Читать книгу Maestro Fútbol - Alexis Garcia - Страница 14

Cuando en los deportes se conforma un equipo o en las competencias individuales se planifica una meta, lo que les da el inicio para comenzar con un gran sueño, es el plan, la manera de lograrlo y el cómo hacerlo.

Lo primero que se necesita para hacer un rompecabezas es la imagen y desde ahí se comenzarán a colocar las fichas en un orden perfecto que permita lograr el objetivo, en el proceso cometerás errores, pondrás fichas donde no van, volverás a sacarlas y reorganizar la idea, pero lo único que no puedes dejar de hacer es mirar la imagen, mantener el foco en el sueño para poder guiarte hacia el destino ideal.

Me preguntaba por estos dias, que si todos los seres humanos manejamos nuestras vidas de esta manera les sería más fácil lograr lo que se propongan.

La pretemporada en el deporte, es la preparación para una gran temporada, todo el mundo se alista, dando lo mejor, realizando un esfuerzo grande, para luego salir a luchar por sus metas. En los ciclos olímpicos, hay atletas que se entrenan cuatro años para intentar correr 100 metros en menos de 10 segundos, cuatro largos años de preparación, sacrificios, lucha, la creación de hábitos de campeón, con las renuncias que esto implica, es una lucha consigo mismo, sufriendo el miedo de los riesgos de una lesión, en ocasiones es la batalla propia por la superación personal.

Esta es la mejor definición que escuché sobre lo que es la inversión en ti mismo: “Usain Bolt ha ganado 9 medallas de oro en los últimos 3 Juegos Olímpicos y ha corrido menos de 2 minutos en la pista.

Bolt corrió por menos de 115 segundos en sus 3 Juegos Olímpicos y ganó 119 millones de dólares, eso es más de 1 millón de dólares por cada segundo que corrió.

Pero para esos 2 minutos entrenó por más de 20 años, ¡¡eso es inversión!!

Tu mente, tu disciplina y tu carácter correrán por ti.

“Odié cada minuto de entrenamiento, pero no paraba de repetirme: No renuncies. Sufre ahora y vive el resto de tu vida como un campeón”. Mohamad Ali.

En los deportes colectivos, la tarea pasa por preparar a un grupo y convertirlo en un equipo, en focalizar objetivos comunes, en limpiar la maleza que crean los egos, en elegir bien a los que lucharán por las metas comunes, entregando lo mejor de sus condiciones.

Aceitar este tipo de maquinarias, pide un trabajo muy planificado, en una meta común llevada a la convicción de cada uno de los miembros del equipo, una disciplina transportada a sus corazones para ser ejecutada desde la convicción, una exigencia que lleve a la excelencia, deponer los egos que atenten contra la idea general, un manual de convivencia y comportamiento que garantice la atmósfera correcta y un manual de compromiso que obligue a entregar todo con el corazón.

La vida de los exitosos nos ha enseñado que lo contrario al éxito no es el fracaso, sino el conformismo, que nunca se logra lo que uno sueña sin incomodarse y vivir por un propósito.

Llegó la hora de jugar EL PARTIDO DE TU VIDA ese que te permita tu realización personal y orientar tu vida hacia los sueños que son la única razón de ser.

¡Prepárate! para que cuando la vida te mande a los lobos, con orgullo digas: “he regresado siendo el líder de la manada”.