Читать книгу Tratamiento del dolor en los 106 puntos tendinomusculares™ (Color) Flossing - Colette Bacchetta - Страница 12
ОглавлениеIntroducción
EL CAMINO RECORRIDO...
En mi primer libro, Le pied, manupressure au coeur de la douleur, que recupero en esta obra, describía los 32 puntos de acupuntura tendinomusculares (TM) de los meridianos que pasan por el pie.
Esta obra encuentra su continuación lógica a través de esta nueva publicación. Con la idea de un tratamiento más global de la persona, he investigado el resto de los puntos tendinomusculares del cuerpo. He contado 106, repartidos por los 12 meridianos ordinarios de acupuntura. Aquí describo su ubicación, sus propiedades y sus indicaciones terapéuticas, destacando especialmente su componente emocional.
Y es por esto por lo que he decidido extender mis investigaciones al conjunto del cuerpo cuando, hasta ahora, me había limitado al pie.
Es evidente que siempre ha estado en mi mente investigar el método Pyé-Ko Kan-3® para todos los órganos del cuerpo. Cuando observo que un fenómeno opera en una parte de un conjunto, siempre quiero asegurarme de su eficacia a escala global. Por eso me parece que es algo que había que hacer. A este respecto, he de reconocer que han sido cruciales los comentarios recibidos tras la aparición de mi primera publicación. Muchos profesionales expresaron su interés por este libro: médicos, enfermeras, auxiliares, psicólogos, podólogos, posturólogos, osteópatas, reflexoterapeutas, etc. También me sorprendió agradablemente constatar que personas que no tenían nada que ver con el sector médico pudieran estar interesadas en mi método, que podría parecer incomprensible para el profano. Aprovecho esta ocasión para darles las gracias a todos mis lectores y lectoras. Además de los mensajes de carácter personal recibidos, me pidieron que escribiera artículos en revistas especializadas y me invitaron a presentar mis trabajos en conferencias3 destinadas a profesionales de la salud, pero también, más original aún, a públicos más amplios, como ante la Asociación de Mujeres Dirigentes Europeas.
Este reconocimiento de mis colegas y de un público más amplio me resulta extremadamente gratificante, pero no es suficiente para pasar al acto. Como profesional de la salud, trabajo horas y horas sin mirar el reloj, haciendo prueba de disponibilidad para adaptarme a los horarios de las personas que requieren tratamiento. Y a pesar de todo ese tiempo, todavía me apetece dedicar buena parte de mi tiempo libre a leer y escribir sobre temas profesionales que me motivan.
Así, esta nueva edición no habría podido ver la luz si no hubiera vivido nuevas y enriquecedoras experiencias profesionales. Desde 2010, estas vivencias me han llevado a explorar nuevos campos que me han permitido estudiar, sondear, probar, anotar, confrontar, contrastar, descifrar, verificar, explicar y, por último, plasmar en el papel los pormenores de la nueva dimensión del método Pyé-Ko Kan-3® y de sus 106 puntos tendinomusculares aplicados al conjunto del cuerpo.
EL 12 DE ENERO DE 2010: SEÍSMO EN HAITÍ
En la continuidad de mi ejercicio profesional en el Centro de Reflexología y de mi trabajo en el Institut Aquitain du Pied, especializado en medicina y cirugía del pie, me vi obligada a interesarme por la historia del individuo, por su demanda de acompañamiento en su sufrimiento o su dolor.
Tras el seísmo del 12 de enero de 2010 de Puerto Príncipe, en Haití, pedí intervenir durante mis vacaciones como voluntaria junto con los equipos médicos. Le doy las gracias a Manuel Steed por haberme recibido y presentado a los doctores Hans Larsen y Jessy Jeannot-Larsen, con los que pude colaborar; Hans es doctor en medicina especializado en ortopedia y traumatología, mientras que Jessy es doctora en medicina especializada en medicina física y rehabilitación. En el hospital de campaña de Gheskio, en un ámbito multidisciplinar, presté mis servicios aplicando el método Pyé-Ko Kan-3® y relajación, tanto a adultos como a niños, todos con uno o los dos miembros superiores y/o inferiores amputados. También intervine con los niños de corta edad con traumatismos craneales en el hospital St. Germain, Centre Tabarre, en el servicio de neurología infantil dirigido por la señora Gena Heragty.
