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Diego y Néstor

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Héctor Icazuriaga, el Chango para los amigos, es un político y abogado peronista, que fue gobernador de la provincia de Santa Cruz entre mayo y diciembre de 2003 para luego ser titular de la Secretaría de Inteligencia (ex SIDE) actualmente Agencia Federal de Inteligencia (AFI) durante once años en los mandatos presidenciales de Néstor Kirchner y Cristina Fernández.

Hoy retirado de la política cuenta algunos momentos vividos con Diego y los ex presidentes, y el respeto y afecto que se tenían:

Soy oriundo de la localidad de Chivilcoy, provincia de Buenos Aires, y a Diego Maradona lo fui a ver durante un partido que jugó Argentinos Juniors contra la selección de Chivilcoy. El equipo de Diego ganó por 3 a 1. El resultado no importaba porque uno quería ir a ver jugar a ese extraordinario jugador que era Maradona.

También estuve en la cancha de Vélez Sarsfield en el famoso partido entre Boca y Argentinos, cuando el Loco Gatti le había dicho “gordito” a Diego y en ese encuentro le convirtió cuatro goles, uno mejor que el otro para la victoria de su equipo por 5 a 3.

Luego, como hincha de Boca, lo pude disfrutar desde la popular de la Bombonera cuando defendió la camiseta xeneize y pudo festejar el campeonato metropolitano de 1981 con Miguel Brindisi, el Pichi Escudero, entre otros.

Con respecto a mi vida política, he sido testigo privilegiado de algunos encuentros entre el Diez y los ex presidentes Néstor Kirchner y Cristina Fernández. Diego era muy querido por Néstor, hombre de fútbol, fanático de Racing de Avellaneda que se deslumbro por la técnica y destreza futbolística de Maradona. Y Cristina, aunque no era muy futbolera, lo quería también por su coraje y enfrentamiento contra los poderosos del sistema y la emocionaba el ferviente amor que sentía Diego por sus padres y su familia.

El 27 de octubre de 2010, la mayoría del pueblo argentino se estremeció de dolor por la triste noticia del fallecimiento del ex presidente de la Nación, Néstor Kirchner a los 60 años.

Las lágrimas de millones despidieron a un hombre que había hecho de la política una herramienta de transformación social, política, cultural y económica en beneficio de los argentinos, con grandes avances en la construcción de una sociedad más justa, igualitaria e inclusiva.

El velatorio se extendió por 48 horas en el Salón de los Patriotas Latinoamericanos del Bicentenario de la Casa de Gobierno y acompañaron a la presidenta Cristina Fernández y sus hijos Máximo y Florencia, funcionarios y amigos del ex presidente fallecido, los principales mandatarios de la región, como el venezolano Hugo Chávez, el brasileño Ignacio Lula Da Silva, el boliviano Evo Morales, el paraguayo Fernando Lugo, el uruguayo José Pepe Mujica, el ecuatoriano Rafael Correa, el chileno Sebastián Piñera, el colombiano Juan Manuel Santos, figuras del deporte y el espectáculo, miembros de la Corte Suprema, gobernadores, dirigentes de la oposición y miles de ciudadanos.

Maradona también despidió a Néstor Kirchner y acompañó a Cristina y su familia. Así lo recuerda el Chango Icazuriaga:

Recuerdo algunos encuentros de Diego y Néstor en el despacho presidencial, pero uno de los momentos que me quedaron grabados para siempre en mi memoria fue luego de la desaparición física de Néstor el 27 de octubre del 2010. El 28 comenzaron a velarse sus restos en el Patio de los Patriotas Latinoamericanos en la Casa Rosada, donde estuvieron muchos presidentes, funcionarios, figuras del espectáculo y del deporte. Cuando llegó Maradona muy conmovido, estuvo media hora junto a Cristina en esas horas tan tristes y difíciles. Cuando Diego se retiró, algunos funcionarios —entre los que me contaba— lo acompañamos hasta la salida y allí fue abordado por todos los periodistas de distintas partes del mundo. Me quedé a su lado porque quería oír su testimonio y lo primero que le preguntaron fue qué había representado Néstor Kirchner para él; Diego con esa sabiduría de mundo que tenía, dijo que fue un Gladiador haciendo una comparación con el Che Guevara.

