Читать книгу El poder del amor y otras fuerzas que ayudan a vivir - Enrique Chaij - Страница 22
Dar
ОглавлениеTodo hombre que te busca va a pedirte algo.
El rico aburrido, la amenidad de tu conversación;
el pobre, el dinero;
el triste, un consuelo;
el débil, un estímulo;
el que lucha, una ayuda moral.
Todo hombre que te busca
de seguro va a pedirte algo.
Y tú ¡osas impacientarte!
Y tú ¡osas pensar: “ Qué fastidio”!
¡Infeliz!
¡La ley escondida que reparte misteriosamente las excelencias
se ha dignado otorgarte
el privilegio de los privilegios,
el bien de los bienes,
la prerrogativa de las prerrogativas:
¡Dar!
¡Tú puedes dar!
¡En cuantas horas tiene el día, tú das,
aunque sea una sonrisa,
aunque sea un apretón de manos,
aunque sea una palabra de aliento!
Deberías caer de rodillas ante el Padre y decirle:
“¡Gracias, porque puedo dar, Padre mío!
Nunca más pasará por mi semblante
la sombra de una impaciencia”.
“¡En verdad os digo que más vale dar que recibir!”
–Amado Nervo