Este encuentro con la población haitiana fue conmovedor. En las Antillas Mayores, traté a numerosas personas en el marco de una estrecha colaboración con los doctores Hans Larsen y Jessy Jeannot-Larsen, junto con su enfermera, asistente y traductora, Claudia, y los equipos de fisioterapeutas. Tuve que enfrentarme al sufrimiento de adultos y niños que habían sido sometidos a una o varias amputaciones. Estas personas, con grandes minusvalías, frágiles emocionalmente como consecuencia de unos acontecimientos traumáticos, pero que hacían gala de una gran dignidad, podían describir durante la consulta cómo se habían tenido que enfrentar al drama y cómo, en la mayoría de los casos, su día a día transcurría en la precariedad y la pobreza. Además, también era habitual que pasaran por el duelo de haber perdido a sus familias o sus allegados, soportando la destrucción de su hábitat, la pérdida de su ámbito de vida profesional o escolar y la ausencia de medios, tanto materiales como financieros, para seguir adelante. La esperanza que depositaban en la acogida, la dedicación y los tratamientos ofrecidos por el personal médico se fortalecía gracias a su fe permanente. Bajo la tienda del hospital de día creado para hacer frente a la urgencia, en un calor sofocante de casi 40 °C, o en las salas del hospital pediátrico en las que resonaba el llanto de los bebés traumatizados, todos fuimos solidarios para aportar un acompañamiento médico ante tanto daño corporal y psicológico, e incluso psíquico.
En 2011, otra vez durante mis vacaciones y en el hospital de campaña de Gheskio, volví a tratar a los pacientes del año anterior, algunos ya con prótesis o a la espera de recibirlas.
La demanda vital de todos frente a la amputación vivida era que se les aliviaran las dolorosas y traumáticas heridas corporales: sensación de que unas garras les desgarraban la carne del muñón, temblores intensos, sensación de miembro fantasma, etc. La imagen del cuerpo desmembrado, restaurado en parte por la comunicación verbal y táctil, alivió el dolor de un buen número de personas. Cada uno, a su manera, integró la dinámica adaptativa y propulsiva propuesta para adquirir el proceso de reaprendizaje y reeducación frente al traumatismo sufrido. Compartimos lágrimas y sonrisas mientras esperábamos a que las prótesis se adaptaran a su caso en concreto. Mi agradecimiento a todos los equipos multidisciplinares y, modestamente, me inclino con toda humildad ante todas las víctimas que me encontré después del seísmo. Con su simple presencia, esas personas me aportaron su mirada profunda y escudriñadora, y su confianza, el mensaje de la fragilidad de la vida revelado por esta catástrofe natural que tanto había estremecido al ser humano en todas sus dimensiones.
Todos se beneficiaron del tratamiento mediante manopresión corporal reflexoterapéutica Pyé-Ko Kan-3® e hipnosis, proceso de tratamiento permanente, de forma diferente, de percibir y de ser, de entrar en contacto con sus propios recursos para realizar y abordar una adaptación al cambio.
Sentí la necesidad de tener una actitud vigilante hacia ellos, de una inversión sostenida durante nuestros encuentros para crear un acompañamiento estructurado. En cada visita, compartía con ellos la gravedad de su caso, sus temores, sus miedos y sus obsesiones en cuanto a sus daños corporales irreversibles, pero también su voluntad feroz por sobrellevar, superar y aceptar sus mutilaciones a través de su determinación y su esperanza de recibir sus prótesis. En su cultura, fuese cual fuese su confesión religiosa, todos hacían prueba de energía espiritual y compromiso con la vida.
A este respecto, tengo la sensación de que esta aventura fue enriquecedora, en el sentido de que las personas amputadas a las que tanto escuché y por las que tanto me esforcé en sanar su sufrimiento físico y psíquico me aportaron mucho. El método Pyé-Ko Kan-3® es un encuentro en el corazón del dolor. Lo que viví en Haití me reafirmó más que nunca en la idea imperiosa de que el tratamiento impone aprehender al otro como una persona/paciente que sufre en toda su dimensión humana.
