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APdeBA se pone en marcha (1977-1996)

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La escisión de APA constituyó para el nuevo grupo graves quebrantos: con la separación se perdió, entre otras muchas cosas valiosas, el elegante edificio de la calle Rodríguez Peña de Buenos Aires, el Instituto de Formación Psicoanalítica, una cuantiosa Biblioteca de la especialidad, la Revista de Psicoanálisis, el Centro Asistencial Racker, la Mutual de socios, etc. Había que empezar de cero…

Después de desempeñarse unos meses en un departamento alquilado, se compró con fondos propios una antigua casona de dos plantas con un enorme garaje deteriorado en la calle Maure del barrio de Belgrano. En ese lugar el grupo dirigente comenzó una labor infatigable y perseverante para poner en marcha a la nueva institución. Rápidamente se aprobaron los Estatutos y Reglamentos de funcionamiento, siendo la primera Comisión Directiva presidida por Horacio Etchegoyen.

Se diseñó un nuevo Instituto de Formación Psicoanalítica para los nuevos aspirantes. Se organizó también un Instituto Psicoanalítico Intermedio para cerca de 80 candidatos que en distintos niveles de su carrera analítica. estaban en APA y se pasaron a APdeBA, luego de que se les permitiera a todos elegir donde continuar su formación. A ellos se les diseño un currículo personal para terminar su formación sin problemas. Todo eso supuso una febril tarea de elegir las líneas teóricas y programáticas de la formación, así como crear Seminarios, nombrar profesores, disponer supervisiones didácticas, etc. Se ha señalado y con razón, que entre el prestigioso grupo dirigente de la nueva institución y los candidatos del llamado Instituto Intermedio había una brecha generacional que no dejó de tener consecuencias en el futuro. Un claustro de candidatos se puso tempranamente en marcha. Hay que reconocer que pese a la magnitud del movimiento realizado, el traslado de la APA a APdeBA nunca supuso un obstáculo o interrupción para los analistas que estaban cursando su formación.

Se comenzó con la organización de la nueva Biblioteca y el sector Publicaciones y en poco tiempo más apareció el primer número de la revista Psicoanálisis (1979) la cual a partir de entonces, se editó regularmente. También la institución creó una Mutual para sus miembros que se había perdido antes. Años más tarde, se fundó el Centro Asistencial D. Liberman para ofrecer tratamientos psicoanalíticos con honorarios institucionales (1988).

Mirado a la distancia, es asombroso reconocer que tanto y tan valioso se haya hecho en tan poco tiempo. En los dos o tres años siguientes se trabajó tan fervorosamente, con tanto empeño en reconstruir lo perdido, que podía llegar a pensarse que, aquellos que decidieron irse de APA lo hicieron con el decisivo propósito de fundar una nueva institución, cualquiera sea el sentido que esta expresión pudiera tener. Y este esforzado comienzo se realizó cuando todavía se vivían los últimos años de plomo de la dictadura militar.

Por supuesto, la creación de una institución no puede en sus comienzos prescindir de idealizar sus propósitos: brindar el mejor psicoanálisis, el cuidado de la ética y una formación de excelencia. En este último caso, APdeBA retomó la historia de ser una institución psicoanalítica de calidad, que ofrecía una formación calificada de ortodoxa, tradicional y de un alto nivel de exigencia. Para alguno de sus críticos, se trataba de una formación analítica muy estricta, muy regulada, muy cerrada y muy cuestionada por el predominio de la teoría kleiniana. Incluso dentro de la institución no tardaron en aparecer fuertes cuestionamientos, expresados en movimientos de los niveles de analistas más jóvenes y en la aparición de grupos políticos, disidencias y reclamos públicos en demanda de cambios. Se escuchaban reclamos a favor de un mayor pluralismo teórico y la apertura de la institución a prácticas que imponían los nuevos tiempos. Ahora, el clima interno de APdeBA espejaba los cambios institucionales y políticos surgidos en el país en coincidencia con el advenimiento de la “primavera democrática” que se inició en el año 1983.

La Comisión Directiva de Leo Wender (1984-1985) logró introducir algunas de las modificaciones reclamadas: abrir la institución hacia otros campos, prácticas y recursos de la salud, previamente no legitimadas y fomentar un pluralismo que abriera las compuertas de la teoría psicoanalítica a otros espacios teóricos. El creciente movimiento del campo de la Salud Mental (ver Cap. IV) propiciaba estos cambios.

