Читать книгу Capitanes generales de Ejército en la Restauración (1874-1923) - José María García Baudín - Страница 18

2.3. Empleos y fechas obtención

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En la Tabla IX, se exponen las fechas del ascenso a capitán, coronel y brigadier y en la Tabla X, las de su ascenso a las diferentes clases de oficiales generales

TABLA IX. Fechas nacimiento, y ascensos.

NombresNacimientoCapitánCoronelBrigadier
Espartero27/10/179309/09/181601/02/182305/10/1823
Serrano17/10/181020/02/183713/11/183811/06/1839
Pezuela16/05/180914/12/182931/08/183719/08/1838
Pavía y Lacy06/07/181420/04/183630/04/183829/07/1838
Concha, José04/06/180901/08/183615/07/184013/07/1843
Zavala19/01/180407/03/183312/06/183719/06/1838

En la Tabla X, con la excepción obvia de Baldomero Espartero, y ateniéndonos a la entrada al generalato, con el empleo de mariscal de campo, y a la cúspide de éste, con el empleo de teniente general, podemos hacer las siguientes observaciones: respecto a la llegada al generalato, cuatro de ellos, por orden de antigüedad en este empleo, Pavía. Zavala y Serrano, consiguen dicha categoría durante la guerra de los siete años, teniendo que esperar Pezuela y Concha, a la caída de Espartero, para llegar a generales.

TABLA X. Fechas nacimiento y ascensos a las diferentes clases de Oficiales Generales.

NombresNacimientoMariscal de campoTeniente generalCapitán general
Espartero27/10/179317/02/183621/06/183601/05/1838
Serrano17/10/181009/12/184015/11/184318/07/1856
Pezuela16/05/180917/07/184303/04/184610/10/1867
Pavía y Lacy06/07/181429/07/184023/12/184424/04/1868
Concha, José04/06/180902/02/184430/04/184624/04/1868
Zavala19/01/180408/04/184020/12/185201/05/1974

La causa del ascenso al generalato, después de la caída de la regencia de Espartero, del brigadier Pezuela y del coronel Concha, reside en la oposición de éstos al regente Espartero, y su apoyo al pronunciamiento encabezado por el teniente general Diego de León60 y secundado por otros oficiales y generales, entre los que se encontraban estos militares. El intento fallido de tomar como rehén a Isabel II, de unos diez años de edad finaliza, como es de sobra conocido, con el fusilamiento de Diego de León y el exilio de otros oficiales y generales, entre los que se encontraban el brigadier Pezuela y el mariscal de campo Manuel de la Concha, hermano este último del coronel José de la Concha.61 Analizando sus hojas de servicio, podemos comprobar, en el caso de Pezuela, que se dice literalmente que, «de cuartel en Madrid, el 7 de octubre tomó parte con el Teniente General Don Diego de León en el levantamiento verificado en Madrid para derrocar la regencia del General Espartero y restablecer la de S. M. la Reina madre». Fue procesado por creérsele complicado en la sedición militar ocurrida en la noche del 7 al 8 de octubre de 1841, en el Real Palacio y condenado en rebeldía en consejo de guerra de oficiales generales a ser pasado por las armas.62 El caso de José Gutiérrez de la Concha, éste era coronel, cuando ocurre el citado levantamiento en el que interviene su hermano Manuel, a la sazón mariscal de campo, y aunque siguiendo su hoja de servicios, no parece implicado directamente, posteriormente obtuvo a solicitud propia, con fecha de 18 de octubre de 1841 el retiro con uso de uniforme y fuero militar a que le daban derecho sus años de servicio.63 José Gutiérrez de la Concha, se exilia permaneciendo emigrado en Lisboa, Londres y Paris hasta que en virtud de orden del gobierno provisional de 3 de Julio 1843, volvió al servicio activo en el empleo de coronel que anteriormente disfrutaba abonándosele el tiempo durante el cual estuvo separado del servicio. El 13 del mismo mes fue promovido al empleo de brigadier en consideración a sus relevantes méritos y a los distinguidos servicios que prestó a la causa nacional, contra la regencia del general Espartero presentándose con los generales Narváez, Concha y otros jefes a la Junta de Valencia. Posteriormente al triunfo del citado levantamiento es promovido al empleo de mariscal de campo, el 17 de julio de 1843, accediendo de esta manera a oficial general.64 Dejando aparte los méritos aducidos para dicho ascenso, lo que está claro es queen este ascenso, tiene una gran influencia su hermano Manuel, que intervino activamente en los eventos referidos, que fue condenado a muerte en rebeldía y sufrir el exilio ordenado por Espartero, y que al triunfar el alzamiento contra éste fue nombrado jefe del ejército de operaciones en Andalucía y ascendido al empleo de teniente general.

No se hace esperar mucho tiempo a José Gutiérrez de la Concha para el acceso a la categoría de oficial general, puesto que solamente seis meses después de su ascenso a brigadier fue promovido a mariscal de campo, gracias a la total pacificación de aquella ciudad de Zaragoza, y también le fue concedida la cruz sencilla de tercera clase de San Fernando.

Cuatro años y medio antes de la entrada en el generalato de José Gutiérrez de la Concha, el 15 de noviembre de 1843, Francisco Serrano Domínguez accede a la cúspide del generalato, tras obtener el empleo de teniente general, a la edad treinta y tres años, cuando desempeñaba el ministerio de la Guerra. Como se señala en su hoja de servicios, este ascenso es debido a los singulares y extraordinarios servicios que había prestado.65

El siguiente en acceder a la cúspide citada fue Manuel Pavía y Lacy, que lo consiguió a la temprana edad de treinta años, con el ascenso a teniente general el 31 de diciembre de 1844, es decir un año después de Serrano. Este ascenso se produjo cuando el citado general tenía el cargo de capitán general de Navarra, en recompensa de los servicios prestados en diferentes épocas.

