Читать книгу Cómo escribir un artículo académico en doce semanas - Wendy Laura Belcher - Страница 5
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La iniciativa de la revista Perfiles Latinoamericanos y la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso México) de traducir y publicar la magnífica obra de la académica de la Universidad de Princeton Wendy Laura Belcher Cómo escribir un artículo académico en 12 semanas / Guía para publicar con éxito, responde a lo que identificamos como una necesidad importante y urgente de las comunidades académicas en las ciencias sociales y las humanidades en los países de habla hispana. Esta publicación viene a llenar un obvio vacío pues, simplemente, no existe una guía de esta envergadura, calidad, cobertura temática y facilidad de uso, en el idioma español.
Nuestra decisión de poner al alcance de los estudiantes, profesores e investigadores en América Latina, España y otras regiones del mundo esta guía, deriva también de la experiencia acumulada por nuestra revista Perfiles Latinoamericanos durante sus dieciocho años de existencia. Todas las debilidades y fortalezas que identifica la autora en el diseño, resumen, introducción, construcción, redacción, argumentación, presentación del problema, hallazgos y conclusiones de los trabajos académicos, nos resultan familiares. Sucede con frecuencia que los artículos que recibimos para su posible publicación, sufren de algunos o muchos de los problemas que Belcher describe y ayuda a resolver y, por otro lado, aquellos trabajos que han sido finalmente publicados, constituyen ejemplos del tipo de esfuerzos exitosos que la autora ha venido facilitando en los cientos de talleres que ha impartido en diversos lugares del mundo.
La guía de Laura Belcher tiene como objetivo facilitar el proceso de escritura y publicación de artículos, ensayos y reseñas a los investigadores en las ciencias sociales y en las humanidades, particularmente aquéllos que inician su carrera académica y que no tienen suficiente experiencia en, y conocimiento del mundo de las publicaciones académicas periódicas.
La producción de artículos —y su publicación en revistas reconocidas por la comunidad académica como serias o de excelencia— es parte integral y hoy crecientemente importante de la actividad de los investigadores y docentes universitarios. Es cierto que en la mayoría de los países de habla hispana no se ha adoptado, hasta ahora, el principio conocido como publish or perish (publica o perece) que pende como espada de Damocles sobre las cabezas de los académicos de muchas instituciones de educación superior en algunos países con altos niveles de desarrollo económico. Sin embargo, es un hecho indiscutible que las universidades y las autoridades que apoyan su labor en Hispanoamérica, y más aún en España, están atribuyéndole un valor cada vez mayor a la producción intelectual y científica de los investigadores, tal y como ésta se plasma en trabajos publicados en revistas reconocidas, esto es, aquéllas que utilizan procesos de evaluación por pares (miembros de la comunidad académica) para determinar si un artículo de investigación, ensayo o reseña es publicable o no. Otro criterio de juicio sobre la seriedad académica de las revistas es el de su inclusión en índices internacionales o nacionales, también ellos reconocidos y apreciados por la misma comunidad.
Claramente, en los países hispanoparlantes, los académicos están siendo evaluados con diversos fines, considerando muy seriamente el número y la calidad de sus publicaciones en revistas académicas prestigiosas, nacionales e internacionales. La calidad de los trabajos publicados, también ésta, es juzgada generalmente de acuerdo al prestigio de las revistas en donde fueron publicados.
Para los académicos, el impacto de la evaluación recién descrita es de gran envergadura; su contratación, nivel como profesores, ingresos, permanencia o definitividad, apoyos de investigación, períodos sabáticos y las condiciones de trabajo en general, dependen, en buena medida, de su productividad demostrada por sus trabajos que han sido publicados en publicaciones académicas arbitradas y que están incluidas en los índices nacionales e internacionales relevantes.
