Читать книгу Prácticas pedagógicas con tecnologías de la información y la comunicación en educación superior - Jairo Alberto Galindo Cuesta - Страница 10
¡Una experiencia continua!
ОглавлениеLos cambios en los modelos de enseñanza, las posibilidades y desafíos que plantea su reflexión y praxis, el conocimiento que las personas requieren para vivir y trabajar en la sociedad actual, se evidencian cada vez más de manera interdisciplinaria y centrada en los problemas y procesos concretos. Por estas razones es importante ofrecer a los estudiantes oportunidades idóneas para el desarrollo de los conocimientos y capacidades necesarias para vivir y trabajar en una sociedad fundamentada en la tecnología y sometida a rápidos cambios. Ya no se trata de formar estudiantes para que adquieran contenidos específicos que los preparen para su vida laboral, sino de lograr que aprendan a aprender durante toda su vida para disfrutar de una existencia productiva (Smith, 1990). Para lograr este cambio, es fundamental la creación sistemática de nuevos modelos de entornos educativos que fomenten el desarrollo de estudiantes activos y comprometidos con su aprendizaje (Bonwell y Eison, 1991; Gardiner, 1994).
Los profesores lasallistas, por medio de diversos escenarios, comparten historias sobre la nueva frontera tecnológica en la educación, y no es extraño encontrar narraciones de sus experiencias, en las que se observa cómo cuestionan ellos mismos sus métodos de enseñanza y el diseño de cursos tradicionales, sumado a la incorporación de tecnologías como apoyo a sus clases presenciales, mediadas por Moodle©. Prueba de ello son los siguientes apartes de un foro trabajado en el curso de Moodle© Básico del semestre II-2013:
Considero que la enseñanza virtual precisamente es fruto de los avances tecnológicos, los cuales han producido grandes transformaciones sociales, de los cuales, uno de ellos es el relacionado con la educación. En este sentido, la sociedad de la información demanda un sujeto que desarrolle las capacidades y habilidades para entrar en un proceso de formación que propenda hacia él, es decir, el mismo sistema requiere de sujetos que tengan la capacidad de entrar en la dinámica para producir y reproducir aquellas características necesarias para su hegemonía. En este sentido, el constructivismo, entendido como aquella corriente pedagógica que en el proceso de enseñanza-aprendizaje adquiere un mayor sentido al encauzar todos estos roles en el interior del aula, permitiendo a los educandos conocer y reconocer sus procesos de pensamiento, contribuye al desarrollo de la conciencia del educando.
Considero que es un reto para nosotros los docentes el incluir la red como apoyo en el desarrollo de las asignaturas que orientamos puesto que permite un acompañamiento en el trabajo independiente que deben realizar los estudiantes y, de esta manera, tengan un mejor aprendizaje y, por ende, éxitos en su formación profesional. Agradezco la posibilidad de aprender a utilizar este recurso para el desarrollo de los futuros cursos.
En la enseñanza virtual el estudiante tiene que procesar la información que se le entrega a través de este medio. En dicho procesamiento de la información el estudiante como sujeto de aprendizaje interactúa con el objeto de estudio (en este caso la información) y partir de esta interacción elabora su propio significado. Este significado construido es el conocimiento elaborado por el estudiante. En este sentido el conocimiento es una elaboración que surge de la interacción del sujeto con el objeto del conocimiento. El conocimiento por lo tanto es una interpretación. Todos los sujetos que procesan una misma información no elaboran el mismo significado por tener estructuras de pensamiento diferente, por consiguiente se hace necesario negociar los significados construidos para llegar a consensos. La objetividad en este sentido se llega a través de acuerdos intersubjetivos. Efectivamente en la enseñanza virtual las personas procesan la información de acuerdo con sus conocimientos previos, sus estructuras de pensamiento, sus experiencias y construyen sus propios significados.
Es necesaria la opinión, los intereses, la voz de los estudiantes. Hay que tener esto en cuenta al diseñar un curso virtual. En el aula virtual los contenidos pueden ser modificados según los intereses de cada grupo. La motivación es esencial. Hay que conocer las características cognitivas de los estudiantes, su motivación, conocimientos y contexto social y vincularlo con el diseño del curso virtual. Asimismo, definitivamente, el curso virtual debe estar ligado a la formación profesional teniendo en cuenta el plan de estudios de cada carrera, porque probablemente allí esté una de las motivaciones de los estudiantes. Finalmente, hay que seguir adelante, tener mucho ánimo, utilizando las herramientas que tengamos a nuestro alcance en beneficio de los estudiantes. El aula virtual es un espacio para ello.
¿Qué tan importante serán la colaboración, las perspectivas diversas y los contextos auténticos para diseñar nuestros cursos en Moodle©? ¿Enfocaremos nuestros cursos para que los profesores seamos quienes transmitamos el conocimiento?
