Читать книгу Conecducamos - Pedro Alarcón Gómez - Страница 11
“ La sorpresa potencia el aprendizaje, mientras que lo repetitivo, lo predecible no favorece la atención”.
Оглавление¿Cómo sorprender en clase? Esta es una pregunta que deberíamos hacernos con más frecuencia para potenciar, favorecer y desarrollar aprendizajes. En nuestra práctica educativa tendríamos que planteárnosla a menudo, cuando trabajemos algo nuevo y queramos que lo asimilen mejor. La pregunta sería: ¿de qué manera distinta puedo explicar esto?
Algunas ideas:
• Contar anécdotas es algo que ayuda a la atención, pues activa el cerebro social. Puede contarla el profesor, el propio alumno, y si tiene que ver con el tema mejor.
• Cambia la disposición de la clase.
• Hoy voy a provocar: es decir, que tus alumnos/as te expliquen con sus palabras, desde tus preguntas, lo que intentas explicar tú. Más adelante hablaremos de ello.
• Siéntate en las mesas, que se suban en las sillas, siéntate en el suelo. Da la clase en otro lugar.
• Solo con la luz de las pantallas.
• Habla intentando rimar, prepara una explicación con rima.
• Haz alguna actividad física en clase.
• Explícalo como si estuvieses triste, con enfado o muy alegre.
• Intenta explicarlo empezando con una palabra que empiece por la inicial de tus compañeros de equipo.
• Haz una yincana de estudio en clase.
Todo aquello que suponga una novedad, un desafío y forme parte de una variedad de actividades, está dentro del margen de la sorpresa.
Al margen de la sorpresa y al hilo de las emociones es interesante comentar una estrategia que utilizan algunos profesores de Educación Infantil y Educación Primaria, que consiste en poner a sus alumnos/as una carita triste cuando la actividad tiene algún error o una carita sonriente cuando la actividad está bien. Es evidente que ambas caras lo que muestran es la emoción del/la profesor/a ante una tarea determinada. Si lo analizamos bien, poner una carita triste cuando la actividad tiene algún error, le indica al alumno, que equivocarse provoca que su profesor/a esté triste. Es fácil que el/la alumno/a deduzca entonces que el error no es bueno, que las consecuencias para el/la profesor/a no son las que él/ella quiere, pues no le gusta que su profesor/a esté triste. Entonces, las soluciones que puede manejar son:
• Si me equivoco, no lo digo para que el/la profesor/a no se ponga triste.
• Escogeré las tareas fáciles para estar más seguro de no equivocarme.
Ante estas posibles soluciones, sería conveniente sustituir las caritas emocionales, por otra estrategia que no influya de ese modo. Si queremos que nuestros/as alumnos/as vean el error como motivo de aprendizaje, como algo natural dentro de su trabajo académico, como algo de lo que hay que hablar para corregir, es prioritario que los errores no influyan entonces en las emociones, pues conseguiremos lo contrario. Aprendemos mucho de nuestros errores, entonces, tratémoslos con naturalidad y hagamos que sea lógico y normal hablar de ellos.
Sabemos que las emociones son importantes para el cerebro. Que además tienen relación directa con el aprendizaje y desarrollo personal y cognitivo de la persona. En este papel tan importante de las emociones, los neurotransmisores desarrollan una actividad imprescindible para consolidar y desarrollar aprendizajes.
Neurotransmisores: química del aprendizaje
Los neurotransmisores son componentes químicos que producen las neuronas y llevan información. Son protagonistas en las conexiones neuronales. Los principales neurotransmisores que intervienen en el aprendizaje son:
• Dopamina: intervine en la atención, en la memoria y en el placer; aumenta el foco de atención; potencia la consolidación y el almacenamiento de información en la memoria a largo plazo; es importante en la motivación y se activa con experiencias agradables, con el movimiento físico, la música, la novedad, el juego, el humor.
• Serotonina: regula aspectos cognitivos y perceptivos, favoreciendo el aprendizaje, y disminuye con el aislamiento, de modo que aumenta con el trabajo en equipo.
• Acetilcolina: aumenta la capacidad de retención de información y el aprendizaje y mejora la memoria a corto plazo. Aumenta con la sorpresa.
• Noradrenalina: favorece la atención.