Читать книгу Diario pinchado - Mercedes Halfon - Страница 25
ОглавлениеMiércoles 20, tarde
Pasé por la casa de camping que hay en la Rosenthaler Straße buscando alguna solución para el colchón pinchado. Pensaba en parches de goma, como de bicicleta, algo que nos permitiera usarlo un tiempo más.
Me quedé mirando largo rato una cartelera con volantes de excursiones y más papelitos con propuestas campestres que me pregunto dónde ocurrirán. Me llamó la atención una actividad a la que invitaban en inglés. Era un «campeonato de orientación». No conocía la existencia de tal disciplina; obviamente me sorprendió.
Al parecer se practica en grupo y en lugares abiertos. Su objetivo es desarrollar la capacidad para conocer en todo momento la ubicación del practicante con respecto a lo que le rodea. Según leí en internet se puede realizar a cualquier edad, con un mapa básico y una brújula. La idea es llegar a destino usando ese único instrumento de orientación. Puede ocurrir que haya que subir montañas, atravesar bosques o bordear lagos, todo depende del paisaje. Por eso también lo entrenan montañistas y militares, como una herramienta para sus propios fines. Al profesor se le dice «orientador». El practicante puede recibir algunos elementos extra, como una cantimplora, una baliza o un cuchillo.