Читать книгу El silencio es la música del alma - Manuel José Fernández Márquez - Страница 12

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8. Leyendo a los místicos 1

«Son muchos los que andan buscando constantemente, pero sólo encuentran los que permanecen en constante silencio...

El hombre que se complace en la abundancia de palabras, aunque diga cosas admirables, está vacío por dentro.

Si amas la verdad, sé amante del silencio.

El silencio, como la luz del sol, te iluminará en Dios y te librará de los fantasmas de la ignorancia.

El silencio te unirá con el propio Dios...

Más que cualquier otra cosa, ama el silencio, que habrá de darte un fruto que ninguna lengua humana es capaz de describir.

Al principio hemos de violentarnos a nosotros mismos para permanecer silenciosos, pero luego nace algo en nosotros que nos arrastra al silencio.

Ojalá te haga Dios experimentar ese «algo».

Si lo logras, una luz inefable te iluminará... y, al cabo de un tiempo, una indecible dulzura nacerá en tu corazón, y el cuerpo se verá casi obligado a permanecer en silencio.»

Isaac de Nínive, un monje sirio.

Citado por A. de Mello,

Contacto con Dios, págs. 53-54, Sal Terrae.

El silencio es la música del alma

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