Читать книгу Incursionando en el mundo de la investigación: orientaciones básicas - María Isabel Castellano Caridad - Страница 10
Capítulo 3 Planteamiento del problema: identificando el problema de investigación
ОглавлениеNo hay viento favorable para el
que no sabe a qué puerto se dirige.
Séneca
(Citado en Guerri, s. f.)
Una vez identificado el problema y construido un título que lo exprese o represente, se da continuidad a la exposición de la situación problema, que se denomina planteamiento del problema de la investigación. Este hace referencia al establecimiento claro y preciso de su objeto, al cual se llega mediante una serie de preguntas, lecturas, indagaciones, entrevistas, entre otros aspectos. Su tarea consiste en dejar ver al investigador si su proyecto de investigación es posible, dentro de sus tiempos y recursos disponibles.
En realidad, plantear el problema no es otra cosa más que afinar y organizar con mayor precisión la inclinación del investigador. La transición de la idea al planteamiento del problema puede surgir, en algunos casos, inmediatamente, de manera espontánea, o consumirse un tiempo significativo. Sin embargo, todo ello va a estar supeditado al grado de familiaridad que el investigador tenga con el tema que va a tratar, a la claridad de sus ideas, a la existencia de estudios previos y, sobre todo, a la constancia y las destrezas personales que demuestre.
Ahora bien, el tener una idea o tema no es condición sine qua non para que el investigador suponga que puede de ipso facto obtener la información que se requerirá, qué métodos utilizará y, más aún, cómo analizará los datos obtenidos. Previamente, es necesario expresar, en términos específicos, el problema; esto debe hacerse de manera precisa y clara, de modo que sea posible abordarlo con procedimientos científicos. Después hay que construir el mapa de variables, lo que permitirá contar con una idea más clara para la composición o estructura del planteamiento del problema, ya que ofrece información sobre estas, pero también sobre las dimensiones, es decir, hasta dónde llega el problema y los indicadores que facilitan lograr la solución.
En este orden de ideas, de acuerdo con lo dicho y conociendo los enfoques del planteamiento del problema (de lo general a lo particular), resulta más práctico orientar los pensamientos con mayor exactitud, con el apoyo de las dimensiones y los indicadores, y así no perder la idea central de la problemática.
Según Soriano (2005), “el planteamiento del problema permitirá alcanzar una comprensión más profunda del mismo, debido a que contiene los elementos para lograr la explicación científica o solución del problema y por lo tanto la negación dialéctica de este” (p. 49). Esto refleja la importancia que reviste realizar el planteamiento de la investigación de manera clara y precisa, pues con ello negamos la ignorancia de la problemática al inicio, pero, a su vez, sin ella no sería posible empezar el camino hacia su conocimiento.
Dentro de este marco, un problema bien esbozado queda claramente determinado. Si alcanza a tener gran precisión, puede estar en la posibilidad de lograr un procedimiento satisfactorio. En efecto, el investigador debe ser capaz no solo de conceptuar el problema, sino también de verbalizado de forma clara, precisa y accesible.
En ciertos contextos, el investigador está al corriente de lo que anhela innovar. Habida cuenta, se le manifiestan ciertos conflictos para informarlo a los restantes, y en este sentido es necesario realizar un arresto por cambiar su tendencia a expresiones que existan de manera evidente, puesto que hoy en día la generalidad de las indagaciones demanda la asistencia de otros individuos.