Читать книгу El Último Tinigua - Hugo Mantilla Trejos - Страница 8
Señora Colombia
Оглавление¡Señora Colombia
te ha nacido un hijo!,
no es blanco, no es negro,
es puro es un niño indio.
Nació como todos
con fuertes lloridos
con la diferencia de que allá en la selva
no oyeron el grito sino la penumbra
y el quedo silente
que preña la selva.
Nació solo…solo con la madre india
dentro del bohío.
Él no tuvo médico
vino solo al mundo.
Los gritos ahogados de una madre india
los trasmitió el eco
de la selva virgen
por todas las tribus,
y una clara luna
que filtra sus rayos
alumbró aquel nido.
Después, unos dientes cortan el ombligo
y una cataplasma de hojas y caraña
calma los dolores
trayéndole alivio.
Y por cuna? .un chinchorro de moriche fino
tejido por el indio macho que lo procreara.
Y entonces la madre,
con ese cariño,
que entregan las madres
le brindó en su leche jugo de fariña,
sin sabor a leche con sabor a insípido
y el niño se calma su hambre de nacido.
No tuvo regalos como todo niño,
no hubo la alegría como en otras partes
cuando nace un hijo.
El tiempo en la selva sigue de continuo,
con ojazos tristes ve el niño hacia el río
y escucha que aúlla
el perro que siente la pena, el olvido
en que esta su hermano…
su dueño, su amigo.
El viejo esguaza las aguas del río,
con los aleteos del frágil potrillo.
Mira en lontananza con ojos perdidos
que ya dejó atrás su viejo bohío,
con su vieja la india, con su mozo el hijo,
y hasta siente miedo del agua que tiembla,
del perro que aúlla…
Mientras en el aire, en el aire tibio,
se mezclan vapores de selva, vapores de río,
y un poco de paz allá en el bohío.
Transcurren los años
y ya desandado el largo camino
el indio encuentra que todo,
para el se ha perdido.
Y se encuentra solo,
no encuentra a su hijo,
no encuentra a su india,
se los ha llevado el pesado olvido
en que se desgranan las palmas dormidas.
No te das de cuenta señora Colombia,
es que no comprendes que somos tus hijos
Los abandonados, los desconocidos,
que sufren, que gimen,
los que lloran tristes al pie de los yopos
sintiendo tu olvido?
¡Señora Colombia
te ha nacido un hijo!
no es blanco, no es negro,
¡es puro, es un indio!