ésta es una de las limitaciones del lenguaje humano. Hay algunas cosas que no pueden ser plenamente expresadas sólo mediante el lenguaje o comprendidas perfectamente sólo con la lectura de un libro. Como en cualquier otra técnica de alto nivel, la única manera de aprender es con una enseñanza frente a frente y con una práctica diligente. La verdadera comprensión sólo puede obtenerse mediante la práctica dura y la reflexión profunda. Básicamente, este libro ofrece una buena referencia para tu práctica.
Estoy contento de que gracias a este libro haya más personas que tengan la oportunidad de obtener una comprensión más profunda de las artes marciales tradicionales chinas, y espero que haya muchos estudiantes que se beneficien de él. Realmente creo que este valioso arte no pertenece a ningún grupo, ni tampoco a ningún país, sino que pertenece a toda la humanidad.
Zhang Yun
Pittsburgh, Pennsylvania