Como bien lo afirma nuestra tutora Andrea, el aprendizaje virtual cuenta con la teoría de la información y el constructivismo. La primera es esencial, dada la estructuración que la tecnología imprime a la información actual. Con respecto al constructivismo, que es la referencia del aprendizaje, se mantienen muchos aspectos que funcionan tanto en un aprendizaje presencial como virtual. El aprendizaje significativo, la reflexión, la cooperación y la utilidad inmediata de los conocimientos, entre otros, son imprescindibles en los dos casos. Sin embargo, se debe cuestionar la capacidad creadora y la motivación individual. Las teorías las conocemos, pero ¿es en realidad este conocimiento el que nos permite como docentes despertar la sed de conocimiento en nuestros estudiantes? Vivimos desarrollando estrategias, buscando una forma óptima de aprendizaje pero nos encontramos con una apatía imperante en nuestros estudiantes. Es paradoxal pues estos medios tecnológicos que nos permiten avanzar en tantos aspectos del aprendizaje, a veces nos impiden a la vez comunicar [sic] debidamente con nuestros chicos (teléfonos, tabletas etc.). La solución está en manejar estas herramientas de la forma más adecuada posible, adaptándola a cada uno de nuestros estudiantes y sembrando en ellos una curiosidad imparable en este camino del saber. Me queda solo expresar mis grandes expectativas por sobrepasar esa barrera descubriendo este nuevo espacio, ¡virtual!
Necesitamos una mejor comprensión del impacto pedagógico que tienen los cursos ofrecidos a través de la red. Los docentes requieren orientación sobre el uso de la red como medio de enseñanza y aprendizaje.
Considero que la tecnología es un gran apoyo para la enseñanza en la educación superior, ya que estamos es una época donde el ciberespacio es el pan de todos los días y con la cual nuestros estudiantes están bastante familiarizados; por lo tanto, sería un buen mecanismo para que los estudiantes aprovechen esta tecnología en aprendizaje. Por lo tanto, considero que tenemos una tarea bastante rigurosa en la planeación de los cursos virtuales, de tal manera que sean un apoyo para nosotros y un complemento para los estudiantes en los cursos presenciales que realizamos. Luego es conveniente para la elaboración de estos cursos realizarse y contestarse cada una de las preguntas que sugiere el texto, por ejemplo: ¿cuál es el objetivo?, ¿a quiénes está dirigido?, ¿cómo se van a presentar los contenidos? ¿Qué se espera de cada una de las evaluaciones?, etc.
La red como apoyo [...] es la forma moderna de extender el espacio y el tiempo del aula de clase tradicional más allá de los muros y de los horarios formales, dándole un carácter asíncrono a las actividades y flexibilizando, de este modo, el cumplimiento de tareas y ejercicios orientadores del proceso de aprendizaje. El procesamiento de información es, en mi forma de ver, un modelo arquitectónico de funcionamiento de máquinas de autocontrol que no riñe con el funcionamiento del cerebro humano, que es, en cierto modo, también una máquina de autocontrol que aprende y aplica conocimientos más allá de unas programaciones estandarizadas. El trabajo de aprender para un ser humano es mucho más eficiente y duradero, si el interesado participa de manera activa en las tareas y experimentos que buscan este objetivo y creo que esto hace parte del constructivismo que debe aplicarse en todas las pedagogías y sistemas de aprendizaje así se trate de la propia red.
Ahora, el éxito de la enseñanza virtual no solo depende del docente, sino también de los diseñadores, medios y herramientas disponibles. Se puede disponer de todo: un excelente docente, creativo, que diseñe un curso bastante animado y atractivo, utilizando todos los medios tecnológicos, pero si el alumno no es partícipe del proceso, y se convierte en un simple receptor de información, al final seguro que habrá cumplido con las evaluaciones, pero de manera obligatoria y no con el agrado que debe recibir y procesar el aprendizaje virtual. Personalmente considero la teoría del procesamiento de información como la base de la enseñanza virtual, que no difiere mucho de una clase tradicional de salón y tablero; actualmente, así como una clase presencial interactiva con los alumnos favorece su aprendizaje, el constructivismo se presenta como el método actual, incluyente del estudiante que favorece el logro de los objetivos propuestos en un curso virtual.
No se pueden interpretar de otra manera los comentarios de los docentes; no solo se trata de acercarlos al uso de tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en la educación, sino también de propiciar transformaciones en el aula y en los componentes educativos, en forma constructiva, amena y presencial-virtual; con capacidad creadora, logrando objetivos, aprendiendo significativamente e innovando en los procesos educativos, para alcanzar nuevas construcciones pedagógicas y didácticas que potencien la educación y el conocimiento.