Читать книгу La Argentina después de la tormenta - Francisco de Santibañes - Страница 6
INTRODUCCIÓN
ОглавлениеDurante 2020 vivimos una situación tan traumática como inusual: la aparición de una pandemia. Pocos analistas habían siquiera considerado la posibilidad de que una enfermedad como la del coronavirus pudiera expandirse tan rápido alrededor del mundo y, de esa manera, poner en crisis a los sistemas de salud.
La Argentina no estuvo ajena a esta tormenta. Nuestros hijos no pudieron ir al colegio, miles de negocios cerraron y, más grave aún, muchos compatriotas murieron. El daño ha sido enorme.
Una de las tesis centrales de este trabajo es que, más que producir un cambio radical, lo que ha hecho la pandemia fue acelerar una serie de tendencias que ya veníamos observando. Entre estas se encuentran el crecimiento de un movimiento político al que defino conservadurismo popular y un creciente malestar social que es alimentado por innovaciones como las redes sociales y las nuevas formas de trabajo, así como también el conflicto estratégico entre China y los Estados Unidos. Estas tendencias ya habían generado un escenario más complejo del que estábamos acostumbrados. La aparición de la pandemia lo ha vuelto aún de mayor complejidad.
¿Los argentinos estamos preparados para enfrentar un mundo que nos deja menos margen para cometer errores? Dos temas se repiten una y otra vez a lo largo de estas páginas: nuestra falta de pensamiento estratégico y los enormes déficits institucionales que enfrenta el país. Si no contamos con una estrategia nacional, por un lado, e instituciones sólidas que la respalden, por el otro, no tendremos éxito. No es que no nos podemos dar el lujo de pensar en términos estratégicos porque vivimos en crisis. Vivimos en crisis porque no pensamos de manera estratégica.
Sin embargo, existen motivos para ser optimistas. En primer lugar, porque la tecnología que genera desafíos también nos brinda oportunidades. Las innovaciones nos permitirán combatir el cambio climático y generar riqueza y trabajos de calidad. Este crecimiento será, en gran medida, consecuencia del comercio de servicios y de la aplicación de nuevas tecnologías –como la inteligencia artificial (IA)– en diversos sectores de la economía. De hecho, los avances tecnológicos son los que nos permitieron desarrollar y distribuir las vacunas que pondrán fin a la pandemia. Pero para que los argentinos podamos aprovechar estas oportunidades antes debemos elaborar y consensuar una estrategia.
Es más, incluso si nos va bien y logramos desarrollarnos, tendremos que seguir pensando y actuando de manera estratégica. ¿Qué medidas deberíamos tomar para que los nuevos recursos no lleguen solo a los habitantes de las grandes ciudades, sino también a los del interior? O bien, ¿qué deberíamos hacer ante una abrupta baja de la tasa de natalidad como sucede en Europa o en Japón? Estos son algunos de los desafíos que en la actualidad enfrenta el mundo desarrollado.
El presente trabajo está dividido en tres secciones. La primera incluye un extenso capítulo en el que presento mis tesis principales, describo algunos de los cambios que han tenido lugar en el escenario internacional y, además, me hago algunas preguntas sobre su futuro. (1) El surgimiento de un nuevo orden internacional puede afectar nuestras vidas y, por lo tanto, debe considerarse un insumo central a la hora de elaborar una estrategia nacional.
En la segunda sección incluyo 48 notas que publiqué en la prensa argentina (Infobae, Clarín y Perfil) durante este tiempo de crisis. En principio, estas fueron pensadas como una unidad y, por esa razón, tienen un hilo conductor. Están agrupadas bajo distintas temáticas, entre las cuales se encuentran la aparición y evolución del conservadurismo popular, los cambios sociales que están ocurriendo en los Estados Unidos y la competencia estratégica que tiene lugar entre Washington y Beijing. También discuto sobre algunos desafíos y oportunidades que enfrenta la sociedad argentina y su dirigencia en particular. Analizo, por tomar unos casos, las fortalezas y debilidades de nuestro empresariado, como así también las de nuestro cuerpo diplomático, las Fuerzas Armadas e instituciones académicas. El capítulo final agrupa mis notas sobre pensamiento político.
La última sección está compuesta por los diálogos que mantuve con Facundo Manes y Francis Fukuyama, dos intelectuales que nos ayudan a reflexionar sobre el tiempo que nos toca vivir. Estas páginas pueden interpretarse, asimismo, como un homenaje al diálogo, ese ejercicio profundamente democrático que nos permite elaborar diagnósticos y propuestas.
Es probable que, al finalizar esta obra, el lector termine compartiendo varias de mis preocupaciones, pero mi mayor esperanza es que también surja en él una ilusión. O, mejor aún: una convicción. La convicción de que la sociedad argentina puede y debe dejar atrás la tormenta en la que se encuentra para obtener una visión más clara sobre el país que necesitamos construir.
1- Una versión anterior de este capítulo ya fue publicada. Ver: “¿Hacia un nuevo orden conservador? La Argentina y la transformación del sistema internacional”, en Perspectivas. Revista de Ciencias Sociales, Nº 10, pp. 42-56, julio-diciembre, 2020.