Читать книгу Qué salvará al mundo. Poesía, prosa - Протоиерей Олег Штельман - Страница 10
Poesía
No somos huèrfanos
ОглавлениеVivimos de recaudos mundanos,
Y viviendo ya el otro día,
Nutrimos de bienes humanos,
Sin divina filosofía,
Al adjudicar la luz divina
Como si fuera suya,
Hasta el fondo la arruina,
Todo lo que se incluya.
Se compiten como reyes,
Aprenden leyes con altivo.
Ahí ellos mismos como bueyes
Siguen sus vidas sin motivo.
Somos cenizas de la tierra,
De la que Dios nos ha creado,
Nuestro mérito aterra,
En vano Dios lo ha dejado.
Cualquier humano en su lugar
Destrozaría el globo con su brazo,
Con ese miedo nuclear,
Serán esclavos en corto plazo.
Y Dios lo hizo en otro caso —
Envió a su amado Niño,
Sin miedo por cualquier fracaso,
Deseando paz al ser vecino.
Sin castigar, sin destruir —
Sino ayudar a conocer su alma,
A esta gente ya servir,
Guiar al cielo con su palma.
La esclavitud es otra cosa,
Nos asume como su familia,
Pues, ánima bien amorosa
Será columna auxilia.
No hay huérfanos en vano —
Tenemos ya un Padre Celestial,
No tengas miedo, mi hermano,
Abrir tu corazón fenomenal.
Él mismo nos da una pista,
Que cada habitante del universo,
De que su fin consista
Lo entenderá con corazón inmerso.
Cada uno con su cor
La voz padrina debe escuchar.
Se calmará ya su fervor,
Cuando verdad se ve hablar.
Aquí encontrará las respuestas.
Podemos ver el otro lado,
Cuando la gente se vuelve ser modesta,
Encontrará la paz pausada.