Читать книгу Tecnologías limpias y medio ambiente en el sector industrial peruano - Arístides Sotomayor - Страница 39
6.3 Reciclaje
ОглавлениеDespués de la reducción y la reutilización, siempre queda una gran parte de residuos que pueden ser reciclados. Los materiales que tienen altas tasas de reciclaje son los metales, el vidrio y el papel. En cuanto a los metales, la mayoría de ellos pueden ser reciclados casi indefinidamente, pues se someten a procesos de fusión donde se eliminan todas las impurezas en forma de escorias inertes. Una excepción notable es el aluminio que, al fundirse nuevamente, se contamina con impurezas, por lo que solo es reciclado como aluminio secundario en aleaciones de colada; en cambio, el aluminio de alta pureza requerido en aplicaciones como cables eléctricos y láminas es el aluminio primario, que se obtiene de procesos de primera fusión y refinación de las materias primas. El caso de los metales preciosos es distinto, ya que, por su alto valor, el reciclaje siempre es económicamente factible y recomendable, aun de residuos donde estos metales se encuentran en muy baja proporción, como polvos, lodos, chatarra electrónica, catalizadores industriales, entre otros. El vidrio, por otro lado, es un material que también puede fundirse y reciclarse indefinidamente, siempre que los desechos de este material se separen adecuadamente por color. Por su parte, el papel es reciclado parcialmente, pues las fibras tienden a reducirse en longitud cada vez que son convertidas en pulpa. La pulpa de papel reciclado y la pulpa virgen son las materias primas principales para la fabricación de papel toalla y papel higiénico, con considerable ahorro de recursos, incluso si estos son renovables como la madera.
Los plásticos, como se verá con mayor detalle en un capítulo posterior, solo son reciclables parcialmente, salvo los envases de PET (politereftalato de etileno), que pueden convertirse en fibras textiles para la fabricación de tejidos, mantas y nuevos envases. En la categoría de reciclaje también se encuentra el compostaje de la fracción de residuos orgánicos de la basura, en vez de destinarla a los rellenos sanitarios, donde por descomposición anaeróbica generará gases de invernadero, como dióxido de carbono y metano, además de lixiviados tóxicos. La transformación de la basura orgánica en compost o en humus de lombriz (vermicompostaje) produce valiosos fertilizantes para la agricultura y el cuidado de jardines, que reemplazan en gran medida a los fertilizantes sintéticos y reducen el consumo de recursos naturales y energéticos. La ganadería y la avicultura, por ejemplo, reciclan el estiércol y otros residuos, transformándolos en fertilizantes para su uso en áreas agrícolas.