Читать книгу Los santos y la enfermedad - Francisco Javier de la Torre Díaz - Страница 2
INTRODUCCIÓN
ОглавлениеLa relación con el dolor desvela quiénes somos en lo hondo. Con este libro pretendemos ofrecer una reflexión rigurosa y actualizada de la vivencia y el pensamiento sobre la enfermedad de santos importantes de nuestra tradición católica.
Queremos con ello acercar la santidad a una experiencia humana universal, a la experiencia de vulnerabilidad física, psicológica y social que supone el ser in-firmus. Muchos santos vivieron una existencia humana en un estado de enfermedad que les configuró y les marcó de modo hondo como una especie de «segunda naturaleza». No fueron simplemente espectadores, sino «pacientes» visitados por el dolor y la enfermedad.
La experiencia de muchos santos es que, cuando el cuerpo, la fuerza física y la salud no pueden ser la condición de la felicidad, queda más abierta la persona, por la fractura de la herida, para encontrar otros fundamentos. La enfermedad se convierte así en una tierra arada, con profundos surcos, para encontrar raíces más hondas de la existencia y del vivir. Las heridas abren un surco en la existencia que permite encontrar otra tierra firme en que asentar la existencia.
La enfermedad y el dolor han sido motor en la literatura de las obras de Baudelaire, Balzac, Kierkegaard, Proust o Cela. Integrada la fragilidad, es compatible con la fuerza creadora. Esto, creemos, también se ha podido dar en la vida de muchos santos «enfermos» que, en mitad del dolor, desarrollaron obras extraordinarias.
Los trabajos que presentamos parten de la experiencia de la enfermedad que la mayoría de los santos tuvieron y del contacto directo con el mundo de la enfermedad. Un objetivo prioritario es trasladar al lector una imagen del santo enfermo. Todo ello se hace basándose en una rigurosa documentación histórica y en los textos de los propios santos o sus principales biógrafos.
Detrás, por supuesto, está el objetivo de pensar más hondamente una espiritualidad como fuente de salud (más allá de visiones dulzonas, baratas y superficiales). Dios es la verdadera y definitiva salud, y nuestra tarea es sanar toda la realidad. Esto es lo que hacen muchos de estos locos de Dios que son los santos tras haber vivido la enfermedad.