Читать книгу Alta en el cielo - Fernanda Faricelli - Страница 9
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Presentación
Se los veía muy felices juntos. La expresión en sus caras, las sonrisas y hasta percibir cómo dialogaban.
Las clientas no podían creer el notable cambio de la joven comerciante. No había lugar para las dudas, estaban enamorados, Silena lucía fresca, vivaz como una adolescente.
Salían a cenar, a caminar, iban al cine y alguna que otra vez al teatro, cuando solían venir obras interesantes de Buenos Aires.
A cinco meses de relación, Alejo se sentía lo suficientemente seguro de su vínculo con Silene. Decidió que era el momento indicado para que ella y Cielo, su tesoro más preciado, por fin se conocieran.
Fue un domingo a la mañana en la casa de él.
Silene llegó puntual, con una docena de exquisitas facturas de la panadería más tradicional de la ciudad. No olvidó comprar sacramentos con dulce de membrillo, “la princesita muere por ellos”, acorde a los dichos de su padre. Ella sin entender aún el por qué sentía que haría lo que fuese por complacerla.
Vestía cómoda, fiel a su estilo; jogging, zapatillas y una remera suelta.
Aunque en su interior, no podía negar que un remolino de emociones la envolvía, era natural que amor e inquietud, alegría y nerviosismo se entremezclaran dentro de su corazón.
Tocó el timbre y ella abrió la puerta.
Fue en ese preciso instante en que se miraron a los ojos por primera vez, que algo especial sucedió.
…La vida de ambas estaba destinada a cambiar para siempre.