Читать книгу La democracia de las emociones - Alfredo Sanfeliz Mezquita - Страница 22
La necesidad de actuar legítimamente
ОглавлениеAnte todos estos fenómenos y actuaciones de unos y otros no soy capaz de liberarme de mi forma de sentir o reaccionar, y en definitiva de juzgar. Para bien o para mal, mi sistema de emociones, sentimientos y valores está dentro y pegado a mí y condiciona mi forma de ver e interpretar los comportamientos de los demás llevándome a enjuiciarlos. En mi actuar espontáneo no puedo alterar ese sistema que llevo en mi mochila emocional, si bien en ocasiones, una vez se han producido reacciones emocionales internas, sí puedo controlar mi comportamiento e incluso doblegar la insistencia interna de ciertos mensajes emocionales. Pero intelectualmente soy plenamente consciente del condicionante y sesgo que para mí supone mi mochila, donde llevo mi historia que, en definitiva, da forma a mi ideología y preferencias.
En paralelo necesito sentir que mi actuar es legítimo, y me sirvo de mis capacidades intelectuales para construir los relatos que me llevan a encajar legítimamente lo que hago, mis preferencias, intereses y forma de actuar en mi sistema de creencias, en lo moral y lo ético, pues a todos nos incomoda sentir que nuestras actuaciones son injustas o reprochables. Cualquier cosa puede reivindicarse o alegarse si se hace con un discurso apropiado y con un lenguaje con las connotaciones adecuadas para conquistar a los destinatarios de los mensajes. Pues cualquier líder que pretenda tener seguidores para su causa necesita dar legitimidad a la misma como elemento indispensable de ese liderazgo para obtener apoyo y reconocimiento para sus pretensiones.
Esto hace que exista un enorme desarrollo y gama de creación de relatos (explícitos o a través de gestos) que legitiman las pretensiones de unos y otros individuos y grupos, a la vez que se acrecienta el uso de más y más maniobras para provocar las reacciones y enfados de aquellos a quienes queremos construir como enemigos, y no tanto porque lo sean, sino porque ello nos sirve para que se unan a nuestra causa personas que pueden tener un rechazo a esos supuestos enemigos. Con esa finalidad las historias son construidas y relatadas utilizando palabras, giros, proclamas etc. que conecten con las personas y despierten su adhesión por el sentimiento de compartir enemigo. Pues nada une tanto a las personas como tener un enemigo común, y tan es así que solo un enemigo común, en una causa de mayor calado, puede eliminar la relación inicial de enemistad que hasta entonces existía entre dos personas.
Es imprescindible ser conscientes de que las argumentaciones de unos y otros se construyen mucho más sobre emociones y percepciones, o impresiones de los receptores de los mensajes, que sobre argumentos y datos. El uso de datos o informaciones objetivas pretende dar un supuesto respaldo al relato, pero es crecientemente manipulativo por existir sesgos en la elección de los mismos y por su deliberada falta de contextualización o coherencia en la aplicación al caso. Son datos que se utilizan cuando sirven para impresionar o atemorizar, pero que carecen de rigor o de ponderación de su relevancia. Tan es así que la muerte de una persona cada veinticinco años por una caída de árbol puede ser utilizada como excusa para cerrar un parque cada vez que hace viento, con gran aceptación del público en general. Según el relato, la medida de cierre se apoya en el interés de proteger la seguridad de los ciudadanos, cuando la verdadera razón es el afán de prohibición, unido al de proteger a los funcionarios de responsabilidad en caso de un accidente fortuito. Posiblemente las personas que no puedan asistir al parque mientras este permanece cerrado estarán desarrollando actividades que estadísticamente revisten mayor peligrosidad que dar un paseíto por el parque. Seguramente la estadística, si se trabajara, nos llevaría a concluir que pasear por las calles de la ciudad, o incluso permanecer en casa tiene más riesgo que el derivado de la caída de un árbol en los parques incluso en días de viento.