LA HIPNOTERAPIA PARA CALMAR EL DOLOR
En 1990 estudié las técnicas de relajación de diferentes autores, entre ellas las de los doctores Johannes-Heinrich Schultz, Edmund Jacobson, Michel Sapir, Carl Simonton, Raymond Abrezol y Jean-Claude Guyonnaud, en el Institut International de Relaxologie, dirigido por Jean-Marc Descoubes. Con el objetivo de mejorar mi práctica en hipnoterapia para tratar el dolor, me dirigí al doctor Fabrice Lakdja. Este gran especialista, coordinador de la formación para la obtención del diploma de hipnosis médica, es jefe de servicio, anestesista-reanimador y psicoterapeuta del Institut Bergonié, centro regional de lucha contra el cáncer. También es presidente del Comité Gironde Ligue contra el cáncer. En enero de 2012 asistí como observadora invitada a sesiones prácticas de hipnosis médica del DU, que tuvieron lugar en la Universidad Victor Segalen (Burdeos 2), lo que me ofreció la oportunidad de darle las gracias al doctor Fabrice Lakdja y al profesor Gérard Ostermann. De esta forma pude repasar y enriquecer lo aprendido teniendo acceso a las prácticas enseñadas por los médicos especialistas en hipnosis médica que hoy en día son autoridad. Además del doctor Fabrice Lakdja, pienso en el profesor Gérard Ostermann4 y en los doctores Jean-Claude Espinozza, Sylvie Colombani, Yves Delbos, Patrick Assoune, Christine Nacher, Jean-Paul Vove, Frédérique Honoré y François Abalan. He estudiado mucho el trabajo de François Roustang5. Estos conocimientos son muy útiles para la regulación y la gestión del estrés, y para transmitir al paciente el aprendizaje de la autohipnosis mediante un enfoque indulgente.
LA PRÁCTICA SOBRE EL TERRENO
Estos últimos años he terminado un ciclo de formación sobre los fundamentos de la energética de la medicina tradicional china que, desde 2004, he transmitido a un psicoterapeuta, que a su vez es profesor y conferenciante.
En 2013, 2014 y 2015 impartí en París cursos de formación-transmisión de mi método Pyé-Ko Kan-3® a becarios de podología, posturología, enfermería, reflexoterapia, kinesioterapia, psicoterapia y otras especialidades, interesados en el enfoque energético de la salud humana. Todos expresaron su interés en descubrir el método y su entusiasmo por la práctica Pyé-Ko Kan-3®.
Las personas que han recibido este tratamiento en sus consultas han expresado su alivio y han reconocido la eficacia del método como acompañamiento en relación con la ayuda, la gestión y la regulación del estrés.
En 2013 y 2014, en el Centro Hospitalario Universitario Pellegrin de Burdeos, en el servicio de medicina interna y posturgencias, a petición del profesor Gérard Ostermann, participé de forma altruista en animaciones multidisciplinares en el marco del tratamiento a pacientes anoréxicos adultos. Bajo la dirección de la profesora Claire Séries de medicina interna y neurología en el grupo hospitalario Pellegrin de Burdeos, en el servicio cerrado «tratamiento de la anorexia mental adulta», apliqué el método Pyé-Ko Kan-3®, práctica energética en manopresión sobre los 106 puntos de acupuntura tendinomusculares. Todas las semanas me encontraba con personas con graves dificultades, por no decir en un precario estado de salud. Mi motivación por ayudarles ha sido constante. Los pacientes a los que realicé el seguimiento expresaban cada semana su alivio tras cada sesión: «He sentido paz dentro de mí o me siento relajado, en calma...», me decían.
El Institut de Formation des Soins Infirmiers (IFSI) del grupo hospitalario del Hospital Universitario Pellegrin de Burdeos, ciudad en la que resido, me pidió que, en el marco de la formación para el tratamiento de las personas con dolor, impartiera talleres sobre «El enfoque no farmacológico del dolor», algo con lo que deben familiarizarse los estudiantes a través de la reflexoterapia plantar. Estos talleres me permitieron ilustrar a los estudiantes sobre la historia de la reflexología plantar, sus diferentes precursores y sus investigaciones, sus propiedades y cómo se practica. Pude demostrar el interés del aprendizaje de la sensación táctil inducida mediante el contacto de la piel e integrada por cada uno según sus peculiaridades. Los estudiantes de enfermería formados por sus profesores del IFSI manifestaron estar interesados. Todos participaron con atención y de forma activa durante el curso mediante una colaboración dinámica y positiva.
Desde hace años asisto a coloquios y talleres de formación del Colegio Regional de Alcohólogos Aquitanos (CRAA) bajo la dirección del profesor Gérard Ostermann.
Médicos, psiquiatras, psicólogos y filósofos proponen el estudio del comportamiento de las conductas adictivas y de sus tratamientos terapéuticos. Esta formación en temas concretos, el hecho de compartir experiencias sobre el terreno y el descubrimiento de nuevas herramientas de trabajo son realmente valiosos y han contribuido a mi reflexión sobre las aplicaciones del método Pyé-Ko Kan-3® a otro tipo de patologías más allá del dolor de pies.
A título muy personal, también he tenido que acompañar durante largas semanas los últimos días de un ser muy querido para mí. En estas circunstancias tan difíciles, he podido constatar hasta qué punto los cuidados aplicados le han hecho bien hasta su último aliento.