Читать книгу Discursos privados I - Demóstenes - Страница 46

TESTIMONIO

Оглавление

[33] Todavía más, jueces; por un importante indicio es fácil saber que cohabitaba con él, y que jamás, inclusive hoy, ha habido divorcio. En efecto, la citada mujer, antes de ingresar en casa de Áfobo, no sólo no vivió ni un día como viuda, sino que pasó a cohabitar con él desde el domicilio de Timócrates, quien vivía aún, y ahora, en un espacio de tres años, no se ve que viva con ningún otro. En verdad, ¿para quién es digno de crédito que entonces, para no llevar una vida de viuda, pasara de la casa de un varón a la de otro, y que ha poco, si realmente ha habido un auténtico divorcio, soportase durante tanto tiempo su viudez siendo posible que cohabitara con otro, puesto que su hermano es dueño de tan gran hacienda y ella tiene esa edad? No, jueces, esto no encierra una verdad [34] convincente, sino que es pura palabrería, pues la mujer sigue cohabitando con él a la luz pública y no oculta la realidad. Pero os presentaré el testimonio de Pasifonte, quien, cuando la curaba de una enfermedad, veía sentado a su lado a Áfobo durante este arcontado, iniciado ya el presente proceso contra este individuo. Tómame el testimonio de Pasifonte.

Discursos privados I

Подняться наверх