Cuando a mí me preguntaban sobre Néstor, con quien compartí amistad y gestión política por más de treinta años, yo lo definía como un “militante”. Pero a partir de lo que escuché decir a Maradona, considero que es una de las mejores definiciones sobre Néstor.

Textualmente Diego expresó a la prensa luego de retirarse del velorio del ex presidente Néstor Kirchner:

Creo que fue un mazazo para todos. Yo lo fui a ver hace poco tiempo y lo vi bien, estaba sereno, tranquilo y hablamos de fútbol. Cuando caí que Néstor había fallecido me pareció algo increíble, justo en el momento que los argentinos estábamos saliendo y teníamos un luchador y batallador como Néstor que se pelea con los Estados Unidos y quien sea, perderlo para nosotros es terrible. Argentina perdió un Gladiador. Un hombre que se la jugó siempre, que nos sacó del pozo y que era respetable en todo. Yo no tuve una gran amistad con él, pero lo poco que tuve contacto me pareció que se la jugaba por sus ideales. Y el que se jugó por sus ideales fue el Che Guevara que es mi ídolo y la verdad que Néstor tenía muchas cosas del Che. Yo le digo a la presidenta que siga para adelante que estamos todos con ella. Ayer escuchaba hablar a los que están en contra y quiero que Cristina los pelee como los peleaba Néstor y de esa manera vamos a salir adelante porque en la Argentina tenemos que matar a la hipocresía. Y le decíamos a Cristina que aguante que estamos para lo que necesite para lograr una Argentina mejor.

Miguel Núñez es un periodista con trayectoria en distintos medios como La Voz, De Frente, La Razón, Perfil, revista Humor, El Porteño, entre otros. También de joven su otra pasión fue la política ligada al peronismo. Durante la Reforma Constitucional de 1994 conoció al matrimonio de Néstor Kirchner y Cristina Fernández forjando un vínculo profesional y de amistad. Con Néstor compartía la pasión por el mismo club de sus amores: Racing de Avellaneda.

También fue compañero de secundaria del actual presidente Alberto Fernández en el Mariano Moreno, junto a él y otros dirigentes fundaron el Grupo Calafate quienes organizaron la campaña presidencial de Kirchner siendo luego vocero durante la presidencia de Néstor y parte de la de Cristina Fernández.

Núñez compartió los encuentros entre Maradona y el ex mandatario Kirchner. Pero su historia con el astro se remonta muchos años atrás, hasta llegar a la infancia. El ex vocero presidencial es de 1959 y Maradona de 1960 y compartieron fútbol en las infantiles de Argentinos Juniors en algunos partidos de los famosos Cebollitas, cuyo entrenador era Francisco Cornejo, quien había quedado deslumbrado con aquel equipo de pequeñas promesas como Pelusa Maradona, Daniel Pólvora Delgado, Claudio El Mono Rodríguez y Goyo Carrizo, entre otros, logrando un invicto de más de 100 partidos, disputando torneos no solo en la Argentina sino también en Uruguay. Cuando disputaron los Juegos Nacionales Evita de 1973 y 1974 (este lo ganaron), Cornejo los bautizó Cebollitas. En el 74, el equipo también ganó el campeonato de la Novena División de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA).

Núñez no fue parte de aquel famoso equipo, pero sí compartieron algunos entrenamientos en los que se enfrentaron o formaron en el mismo equipo con Pelusa en el complejo Malvinas Argentinas, frente a la mirada atenta de Francis Cornejo, el descubridor de Maradona. Luego se juntaban a jugar al metegol o al básquet en la cantina de Malvinas. Adulto los dos, el destino los volvió a reencontrar en un despacho presidencial:

Estando en mi función como vocero presidencial de Néstor Kirchner, recuerdo cuando Diego vino a su primer encuentro con el presidente en la Casa de Gobierno en agosto de 2004. Ese día fue muy emotivo porque hablaron de todo un poco, de fútbol y de política. También Néstor le dijo que se cuidara, que todo el pueblo argentino lo amaba (después supe por allegados que los deseos de Néstor le habían hecho muy bien a Diego espiritualmente). No fue una charla muy larga, pero lo suficiente para que iniciara un fuerte vínculo afectivo donde los unía el amor por el fútbol y la política. Después tuvieron otros encuentros y siempre con el mismo afecto y respeto.

