Читать книгу La agonía eterna de la zona de confort - Наташа - Страница 6
ОглавлениеSabes que esta que vives no es la vida que tu niña creaba en sus juegos; sabes más que nadie que no eres lo que esa adolescente intrépida pintaba en sus paseos mentales por su futuro. Simplemente callaste a esa niña interior, y mutilaste a la adolescente feliz, para sosegarte, aplastarte, y dejar que otros manejen el timón de esa gran mujer que está presa en su zona de confort, que muere a diario en silencio por temor a decir su verdad, a escapar de su carcelero mental que es tu dictador y represor, a simplemente atreverse a aceptar que quien tiene la decisión en sus manos, eres tú, que aceptando que estás mal, es el primer paso a salir, a correr y lanzarse a volar por donde tú decidas hacerlo sin pensar ya en el qué dirán, en quienes crees que dañarás, en quienes dicen que te necesitan y si lo piensas, es porque estás ahí y temen perderte porque conocen tu potencial. Salir está en tus manos, no temas al tropiezo, ama la soledad, elije a quien amar y que en la lista estés primero vos.
Dedicado a mi madre quien aún hoy oye llorar y sollozar a su niña interior a quien jamás escuchó, porque su abandono en la rutina, en sus hijos, en mi padre, y en tantas excusas que todas ponemos para no admitir que debemos hacer un alto, y aceptar que nos equivocamos, diciendo basta a todo; todo eso la llevó a tener hoy que todos nos fuimos, un gran vacío existencial, un gran dolor por postergar, porque mañana será mejor nos decimos resignadas, porque ver nacer a cada uno de sus niños la hacía olvidar que estaba mal, porque se conformó en su abandono porque tenía dónde vivir, comida, techo... y lo amabas a papá? Buscar toda la vida a alguien que se haga cargo de nosotras por no tener los ovarios de decir: YO SOY MUJER, SOY LO QUE QUIERO SER Y NADA NI NADIE PUEDE PONER NI IMPONER EN MÍ, ALGO QUE NO QUIERO NI DESEO PARA MI PASO POR ESTA VIDA. El miedo es nuestro peor enemigo, miedo al qué dirán, miedo a dar pasos a ciegas como cuando éramos niños, sin temor, sin medir, pasos repletos de adrenalina; eso es vivir la vida.