Читать книгу Sexo en Egipto - Violeta Fijalkauskas - Страница 11
ОглавлениеSexo
Amo tener sexo. Acá tuve un millón de veces por suerte. Con Aladdin el chico que trabajaba como guía en mi hotel.
El día del aeropuerto yo estaba super preocupada pensando “¿Me van a secuestrar?”. Pero cuando vi el cartel que decía Star Pyramids Tours y el auto decía Star Pyramids Tours me relajé. Me causó gracia que el otro día en el hotel escuché a unos americanos diciendo “¿Nos van a secuestrar?”. Así que no soy la única que vio la película Taken.
Tuve un montón de momentos así pero para eso son los viajes. Para vivir, enfrentar los miedos y superarlos.
Como cuando entré a la pirámide y casi me muero asfixiada. Era un túnel de un metro sin ventanas y tenía que ir caminando agachada con otro guía. Me dijo que podía meditar en la recámara. Yo tenía el corazón latiendo y lo único que quería era salir de ahí antes de que me desmayara. Lo último que quería hacer era meditar.
El tercer día fuimos al cine con Aladdín y lo pasamos genial.
Después fuimos a un piso a una zona que yo no conocía. Apareció un amigo y caminamos al departamento, le dio las llaves. Yo me asusté y él se dio cuenta. Me dijo unas palabras para tranquilizarme.
Después tuvimos sexo. Entramos al departamento y pagamos por el piso. Fuimos a la cama, empezamos a chapar y cogimos frente a un espejo. Fue rápido pero lindo. Besaba bien, apasionado como a mi me gusta. Me agarró del pelo y yo también. Me sentí un poco incómoda porque hubo un malentendido con la plata justo antes. Por eso después de sacarnos la calentura comí y me fui. Habíamos pagado por 3 días porque allá está prohibido ir a hoteles si no estás casado con un egipcio.
“Pensalo como una aventura” me dijo. En el momento yo estaba enojada. No podía creer lo que había pasado y arruinó todo el romance para mi. Volví al hotel y le conté la historia a Lau mi amiga riéndome. Me relajé y le escribí de nuevo preguntándole dónde estaba, típica histérica Argentina. Nos encontramos de nuevo al final de la calle y volvimos al piso. Estuvimos dos veces más. Me sentía sexy y linda mientras estaba con él y después. Sonrío. Al día siguiente volví a desayunar al hotel feliz. Era mi tercera noche en Cairo!