También recuerdo cuando en abril de ese año Diego fue internado en la Clínica y Maternidad Suizo Argentina, del Barrio Norte porteño por problema en el corazón, Néstor me pidió que hablara con la familia para saber del estado de su salud. Cuando hablé con Claudia Villafañe le expresé que el presidente se ponía a su entera disposición para lo que necesitara. Néstor lo quería mucho a Diego.

En marzo de 2004, Maradona había regresado de Cuba para pasar un tiempo determinado en Argentina. El domingo 18 de abril fue hasta la Bombonera para ver al equipo de sus amores dirigido por Carlos Bianchi que enfrentaba a Chicago. Desde su palco VIP, como un hincha más, alentó a Boca en cada jugada. Lamentablemente, no pudo disfrutar la victoria de los xeneizes, porque en el entretiempo Diego no se sintió bien, la fiebre y su exceso de peso no le jugaron una buena pasada y se retiró con otros acompañantes hasta la quinta donde estaba alojado en la localidad de General Rodríguez, propiedad del empresario Carlos Mastellone. Estando en la casa, su salud empeoró y hasta allí se trasladó su médico Alfredo Cahe quien ordenó la inmediata internación en la clínica Suizo Argentina, en Capital Federal, donde Diego fue atendido por una neumonía aspirativa con respirador artificial. La noticia fue una conmoción a nivel mundial y todos los medios de comunicación se hicieron presentes y miles de personas levantaron en la clínica una especie de “Santuario” donde pegaron carteles y fotos pidiendo y velando por la salud del ídolo. Ante esta situación y por seguridad y la imposibilidad de contener a los fieles maradonianos tuvieron que vallar la clínica.

En los días que Maradona permaneció allí, su salud estuvo en estado crítico y al borde de la muerte, pero una vez más su corazón resurgió y le brindó al astro una nueva oportunidad de vida, siguiendo su tratamiento en la clínica del Parque, en Ituzaingó.

La historia que narra Miguel Núñez de aquel primer encuentro entre Maradona y el presidente Néstor Kirchner del 12 de agosto de 2004 en la Casa de Gobierno fue gestionada por el médico personal del Diez, Alfredo Cahe que tomó la inquietud del ex futbolista de poder reunirse con el primer mandatario y demostrarle que sus condiciones mentales y físicas estaban óptimas para poder viajar al exterior y poder seguir tratando su enfermedad. Diego sostenía: “No estoy ni loco ni tarado”. Necesitaba cambiar de aire y tratamiento dejando la Clínica del Parque, en Ituzaingó, donde estaba internado, pero existía un recurso judicial que parte de la familia de Maradona había presentado en el Tribunal de Familia Nº 2 de Morón, que le impedía viajar al exterior.

La operación de aquel encuentro comenzó con un llamado del doctor Cahe con Diego González, secretario privado del ministro del Interior, Aníbal Fernández y el visto bueno del propio presidente Kirchner. A partir de entonces, todo el armado quedó a cargo de Aníbal Fernández.

Ese 12 de agosto, Daniel González buscó a Maradona en la Clínica y partieron junto a otro vehículo donde iban los médicos que atendían al Diez llegando a la Casa Rosada después de las 11 de la mañana. Algunos periodistas y otros asistentes del lugar solamente pudieron ver a Diego por unos segundos.

El astro había llegado con su hija Giannina y su médico personal Cahe; primero pasó por el despacho del ministro del Interior, Aníbal Fernández; siguió al del jefe de Gabinete, Alberto Fernández y, por último, llegó al despacho presidencial de Néstor Kirchner.

Según recuerda el doctor Cahe:

El encuentro entre Maradona con el presidente Kirchner duró alrededor de veinte minutos y hablaron de temas generales, política y fútbol; ambos se elogiaron mutuamente. Diego le expresó a Kirchner sus razones para conocerlo, porque Fidel Castro le había hablado muy bien de él y lo veía como un presidente fuerte y decidido para sacar al país adelante. El presidente le dijo que se cuidara y que tenía que recuperarse porque era muy joven.