Habían pasado varios años y APdeBA seguía progresando, pero no disponía de una sede capaz de albergar el creciente movimiento de alumnos y actividades de educación y de extensión a la comunidad. Fue en la Presidencia de la Dra. Reggy Serebriany (1986-1987) que se decidió edificar una nueva sede en Maure. Se realizó una prolija selección entre 35 proyectos, se eligieron cinco de ellos como los mejores y finalmente se optó por el que más calificaba para los fines institucionales.1 A pesar de ser años de reconocidas penurias económicas, en un año se demolió la antigua casona y simultáneamente se levantó, con fondos de los propios asociados, una sede de cuatro pisos, sin perturbar las actividades docentes, administrativas e institucionales. Un año después, en la Presidencia del Dr. Alfredo Painceira se completó el sueño de disponer de una sede propia, con la habilitación de un Auditorio en el subsuelo para 350 personas. Hasta donde sabemos, es el único edificio en el mundo diseñado y edificado ad hoc para alojar una institución psicoanalítica de la IPA.

APdeBA ¿cómo y cuánto había logrado crecer y organizarse institucionalmente desde su fundación en 1977 y cuál era su situación veinte años después, en 1996? A continuación se trascriben, por su valor histórico y documental, partes seleccionadas del primer documento presentado a las autoridades del Ministerio de Educación de la Nación para solicitar la acreditación académica, describiendo el estado y funcionamiento de la institución. Fue enviado durante la Comisión Directiva de la Dra. Sara Zac de Filc y APdeBA se presentaba de esta manera:

Asociación Psicoanalítica de Buenos Aires: antecedentes y fundamentación de la solicitud (Documento presentado ante el Ministerio de Educación, Ciencia y Técnica (1996)

La Asociación Psicoanalítica de Buenos Aires —creada en 1977— es una de las instituciones psicoanalíticas reconocidas como sociedad componente de la Asociación Psicoanalítica Internacional, por cumplimentar las normas científicas y formativas que establece la misma, para avalar la formación psicoanalítica que se imparte. Su objetivo es desarrollar el conocimiento y la práctica de Psicoanálisis y la formación de profesionales en el más elevado nivel científico, técnico y ético.

APdeBA es una institución fundamentalmente científica y docente, realizando asimismo tareas asistenciales (a través de su Centro Psicoanalítico Dr. David Liberman y de la capacitación en servicio del personal profesional de otras instituciones asistenciales públicas y privadas), así como actividades de prevención, de extensión, de integración interdisciplinaria e investigación.

Muchos de sus miembros han ocupado y ocupan cargos importantes en la Asociación Psicoanalítica Internacional. El Dr. R. Horacio Etchegoyen, uno de los fundadores de APdeBA, fue el primer Presidente que llegó a la presidencia de la API desde Latinoamérica (1994-1997)2 Actualmente APdeBA cuenta con 349 miembros: 162 Titulares y 187 Adherentes, y como Miembros Honorarios al Profesor Gregorio Klimovsky y Dr. Mauricio Goldenberg.

Desde 1978 viene funcionado regularmente su Instituto de Formación Psicoanalítica, del que han egresado en los últimos diez años 193 profesionales, la casi totalidad de los cuales, luego de ameritar los requisitos societarios para su ingreso, se han incorporado como miembros de APdeBA y de la IPA.

Además de la formación curricular, cuyas características se encuentran detalladas en la carrera de Especialización en Psicoanálisis, APdeBA realiza una intensa actividad científica y docente, tanto interna como externa y participa y organiza numerosos Congresos, Encuentros y otros eventos científicos, tanto dentro de su propio campo como interdisciplinariamente.

Su equipo docente integrado por 95 profesores, cuenta con una vasta experiencia tanto dentro de la enseñanza del Psicoanálisis como en otras disciplinas afines; varios de nuestros docentes también lo son en las Facultades de Medicina y Psicología de la Universidad de Buenos Aires o de otras universidades privadas, así como de instituciones de formación de post-grado en el campo de la salud mental.

Prácticamente desde su inicio, se ha editado la revista Psicoanálisis, que publica tanto artículos de miembros de la Institución como de reconocidos psicoanalistas extranjeros sobre temas de la teoría y de la clínica psicoanalítica.

A partir de 1978 la actividad de la Asociación Psicoanalítica de Buenos Aires se ha desarrollado a lo largo de estos 19 años a través de:

El IUSAM de APdeBA

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