Читать книгу La pelota no siempre al 10 (ni al 23) - German Castaños - Страница 8
SOBRE MARCELO ROFFÉ
ОглавлениеSon increíbles las vueltas de la vida. Marcelo vino a mi ciudad (Necochea) a dar una disertación. Justo me tocó a mí ir a recibirlo a la terminal de ómnibus y llevarlo a desayunar. Ya que soy muy olvidadizo, tengo muy presente todo. Fuimos a la confitería Deleite y ahí conversamos. Recuerdo hasta la mesa en la que nos sentamos. Y supongo que, como suele ocurrir, te entiendes de entrada como si fuera de toda la vida, o no te entiendes nunca por más esfuerzos que hagas. Y pasó lo primero.
Ahí nomás quedó en evidencia su generosidad. Yo aún estaba en un estadio muy incipiente en este mundo de la creatividad aplicada a la empresa y el deporte. Tranquilamente, Marcelo podría haber ignorado el sueño que le acababa de contar. Sin embargo, enseguida le puso un ladrillo al sueño. Y, encima, un ladrillo fundacional. Me invitó a dar, en un congreso que organizaba, lo que sería mi primera conferencia. Recuerdo que fue en la UBA y aún se usaban las filminas.
¿Cómo le vas a ofrecer algo así a alguien que conocés hace diez minutos? El tiempo me fue demostrando que Marcelo es así: le gusta abrir puertas. Y me encanta lo que hace. Porque te abre la puerta, pero después sos vos el que tenés que transitar los caminos con honestidad y profesionalismo.
Le agradezco esta invitación a Marcelo porque termina por fraguar una amistad que comenzó hace muchos años. Si el tiempo lo ha vuelto más exigente con la gente que elige para rodearse y en esa elección estoy incluido, eso no deja de ser un honor bien grande.
Porque hay muchas cosas que compartimos, pero hay una más que ninguna otra: ambos deseamos dejar nuestro apellido a nuestros hijos, tal cual nos lo legaron nuestros padres: limpio de toda limpieza.
No será lo último que hagamos juntos. Estoy seguro de que alguno de nuestros lectores nos juntará en algún lugar del mundo para compartir nuestros conocimientos. Y ahí no solo compartiremos la tinta, sino también el escenario.
Germán Castaños