Luego del encuentro, Diego se sacó fotos con algunos funcionarios y Víctor Bugge, célebre fotoperiodista y actual jefe de Fotografía de Casa de Gobierno, lo retrató junto al busto de Perón:

Después del encuentro con el presidente Néstor Kirchner, lo tomé del brazo a Diego y lo llevé hasta un lugar donde le dije que iba a ver alguien que no le iba a pedir nada, era la sala donde estaba el busto de Juan Domingo Perón. En ese momento Diego se emocionó mucho al verlo y me agradeció que le retratara junto a Perón.

Según Aníbal Fernández y Víctor Bugge, dos protagonistas que por pedido de Néstor siguieron el tema de Maradona, aquel encuentro posibilitó que Norberto García Vedia, titular del Tribunal de Familia Nº 2 de Morón, firmara la autorización que habilitaba la salida de Maradona al exterior. En septiembre de ese año, Diego pudo viajar a Cuba junto a su médico personal Alfredo Cahe y otros colaboradores para poder seguir su tratamiento de recuperación en el Centro Nacional de Salud Mental (Censam) situado en el barrio de Jaimanitas, en las afueras de La Habana.

Diego y Cristina

El Chango Icazuriaga rememora una de las acciones políticas de gran relevancia que tuvo el gobierno de Cristina, recibida con emoción por parte de Maradona:

Con respecto a uno de los grandes momentos mientras era funcionario del gobierno de Cristina, recuerdo cuando en el predio de Ezeiza se firmó el convenio entre la AFA y el gobierno nacional para poder realizar Fútbol para Todos; en el acto estuvieron acompañando a la presidenta Maradona, Julio Grondona, funcionarios y otros invitados. Allí Diego, que era técnico de la Selección Argentina estaba exultante, feliz y tuve la oportunidad de poder conversar con él sobre aspectos de fútbol y de la vida.

Lo que cuenta Icazuriaga ocurrió en agosto de 2009, cuando la entonces presidenta Cristina Fernández concretaba un cambio trascendental en las reglas de juego del fútbol dominado por el oligopolio Clarín, dueño absoluto de los derechos y comercialización de la transmisión de los partidos del fútbol argentino, creando Fútbol para Todos en beneficio de toda la población para que pudieran verse los partidos gratis.

Cuando se oficializó la asociación entre el Estado (Sistema Nacional de Medios Públicos) y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) para transmitir los partidos por Canal 7 —y luego se sumaron otros canales— la presidenta encabezó un acto con más de 800 invitados en el predio de la AFA, en Ezeiza, transmitido por cadena nacional. Se pudo ver en vivo por los canales América 2, TV 26, Crónica TV, América 24, C5N, TN, Canal 7, Canal 9, Canal 11, Canal 13, y hasta en la CNN.

Ante el predio colmado, Cristina, acompañada por el ídolo planetario Maradona, al frente del seleccionado mayor y el mandamás del fútbol argentino, Julio Grondona, aseguró:

Que solamente el que pueda pagar pueda mirar fútbol y que le secuestren los goles hasta el domingo, aunque pagues igual, como la palabra y las imágenes, no está bien. No quiero una sociedad de secuestros de ninguna naturaleza sino una sociedad libre. (…) Lo importante es que las corporaciones no se vuelvan monopólicas, porque cuando ello ocurre se vive en una sociedad menos democrática, más extorsiva y más sometida a presiones.

dijo sin nombrar al Grupo Clarín.

Lamentablemente Fútbol para Todos fue destruido durante la presidencia neoliberal de Mauricio Macri y su alianza de Cambiemos con radicales y gerentes de las grandes empresas (2015-2019), de modo que volvió el fútbol pago, teniendo que abonar como en los viejos malos tiempos para poder ver un partido del deporte más popular de los argentinos.

Sigue el Chango Icazuriaga:

Diego es un ídolo popular y lo reivindicamos por su condición de humilde y nunca haber traicionado a los de su clase y por confrontar siempre con los poderosos del fútbol y la política. Debo decir que desde que llegamos al gobierno en 2003 hasta 2015, Maradona fue muy generoso con nosotros, acompañó y defendió a los gobiernos de Néstor y Cristina.

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