Читать книгу La Voz - Carlos E. Baz Garfias - Страница 15

Había trabajado casi todo el día en mi computadora, tenia muchas fotos que editar, y quise terminarlas ese mismo día. El reloj en mi computadora marcaba casi las diez de la noche cuando termine la ultima foto - al fin - comente. Me levante de mi silla, entre a mi cocina, abrí la nevera - creo que me lo merezco - volví a decirme. tome una cerveza corona y la serví en mi tarro favorito. Camine hacia la ventana y observe la oscura noche, invitaba a verla mas de cerca. Salí al patio, la noche estaba muy agradable, y silenciosa. Bebía tranquilamente mi cerveza, la saboreaba viendo hacia el cielo. En un momento decidí entrar de nuevo a mi departamento y ver un programa en la televisión, desistí de la idea, me sentía muy bien en el patio disfrutando de esta noche. Al pasar los minutos empece a sentirme cansado, mis ojos y mis dedos había estado mucho tiempo, viendo y tecleando sobre la computadora así como mi trasero en la silla, aunque era cómoda, estuve muchas horas sentado. Creo que necesito un baño, entre y me fui desnudando camino al baño, abrí la llave de la regadera, y entre a la bañera. El agua me relajo los músculos, los tenia tensos de tantas horas de trabajo. Mi cama me espera paciente y no la hice esperar. Cerré los ojos, mi cuerpo empezó a relajarse mas, me sentía bien con el baño. Oi un golpe, medio abrí los ojos, estaba empezando a dormir, me acomode sobre mi costado derecho de mi cama, estaba listo para bucear en un sueño profundo. Volví a oír unos golpes, ahora mas claros, no eran fuertes, pero todo estaba en silencio, los oí claros, abrí mis ojos, me pregunte de donde provenían. Espere unos segundos y volví acomodarme en mi cama. Después de unos minutos sentí que alguien tocaba mi ventana del cuarto. Alguien llamaba a mi ventana, era el sonido que hace una mano al tocar. Acomode mis almohadas y cerré los ojos para tratar de dormir. El sueño me había abandonado, estaba despierto, me sentía cansado pero no podía dormir. Alguien volví a tocar mi ventana, fueron tres veces, me levante, la ventana la tenia a un lado de mi cama, la luz de la luna alumbrada el patio, donde unos minutos antes había estado bebiendo una cerveza corona y disfrutando esta noche agradable. Me asome por la ventana, claro no había nadie, era imposible, lo sabia. Regrese a mi cama, me recosté sobre mi cobija, viendo hacia el techo del cuarto, estaba a oscuras. Alguien con su mano volví a golpear mi ventana mas fuerte, no me moví, espere a ver que sucedía, no quise hacer caso, volví acomodarme sobre mi lado derecho y en ese momento volvieron a tocar mas fuerte. Empece a sentir esa sensación en mi cuerpo que siempre siento antes estos sucesos. Los golpes volvieron a repetirse varias veces. Sabia que no había nadie, pero me volví asomarme. Espere unos minutos antes de acostarme, mi cuarto seguía oscuras, sin ruidos, todo estaba en silencio, a no ser que volviera esa mano a tocar mi ventana. El sueño se había ido totalmente, me senté sobre mi cama, pensaba, fui al baño hacer una necesidad, la cerveza había echo efecto. Regrese a oscuras a mi cuarto, me pare enfrente de mi cama, pensando si me volvía acostar o si prendía la televisión mejor.

Fue un ruido muy fuerte, estremecedor, pensé que el vidrio de mi ventana explotaría en pedazos, ahí estaba, era una mano larga y oscura, tenia el puño cerrado, trate de caminar hacia mi ventana, pero no pude, una energía mas fuerte que la mía me detenía.

Supe quien era, el único ser malvado que tiene esa fuerza es la muerte. Ahí seguía, valiente, mostrando su fuerza y poder. Abrió el puño totalmente, era grande, muy grande, la mano se puso sobre mi ventana, pensé que ese era el golpe final y en segundos mi ventana estaría echa pedazos….la mano me hizo la señal de adiós….oyéndose una carcajada tenebrosa. La muerte se había ido.