Читать книгу Oradores menores. Discursos y fragmentos - Varios autores - Страница 9
Оглавление1 Cf. Fr. BLASS , Lycurgi…, 3, págs. 95-96; F. DURRBACH , Lycurgue. Conlre Léocrate el fragments, París, 19562 , págs. VII y VIII; J. O. BURTT , Minor..., 2, Londres, 1973 (2. a reimpr.), pág. 2; E. MALCOVATI et al., Oratori attici minori, Turín, 1977, pág. 801, n. 1.
2 No conocemos con exactitud la fecha de su nacimiento, pero sabemos que era algo mayor que Demóstenes, nacido en 384/3 a. C., pues, según el argumento de Libanio que aparece al comienzo del primer discurso Contra Aristogitón, él habló el primero en el proceso por el privilegio de la edad; además, en la obra de Pseudo-Plutarco su biografía precede a la de Demóstenes.
3 Los Eteobútadas eran una de las familias aristocráticas más ilustres de Atenas por su origen, pero muy unida a la causa democrática. Sus miembros creían que eran descendientes del héroe Butes, hermano de Erecteo, de ahí el significado de su nombre, «los verdaderos Bútadas», es decir, los descendientes directos del héroe. Por su antepasado epónimo, Butes, la familia se vinculaba con Posidón Erecteo, que según una antigua leyenda era el padre mismo del héroe. Conocemos detalles interesantes sobre algunos de los ascendientes del orador. El más antiguo de ellos parece ser un Licurgo que llegó a ser jefe de las gentes «de la llanura» en su lucha contra Pisístrato. Su bisabuelo era Licomedes, que obtuvo, como su abuelo Licurgo, el privilegio de una sepultura pública en el Cerámico. El abuelo fue ejecutado por los Treinta por la denuncia de Aristodemo de Butes. De su padre Licofrón no se sabe nada. Para más detalles sobre su familia, cf. PSEUDO -PLUTARCO , 841b; A. CROISET , Histoire de la littérature grecque, t. IV, París, 1947, págs. 629-30; DURRBACH , op. cit., págs. VIII-XII; y BURTT , Minor ..., pág. 3.
4 Cf. DURRBACH , Lycurgue. Contre Léocrate ..., pág. X; y A. CROISET , Histoire ..., pág. 630.
5 Cf. PS EUDO -PLUTARCO , 843a-b, donde se amplían los detalles sobre su descendencia, y DURRBACH , Lycurgue..., págs. XIX-XX.
6 Cf. DURRBACH , ibíd..., pág. XII. MALCOVATI , Oratori..., pág. 802, comparte esta misma opinión, precisando que su admiración por Esparta, tradicional en la aristocracia ateniense, también derivaba de su familia. Por su parte, R. F. RENE HAN , «The Platonism of Lycurgus», Greek, Roman and Byzantine Studies, XI (1970), 219-31, considera que ciertas semejanzas entre Licurgo y Platón se entienden mejor si aceptamos la influencia de éste sobre aquél, en particular de Las Leyes. Por el contrario, A. CROISE T , Histoire..., págs. 630-631, duda de esta supuesta influencia platónica, pues es imposible apreciarla en sus discursos y ni siquiera en el plano moral, cuya base, según él, no tiene por qué considerarse platónica.
7 PS EUD -PLUTARCO , 841e, y DURR BACH , ibíd..., pág. XIII.
8 Se discute la fecha exacta en que Licurgo comenzó sus funciones como encargado de la hacienda. Frente a la opinión tradicional, que postulaba el año 338 como fecha de inicio, DURRBACH , págs. XXII-XXIII, apoyándose en G. COLIN , «Note sur l’administration financière de l’orateur Lycurgue», Revue des Études Anciennes (1928), 191-94, considera como más probable la de 337/6, coincidiendo la elección de Licurgo con la de los magistrados ordinarios.
9 Cuestión muy debatida ha sido también el nombre exacto del cargo que ocupó Licurgo. Sobre esto, A. CROISET , Histoire..., pág. 631, n. 1, cree que éste sería «intendente de los fondos militares» o bien presidente del colegio formado por los «intendentes del teórico». DURRBACH , págs. XX-XXI, que resume muy bien el estado de la cuestión, considera que el nombre del cargo debía ser tamías epi tḕn dioíkēsin («intendente encargado de la administración »). MALCOVATI , Oratori..., pág. 803, por su parte, apoya la denominación de tamías tés koinês prosódou («intendente de la hacienda pública»).
