Читать книгу Vivencias cortas vividas de la vida - Miria Véliz Hernández - Страница 14
El mensaje
ОглавлениеYa anochecía, el último respiro del día comenzaba a hacerse notar a través de la rendija de mi ventana, cuando se siente el tocar de la puerta, pensando que sería una vecina, voy presurosa, cual sería mi sorpresa, estaba ante mí el guerrillero Manuel Rodríguez, el cual estaba en búsqueda del último sobreviviente de la batalla de Topáter, este estaba alojado en mi humilde hogar, puesto que estaba herido.
Entró, se dirigió al dormitorio donde yacía este.
Manuel le traía un mensaje, que consistía que en las afueras de Calama había una mina de litio, cobre y salitre, que haría poderosa a Calama. Pasó la noche junto a nosotros, cuando los rayos del sol, comenzaban a herir nuestras pupilas, se levantó, se despidió, montó en su corcel y se marchó.
El soldado con orgullo obedeció.
Hoy, Calama es una gran provincia. Tal como lo dijo Manuel aquella noche.