No hay que esperar mucho tiempo, poco más de un año, para que otros dos de los personajes considerados, Pezuela y Concha, accedan también a la cúspide del generalato, haciéndolo prácticamente en la misma fecha, el 3 y 30 de abril del año 1846 y prácticamente a la misma edad de treinta y dos años. El primero de ellos tiene el cargo de capitán general de Castilla la Mancha e Inspector general de Caballería, considerando el ascenso citado por sus servicios prestados, y Concha que estaba al mando de las tropas expedicionarias destinadas a sofocar la rebelión que había estallado en Galicia, fue ascendido a dicho empleo por la pacificación de dicha región.

El último en obtener el empleo de teniente general, fue el de mayor edad, Juan Zavala de la Puente, que había sido el primero de los cinco en ascender a los empleos de capitán, coronel, brigadier y mariscal de campo, y a su vez es el que accede a la cúspide del generalato con mayor edad, cuarenta y ocho años, y una antigüedad de 20 de diciembre de 1852.

En un estudio sobre el Estado Mayor General del Ejército Español, en la sección de tenientes generales, figuran en esta clase setenta y nueve individuos, siendo el más antiguo de ellos Pedro Villacampa, nacido Laguardia (Huesca), el 10 de abril de 1775,66 y con una antigüedad en el empleo de 21 de febrero de 1814, constando el último de ellos con una antigüedad de 31 de enero de 1856, es decir más de cuarenta años de diferencia, Juan Prim y Prats, conde de Reus, nacido en dicha ciudad el 12 de diciembre de 1814. Estos dos generales coinciden en que ambos ascienden al empleo citado con edades similares, 38 años Villacampa y 41 años el conde de Reus, alcanzando ambos la dignidad de capitán general de Ejército. En este trabajo, donde se contempla la historia individual de cada uno de los 79 considerados, encontramos a los tenientes generales Francisco Serrano Domínguez, Manuel Pavía y Lacy, marqués de Novaliches, Juan de la Pezuela y Ceballos, marqués de la Pezuela, José Gutiérrez de la Concha é Irigoyen y Juan de Zavala y de la Puente, en los puestos 33, 36, 38, 39 y 65, respectivamente. De estos setenta y nueve tenientes generales, además de los siete citados, ascienden a la dignidad de capitán general de Ejército, Leopoldo O’Donnell, conde de Lucena, que hace el número 19, con una antigüedad de 26 de julio de 1839, con 30 años de edad cuando consigue el empleo de teniente general y Evaristo San Miguel Valledor, número 25, y antigüedad de 16 de junio de 1843, a los 57 años, lo que hace que de los setenta y nueve generales considerados, alcanzan la máxima jerarquía del Ejército, diez de ellos, es decir un poco más de un 12 %.

En el período que transcurre entre la caída de Espartero, el año 1843 y los pronunciamientos de Prim del año 1866 —período que, como es de sobra conocido, se alternan en el poder los generales Narváez y O’Donnell—, entre los generales considerados, sólo asciende a la dignidad de capitán general de Ejército, Francisco Serrano Domínguez, con una antigüedad 18 de julio de 1856, a la edad de cuarenta y cinco años Hay que esperar más de una década para encontrar promociones a esa dignidad, ya en las postrimerías del reinado de Isabel II, el 10 de octubre de 1867, en el caso del conde de Cheste, cuando este tenía cincuenta y ocho, y el 24 de abril del año siguiente, para los marqueses de Novaliches y la Habana, que tenían una edad de cincuenta y tres y cincuenta y ocho años, respectivamente. El marqués de Sierra Bullones, no es promocionado a capitán general por la reina Isabel II, lo que hace que se pase a la conspiración contra ella,67 teniendo que esperar a que su compañero el duque de la Torre le ascienda cuando era presidente del Poder Ejecutivo de la República siendo ya el general Zavala septuagenario.

Tenemos pues, que cuatro de estos militares, alcanzan la cúspide del generalato a edades muy tempranas, entre los treinta y los treinta y seis años, siendo el más joven en lograr el empleo de teniente general, Manuel Pavía y Lacy, que lo obtuvo cuando sólo tenía treinta años de edad, mientras que Zavala lo alcanza cuando ya rondaba la cincuentena.

Respecto a la edad que tenían cuando fueron promocionados a la dignidad de capitán general de Ejército, Espartero y Serrano, están en la cuarentena, con 44 y 46 años de edad respectivamente, Pavía y Lacy, Pezuela y Concha, tienen entre cincuenta y sesenta años —Pavía y Lacy, 53 años y Pezuela y Concha 57 años— teniendo Zavala cumplidos los setenta años.

En la Tabla XI, podemos observar las edades en que alcanzan las diferentes clases del generalato, los seis personajes considerados

TABLA XI. Edades que tenían los capitanes generales de Ejército, al alcanzar las diversas clases del generalato.

NombresEdades (Años)
Mariscal de campoTeniente generalCapitán general
Espartero404244
Serrano303345
Pezuela343658
Pavía y Lacy263053
Concha343658
Zavala364870
Capitanes generales de Ejército en la Restauración (1874-1923)

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