Читать книгу Julito Cabello y las salchipapas mágicas - Esteban Cabezas - Страница 6
●5
LA MAÑANA HUM
ОглавлениеESA MAÑANA de “el” día fue muy rara (ojo que era día feriado, por eso no estaba en el colegiooooo —voz de terror—).
O sea, mi mamá andaba como en pausa. No se le notaba qué sentía. Solo limpiaba, iba a ver a la María, le cambiaba los pañales (puf), le daba comida a Beltrán (ñam) y a mí no me decía nada (…).
Era como robot-madre-jugadora de póker (o sea, no se notaba si estaba feliz o achacada).
Las horas pasaban lentas y mi papá no volvía. Entonces aproveché de comunicarme virtualmente con mi amigo Aarón, pero solo respondía “hum”. Obvio.
Julito: Parece que mi papá puede quedarse sin pega.
Aarón: Hum.
Julito: ¿Algo más que opinar?
Aarón: A lo mejor adelgaza.
Julito: ¡Ja, ja, ja! Idiota.
Aarón: Por eso prefiero decir puro hum.
Y ahí apareció Andrea.
Andrea: Hola, boys, ¿en qué están?
Aarón: Julito me retó.
Andrea: ¿Te dijo perno?
Julito: Para. Eso es historia antigua. Lo que pasa es que a mi papá no le publicaron su crítica y puede quedarse sin trabajo (laburo, para que entiendas).
Andrea: Sé lo que es trabajo, nerd.
Julito: ¡Ahora tú me ofendiste!
Andrea: Es que se dice trabajo en todo el mundo, meganerd.
Julito: Y yo que quería ser amable hablando en tu idioma argentino.
Andrea: Ya, míster amable, pero lo importante ahora no es hablar en otros idiomas. Lo vital es qué va a pasar con tu papá.
Aarón: Hum.
Julito: Eso mismo digo. Solo hum, por ahora.
Y mientras yo lanzaba este “hum” virtual, en nuestra casa resonó un “cof” muy real. Y la puerta se abrió.
Mi mamá y yo fuimos directo a la puerta.
—¿Qué pasó, Julio?
—¿Qué pasó, papá?
Y ahí entró Beltrán.
—¿Alguien quiere rock?
—No, hijo —respondió mi papá—. Cof. No estoy muy para rock.
¡Oh, no!
Es duro ver al papá de uno tan depre, ¿no?
—¿Qué pasó, Julio?
—Pasóf que cambiaron de director del diario, mujer. Y al nuevo director no le gustó mi crítica.
—¿Por qué?
—Era director de otro diario antes, donde publicó un tiempo a ese competidor mío, Beltrán Artichoke.
¡Oh, no!
—Se llamaf Iván Gord. Cof. Y lo que más le gusta es la comida rápida, porque encuentra que todo lo demás es siútico. Y como justo escribí esa crítica contra hamburguesas y completos gigantes, parece que no le caí muy bien.
¡Oh, no!
—Entonces me dio la oportunidad de pensarlo mejor. Y si el lunes le entrego una crítica a favor de la grasa, conservo el puestof. Si nof, estoy despedido.
O sea, como un Super Mario sin monedas…
Ven: no es fácil ser niño, y niño pobre puede ser aún peor. (Aunque ser papá también es duro, ¿no?).
¡Ay, qué duro todo!