Читать книгу Entrenamiento personalizado y alimentación - Nacho Villalba - Страница 8
ОглавлениеPensando en vosotros
«Cree en ti mismo, cree en lo que haces y sé constante para conseguir tus sueños.»
Nacho Villalba
Personal trainer / Entrenador personal
Éste es, sin duda, uno de los valores de este libro, que surgió con la idea de compartir con vosotros el método que tan buenos resultados está dando a las personas que lo siguen. La finalidad de la obra es destacar tanto la importancia de saber entrenar como la de tener una buena alimentación, conociendo las características de los suplementos deportivos en cuanto a su efectividad y cómo aprovecharlos.
Este método es la combinación de diferentes sistemas de entrenamiento y un plan de nutrición con proteínas de alto valor biológico, hidratos de carbono de índice glucémico medio y bajo, fibra y grasas en su mayoría insaturadas. Se sustenta en los hallazgos de estudios científicos avalados por universidades, centros de alto rendimiento y la opinión de distintos autores y expertos dedicados a la medicina deportiva. El método es un conjunto de conclusiones, basadas en todo lo antedicho, que alcanzan todo su significado en el programa llevado a cabo con Aitor Ocio.
No lo presentamos como «el método definitivo» ni como «el mejor», sino como un método que funciona: hipertrofia muscular, reducción de grasa corporal, tono muscular. Su efectividad está probada en personas de ambos sexos, de diferentes edades y con diferentes objetivos. Debemos marcarnos objetivos a la altura de nuestras posibilidades, siendo conscientes de que cambiar nuestro físico lleva tiempo y constancia, y supone también corregir ciertos hábitos de vida.
Ahora que tienes el libro en tus manos, piensa que su intención es la de ayudarte a conseguir una mayor calidad de vida: para unos tener el físico deseado, para otros tener una buena salud y forma física, y para los más maduros cumplir años sin dejar de ser joven.
Nacho Villalba
Un trabajo de equipo
Quiero compartir con vosotros como viví personalmente junto con Aitor Ocio la preparación para la fotografía de la portada de Men’s Health y desvelar algunas anécdotas curiosas durante su desarrollo. Agradezco a los lectores de Men’s Health y a Ledo Sport, apoyado por la feria Fitness y Bodybuilding, que Aitor consiguiera ser proclamado el «Mejor Cuerpo de España» (nunca pensamos que le concederían tan preciado galardón ni fue nuestro objetivo). Todo empezó cuando Aitor me comentó que la revista Men’s Health contaba con él para una de sus portadas. En un principio no parecía muy difícil, ya que Aitor lleva una vida basada en el deporte y en los buenos hábitos alimenticios, siempre en plena forma como deportista profesional que ha sido. Esta vez cambiaríamos los porcentajes de los nutrientes en su alimentación, y la combinación de sistemas de entrenamiento sería la misma de siempre, basada en el método, y utilizaríamos los suplementos deportivos adecuados. Según avanzaban los días y apoyados en el método, Aitor iba puliendo su físico de forma espectacular. Me contaba que cuando quedaba con amigos para cenar o comer le decían que para qué quería mejorar su físico si ya estaba perfecto. Sí, seguramente, y para el resto de los mortales entre los que me incluyo, bastaría para ser la envidia del gimnasio, pero no. No se trataba de estar bien y tener un físico espectacular; se trataba de ir más allá, se trataba de salir en la portada de la revista con mayor tirada del mundo del fitness masculino. Teníamos claro que tendríamos que subir un par de peldaños, apretar los dientes y creer en nosotros, así que nos pusimos manos a la obra. Hablábamos varias veces al día por teléfono, nos enviábamos mensajes, fotos por el teléfono móvil, correos electrónicos, todo lo necesario para que su cuerpo fuera cumpliendo los plazos marcados para el día de la sesión de fotografías. Todo marchaba bien, su cuerpo respondía a las mil maravillas, pero de repente recibí una llamada de Aitor en la que me contaba que se había dañado el dorsal y que no podía entrenar bien, algo inesperado: una lesión muscular y encima de un músculo grande. ¡Uf! A grandes males, grandes remedios, como decía mi abuelo. Tuvimos que cambiar ejercicios y sus ángulos de entrenamiento para proteger la zona afectada por la lesión. Seguramente y bajo prescripción médica habría que tomar antiinflamatorios para mejorar la lesión. ¡Funcionaba! De nuevo podía entrenar bien, pero mirando de reojo la lesión. Todo volvía a marchar bien, ya quedaba poco. Su piel parecía la de un lagarto en época de muda; su cintura apretada y su torso musculado parecían los de un personaje salido de un cómic. Había respondido a la perfección, en mi opinión mucho mejor de lo que esperábamos. Todo iba sobre ruedas, pero Aitor sentía que se le borraban los músculos. ¿Cómo? Esta expresión la utilizamos cuando el músculo no se marca tanto y la piel deja de estar fina, provocado por una retención de líquidos. No se veía como antes de la lesión. ¡No puede ser! No habíamos cambiado nada, ni alimentación, ni suplementación, ni entrenamiento. Me estrujaba una y otra vez los sesos. ¿Qué fallaba? ¿Qué le pasaba? Pensando una y otra vez en la retención de líquidos, de repente en medio de un entrenamiento me vino la inspiración: los antiinflamatorios. El antiinflamatorio es una clase de medicamento que retiene líquidos. Habría que esperar a que dejara de tomarlos. Así fue: la retención de líquidos desapareció una vez terminado el tratamiento. Una semana antes de la sesión de fotografías entrenamos juntos y cuando le vi en el vestuario, entendí, en mi humilde opinión, que se había ganado aparecer en solitario en la portada de la revista, y así se lo dije: «Creo que Men’s Health te va a sacar solo en portada». Al final no sólo la portada fue para él, sino que fue elegido «Mejor Cuerpo de España» por sus lectores. Obviamente, como ya he dicho antes, en ningún momento ni él ni yo pensamos en planificar su entrenamiento y alimentación para obtener tan preciado galardón. Quizá fue la recompensa al trabajo en equipo bien hecho y a la constancia para cumplir con un objetivo que era simplemente sacar el mayor partido posible al físico de Aitor para la portada de una gran revista, no más. Ésa fue nuestra única meta.
Nacho Villalba