La adopción de los criterios de evaluación basados en la publicación de artículos en revistas académicas ha estado sujeta a críticas de diversos órdenes. Algunos consideran que la “cuantificación” de la producción intelectual, promueve la banalización de la actividad de los académicos, al obligarlos a preferir la generación de trabajos convencionales y conservadores en lugar de investigar lo realmente importante e innovador. Otros agregan a lo anterior críticas de orden ideológico, arguyendo que el sistema de evaluación académica basado en la cantidad y supuesta calidad de los artículos publicados, “americaniza” y promueve la homogeneidad ideológica de los académicos, debilitando el radicalismo y el pensamiento crítico en la comunidad.
No es éste el espacio en el que podamos valorar la validez de estas objeciones y críticas. Lo que es un hecho incontrovertible, es que existe una demanda social e institucional que exige la evaluación del trabajo académico de los investigadores y de las instituciones de educación superior, por medio de criterios universales, transparentes, objetivos y eficientes. La publicación de trabajos en revistas académicas arbitradas es, y lo será de manera creciente, un elemento fundamental de juicio respecto al desempeño de los miembros de la comunidad académica.
Más allá de la importancia que tienen los artículos publicados en revistas académicas reconocidas para la evaluación de la productividad académica, es imperativo reconocer el papel que juegan en la difusión del conocimiento. Las publicaciones académicas arbitradas por pares contribuyen de manera fundamental a la consolidación de comunidades académicas a través de la delimitación de lo que constituye, para esas comunidades, el conocimiento científico que se sujeta a los cánones de prueba y solidez teórica y empírica aceptados por sus miembros. Esta función se ha vuelto particularmente importante en nuestra realidad cibernética actual, en la que cualquiera puede publicar en la red sus opiniones, hallazgos, análisis, teorías, etc. La apertura y accesibilidad de la internet aporta enormemente a la democratización y participación directa de los individuos en la discusión y determinación de la agenda pública y a la crítica a los poderes establecidos, y debe ser defendida de todo intento de censura por parte de los detentadores del poder económico y político. Sin embargo, para la actividad científica, se vuelve cada vez más trascendente la capacidad de distinguir entre lo meramente especulativo o ideológico, y el conocimiento que resulta de un esfuerzo sistemático, que confirma o refuta, consolida o renueva, un cuerpo teórico o empírico que es producto del trabajo de conceptualización e investigación de una comunidad académica y científica.
Las publicaciones académicas permiten al investigador dar a conocer a la comunidad académica a la que pertenece, incluyendo a los estudiantes que pretenden sumarse a esa comunidad, los frutos de su actividad intelectual, contribuir al desarrollo de su disciplina o campo de estudio, y recibir retroalimentación positiva o negativa para, de ese modo, mejorar sus capacidades de investigación y de presentación efectiva de sus contribuciones.
El manual de Belcher tiene muchas virtudes. Además de la sencillez de su estilo, es un libro divertido, ligero y abundante en consejos prácticos; su estructura es particularmente notable por su rigor pedagógico, de tal modo que quien enfrente el reto de poner por escrito sus aportaciones académicas, puede confiar en que será llevado prácticamente de la mano sin perder la seriedad científica o académica en ningún momento. No es un libro meramente técnico sino también una agenda que organiza de manera estimulante y productiva los tiempos y las actividades de los investigadores, reduciendo de manera efectiva las inseguridades y los sobresaltos para conseguir la conclusión de proyectos de escritura que con frecuencia se diluyen a medio camino.
Tal y como lo enfatiza la autora en la introducción a su texto, la guía está organizada modularmente y, por tanto no resulta imperativo (aunque sí recomendable) leer todos los capítulos de la Guía o hacerlo en el orden en que los coloca la autora. Cada quién puede acercarse al texto y emplearlo de acuerdo a sus necesidades específicas, o a las debilidades y falta de conocimiento que desee subsanar.
Estoy seguro que los miembros de la comunidad académica encontrarán en este libro un instrumento práctico que les será de gran utilidad para mejorar la calidad de sus trabajos y elevar sensiblemente sus probabilidades de ser publicados.
Finalmente, queremos agradecer al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología su apoyo financiero para la traducción y edición de esta guía.
Dr. Benjamín Temkin
Director de Perfiles Latinoamericanos