10 PSEUDO -PLUTARCO , 841c, y DURRBACH , págs. XXI-XXII.
11 PSEUDO -PLUTARCO , 841d, habla de 250 talentos, mientras que el decreto de Estratocles, de 650. Es posible que la diferencia entre ambas sumas se deba a un error del copista en la biografía. Sobre esta cuestión, cf. DURRBACH , pág. XXIV y en n. 2.
12 PSEUDO -PLUTARCO , 842f. Para DURRBACH , pág. XXV, 1.200 talentos habría sido la media de los ingresos estatales durante los doce años de su mandato.
13 Es posible, como opina DURRBACH , pág. XXVI, que interviniera en la administración militar desde otra magistratura, también extraordinaria, pues tanto Pseudo-Plutarco como el decreto distinguen claramente las dos funciones. Nada se sabe sobre las características ni la extensión en el tiempo de este nuevo cargo.
14 Cf. DURRBACH , págs. XXVI-XXVII.
15 DU RRDACH , págs. XXVIII-XXIX.
16 Sobre el uso que se hacía de los objetos sagrados para financiar gastos extraordinarios, cf. DURRBACH , págs. XXIX-XXX.
17 PSEUDO -PLUTARCO , 843d, y DURRBACH , pág. XXXII.
18 PSEUDO -PLUTARCO , 841d y f, y DURRBACH , págs. XXXIII-XXXV.
19 PSEUDO -PLUTARCO , 841e. Estas palabras deben ser matizadas. No parece que Licurgo desempeñara funciones oficiales de policía de Estado, sino que más bien, desde su función de acusador, él mismo se había propuesto perseguir todo lo que considerara comportamientos inaceptables. No olvidemos que en Atenas se dejaba a los particulares la denuncia y persecución de los crímenes que atentaban contra la seguridad del propio Estado (cf. DURRBACH , págs. XLI y XLII).
20 DURRBACH , pág. XV.
21 Según C. MOSSÉ , «Lycurgue l’Athénien, homme du passé ou précurseur de l’avenir», Quaderni di storia XV (1989), núm. 30, 25-36, Licurgo, como gestor de las finanzas públicas atenienses, anuncia ya los grandes administradores y gestores de los futuros Estados helenísticos. Sugiere también este autor que Demetrio Falereo, siguiendo el ejemplo de Licurgo, que había mandado establecer un texto oficial de los grandes poetas trágicos, habría animado a Ptolomeo I Soter a crear la gran Biblioteca de Alejandría.
22 PSEUDO -PLUTARCO , 843c, nos dice que se le levantó una estatua de bronce en el Cerámico. PAUSANIAS , I 8, 2 menciona otra estatua suya no lejos del Pritaneo. También Pseudo-Plutarco menciona que su hijo mayor y sus descendientes recibieron el honor de la comida en el Pritaneo.
23 La fecha de su muerte se puede establecer con bastante precisión: vivía aún cuando en Atenas se suscitó un gran debate sobre los honores que se debían conceder a Alejandro (324), pero murió ese mismo año de enfermedad, justo cuando se emprendió el proceso contra Demóstenes por el asunto de Hárpalo (sobre esto, cf. DURRBACH , pág. XVIII).
24 Sobre esto, cf. PSEUDO -PLUTARCO , 842e. CROIS ET , Histoire..., pág. 632, n. 4, duda del resultado final del proceso emprendido contra los hijos de Licurgo, dando por cierto que éstos fueron encarcelados finalmente por no haber podido pagar la fuerte multa que se les impuso.
25 PS EUDO -PLUTARCO , ibíd.
26 Cf. CROISET , Histoire..., pág. 629.
27 P SEUDO- P LUTARCO , 843c-e. Los discursos mencionados, todos acusatorios, son: Contra Autólico el areopagita, contra Lisicles el general, contra Démades el hijo de Démeas, contra Menesecmo, contra Dífilo y contra Aristogitón, Leócrates y Autólico, por cobardía.
28 Sobre los problemas que plantea la identificación de los discursos de Licurgo, cf. DURRBACH , págs. XXXVII-XXXVIII.
29 A. CROISET , Histoire..., pág. 633, respecto a la labor oratoria de Licurgo, duda que éste llegara a ejercer funciones de logógrafo, en parte por su propia fortuna personal. Sin embargo, no tenemos por qué dudar de ello, pues en su función de acusador no sólo le vemos hablando a él mismo ante el tribunal, como en Contra Aristogitón, sino que también compuso discursos para otros y les apoyó en la acusación, como en los discursos Contra Licofrón y Contra Euxenipo. Además, como nos dice PSEUDO -PLUTARCO (841f), en los tribunales Licurgo era considerado como una ayuda para todos aquellos que necesitaran un abogado.
