Читать книгу Elige solo el amor - Sebastián Blaksley - Страница 8
Preludio
ОглавлениеUn mensaje de la voz de Cristo a través de un coro de ángeles, en presencia del arcángel Rafael y el arcángel Gabriel
Amado del cielo,
Cuanta alegría hay hoy en toda la creación. Es la alegría que todos compartimos al unirnos contigo.
¡Oh, humanidad! Si tan solo os pudierais dar una idea de cuan benditos son estos diálogos de amor divino, y con cuanto amor os amamos los que vivimos en la luz del Cristo viviente, lloraríais de felicidad.
Soy el arcángel Rafael. He venido por designio divino a servir. Os doy las gracias a todos, incluyéndote a ti, escriba del cielo, por permitirme colaborar en vuestras vidas.
He venido ante tu presencia para dar forma, en unión y relación, a este cuarto libro de esta obra milagrosa. Por medio de ella, la sabiduría se extiende al mundo entero. Y nos unimos en espíritu y verdad con todo lo que es santo, bello, perfecto.
Antes de comenzar con las diversas sesiones que formarán parte de este libro, quisiera recordaros que vosotros sois dignos hijos de Dios. Vuestra dignidad es tal, que en vuestro lenguaje humano no se ha podido concebir una palabra que permita definir la grandeza de vuestro ser.
Sois los hijos bien amados de Dios. Sois la humanidad redimida, expresión perfecta de la misericordia divina. Lo que un día fue, ya no es, porque nunca ha sido. Ahora, lo nuevo se hace realidad en vuestro ser. Sois la nueva humanidad renacida en Cristo.
¡Amigo mío! Recuerda que estoy más cerca tuyo que tu propio aliento. Siempre estaré a tu lado, porque tú y yo somos uno. En nuestra igualdad reside la verdad de lo que somos. No soy superior a ti, ni a nadie.
En el reino del amor no existe tal cosa como los conceptos de superioridad o inferioridad. Ninguna idea de separación forma parte de la verdad. Lo que soy, forma parte de ti, tal como tú formas parte de mí, y todos formamos parte del Cristo de Dios. Somos la creación extendiéndose. Somos la unidad del ser.