Читать книгу Baila hermosa soledad - Theodoro Elssaca, Jaime Hales - Страница 4
ОглавлениеComencé a escribir esta novela en 1985, después del segundo secuestro de mi hermana Carmen. La terminé en 1989. Fue publicada en 1991 y se agotó, pero no encontré quien quisiera reeditarla. Al parecer nuestra sociedad no estaba todavía preparada para este tipo de libros que, aunque fuese en forma de novela, daban cuenta de una tragedia reciente. Hoy sí, especialmente cuando ya han nacido tantos que no conocieron los rigores tan largos e intensos que vivimos en Chile y en casi toda América Latina.
Pensaba en mis padres Adela y Alejandro, en mis hijos Pablo, Mariana y Sofía, en su madre Ana María. Hoy debo agregar a mis nietos Micaela, Alejandro y Amparo.
Tenía presente a tantas personas que sufrían, como yo y más que yo, los rigores de la dictadura.
Recordaba al escribir, a toda una generación de hombres y mujeres que hemos sido protagonistas y testigos privilegiados de tantos hechos importantes para el mundo entero: todas señales del parto doloroso aunque esperanzador de una nueva era, la de Acuario.
Menciono y agradezco a mis amigos Miguel Villablanca y Aníbal Bascuñán, claves en la hora de editar la primera edición de esta obra; a Bernardita Zegers, artista, que me regaló el cuadro para la portada; a Roberto Garretón y Carmen Hertz, abogados con quienes vivimos la experiencia de esos años y a quienes debo tanto de lo que sé.
Y dos agradecimientos especiales: para Maru Hernández, mujer que con amor me ha ayudado en la corrección de esta nueva edición y para Javier Sepúlveda Hales, mi sobrino, hombre generoso y empresario eficaz en el ámbito de la cultura.
Hay tantos más que vienen a mi memoria. Pero sus nombres permanecen en un lugar privilegiado de mi corazón y su mención duplicaría la extensión de esta obra.
Jaime Hales
Mirando el mar, al terminar el verano de 2022