30 La clasificación más completa de las obras de Licurgo la dio F. BLASS , Die attische..., III, págs. 108-110.
31 La identidad entre el discurso mencionado por Harpocración y el que menciona la Suda es defendida por DURRBACH , pág. XXXIX. MALCOVATI , pág. 809, por su parte, considera que ambos serían discursos diferentes.
32 Sobre esto, cf. MALCOVATI , págs. 809-810, y DURRBACH , págs. XL-XLI.
33 Sobre las circunstancias de este proceso, cf. infra, págs. 241-242.
34 Sobre las circunstancias de este proceso, cf. infra, págs. 245-246.
35 El discurso que en la Suda se denomina Katà Kēphisodótou es llamado en una glosa de Patmo Katà Kēphisodótou perì tôn Dēmádou timôn, por lo que parece que es el mismo que en otros autores, como Ateneo, se denomina Katà Dēmádou. Sobre esto, cf. MALCOVATI , pág. 813, y DURRBACH , pág. XLVII, n. 1.
36 Démades había alejado de Atenas el peligro del castigo de los macedonios en dos ocasiones: una, en 336, cuando tras la muerte de Filipo Alejandro penetró en Tesalia y Beocia, y se detuvo por los ruegos e insistencias de una delegación ateniense encabezada por él; otra, en 335, cuando tras la destrucción de Tebas Alejandro exigió la entrega de los diez cabecillas de la oposición —entre los que se encontraba Licurgo— y él junto con Foción hicieron desistir al rey de su petición.
37 Se ha tratado de explicar de modo diverso por qué el único acusado fue Lisicles y no también Cares y Estratocles, colegas suyos en aquellas fechas. Sobre esto, cf. MALCOVATI , pág. 815, y DURRBACH , pág. XLIX.
38 Para más detalles sobre los discursos acusatorios de Licurgo aquí mencionados, cf. MALCOVATI , págs. 811-815 y DURR BACH , págs. XLIII-L.
39 Según nos dice MA LCOVATI , pág. 817, n. 30, en realidad hubo igualdad de votos. Pero en esos casos se aplicaba el calculus Minervae («el voto de Minerva»), que deshacía los empates en favor del reo. El nombre derivaría del episodio mítico en que Atenea, durante el juicio de Orestes ante el tribunal del Areópago, deshizo el empate que se produjo, dando su voto a favor del acusado.
40 BURTT , Minor..., pág. 10, y MA LCOVATI , Oratori..., pág. 816.
41 De hecho el discurso pone muy a las claras la ética personal de nuestro autor: admiración hacia el pasado y desprecio global hacia el presente, sacralizando los valores políticos y sometiendo la vida privada de los ciudadanos a las exigencias comunitarias. Sobre esto, cf. S. SALOMONE , «L’impegno etico e la morale di Licurgo», Atene e Roma XXI (1976), 41-52. Por otro lado, sobre este mismo discurso, G. KENNEDY , The art of persuasion , pág. 251, opina que es un buen ejemplo de acusación desmedida emprendida por la confianza de su autor en la técnica retórica.
42 PSEUDO -PLUTARCO , 842c.
43 HERMÓGENES , Sobre las formas de estilo II 11, 178.
44 CICERÓN , De Oratore II 94, Brutus 36; QUINTILIANO , De institutione oratoria XII 10, 22.
45 MALCOVATI , op. cit., pág. 818, y DUR RBACH , op. cit.. págs. L-LII.
46 Cf. CROISET , op. cit., pág. 636.
47 Sobre la tradición manuscrita de estos dos autores cf. DURRBACH , op. cit.. págs. LIII-LIV (dedicada en principio sólo a Licurgo); BURTT , op. cit., págs. Xl-XII (donde se estudian juntos ambos autores); M. NOUHAUD y L. DORS -MÉARY , Dinarque: Discours, págs. XXIII-XXV (dedicada en principio sólo a Dinarco).
48 Nouhaud y Dors-Méary lo consideran de comienzos del siglo XIV .
49 Nouhaud y Dors-Méary lo consideran con certeza del siglo XIV .
50 Nouhaud y Dors-Méary siguen la tesis de Blass.
51 Nouhaud y Dors-Méary consideran al Vratislaviensis de finales del XV .
52 Cf. DURRBACH , op. cit. , pág. LIV.