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El aquelarre y la autonomía

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Cualquier mujer que se congregara de manera sospechosa con otras mujeres podía ser considerada una bruja, así como aquellas que tuvieran oficios relacionados a la salud sexual y reproductiva. Nótese que las actividades que tuvieran que ver con los encantamientos y el curanderismo estaban penadas por la antigua legislación dado su carácter ajeno a la institucionalidad religiosa y, por ende, potencialmente subversivo; pero detrás de las acusaciones de curanderismo había parteras y mujeres que practicaban la medicina relacionada con la gestión de la salud sexual femenina. La medicina basada en plantas e independiente del poder de la Iglesia era considerada sumamente peligrosa, dado que la medicina no estaba instaurada aún como institución científica. Aquí podemos identificar algo que, a ojos actuales, resulta irónico: las mujeres científicas eran susceptibles a las acusaciones de brujería.

Si has tenido el gusto de leer la novela Outlander (o su hermosa adaptación a la televisión) recordarás que Claire, su protagonista, practica la medicina herbal y es valorada por la comunidad que la recibe por sus dones, que terminan siendo la base de una acusación de brujería más adelante en la historia.

Y con respecto a los aquelarres, podemos resaltar lo siguiente: hoy en día, se sigue fomentando la competencia entre mujeres, en vez de alentar a la cooperación. Como por estas épocas la validación y la protección social venía a través del matrimonio y la maternidad, las otras mujeres pasaron a ser rivales que se disputaban la atención de los candidatos más convenientes. Asimismo, esto desalentaba a que las mujeres pudieran elegir no formar una familia y convivir con otras mujeres, o incluso formar vínculos sexoafectivos entre ellas.

Como vemos, todo lo que se saliera del mandato familiar era punible.

Un ejemplo en la ficción de esto último es la bellísima película Practical Magic (también basada en un libro), protagonizada por Nicole Kidman y Sandra Bullock. Ellas son las herederas en una larga tradición de brujas que han convivido de manera familiar solo entre hermanas, lo cual es percibido con sospecha y recelo entre los pueblerinos.


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