Читать книгу Alimentación vegana - Ruediger Dahlke - Страница 44

Próstata y mente

Оглавление

A todo ello se añade el embarazoso componente emocional que un problema de próstata acarrea a los hombres de nuestra sociedad. En las sociedades industrializadas occidentales altamente competitivas, casi el 100 % de los hombres de setenta años tiene un aumento del tamaño de la próstata que le dificulta la micción. La orina simboliza las aguas residuales del alma. Que los hombres occidentales tienen un problema para liberarse mentalmente es algo que no solo se manifiesta en la micción a edades avanzadas, sino también en otros muchos planos, e incluso a edades anteriores. Los árabes que tienen que «atender» a un harén no tienen esos problemas de evacuación…

La misión de la próstata, que en su volumen natural tiene el tamaño de una avellana, es la de producir fluido para favorecer las relaciones sexuales, apoyada por la glándula de Cowper, generar un lubricante y aportar fluidos nutrientes al esperma. Pero para ello precisa de un determinado entrenamiento; por decirlo de alguna forma, debe tomar parte en largos rituales amorosos y ser entrenada para realizar correctamente su misión. Si ocurre así, tiende a disponer de una vida larga para trabajar y ocuparse de que todo se deslice y fluya correctamente, de forma sensual y placentera.

Pero cuando su trabajo es ignorado, porque esas fiestas amorosas no son dignas de tal nombre y son tan solo unos fugaces fuegos artificiales que enseguida se apagan, es muy posible que aparezcan los problemas. Tras décadas de una silenciosa vida pasional, la glándula lo acusa y comienza a crecer con un desarrollo excesivo: la denominada hipertrofia. Por regla general suele ser benigna y el problema se hace perceptible por una «emisión» masculina cada vez más lastimosa. No tiene por qué ser muy preocupante, pero ¿cuántos de los jóvenes que ahora compiten por «llegar más lejos y más alto» sospechan que en algún momento se producirá un agotamiento paulatino de su actual y orgulloso chorro masculino?

En este caso no sería útil la conocida solución de los urólogos con los masajes prostáticos que, en tiempos, gozaban de gran consideración. La solución radica en una activa vida sexual, con festivales amorosos por todo lo alto, suculentos y, sobre todo, mantenidos de forma prolongada, con sus correspondientes erecciones tal y como exige la próstata. Está claro que esa actitud no suele ser la regla habitual en una sociedad en la que todo son prisas, y, cuando se da, para la glándula, su propietario y su pareja, suele ser una excepción.

De hecho, en nuestras sociedades casi todos los hombres son frígidos, es decir, en las eyaculaciones, que los occidentales confunden con orgasmos, permanecen totalmente secos. Aun cuando en los patriarcados este diagnóstico suele estar reservado a las mujeres, el fenómeno es más que claro. ¿Por qué la Madre Naturaleza, que siempre va sobre seguro y para conseguir una pareja de ranas produce una gran cantidad de renacuajos, aquí no debería ir también sobre seguro y hacer que los dos sexos tengan, por obligación, una jugosa «fiesta resbaladiza»? Los hombres de otras culturas (amorosas) muestran cómo funciona la cosa de forma natural.

El dilema es cómo mejorarse a sí mismo, incluso a edades avanzadas. Está claro que una sexualidad desarrollada de forma temprana y continuada, al mismo tiempo que una renuncia a la leche en la vida adulta y el traslado del deseo de carne desde el comedor al dormitorio, y con ello al plano de la vida amorosa, sería la mejor medida preventiva. En este caso tampoco se han observado efectos secundarios; una sexualidad placentera nos hará felices hasta edades muy avanzadas.

Sin embargo, las constantes visitas al urólogo por el aumento de los valores de PSA constituyen, evidentemente, un proceso penoso y embarazoso de diagnóstico precoz que siempre implica mucho miedo. La prevención real aporta justo lo contrario que el miedo, el goce de la vida. Este sería el deseo y la misión de esta glándula: quiere regir y favorecer una maravillosa vida sexual.

Alimentación vegana

Подняться наверх