Читать книгу Reprogramación mental para descubrir el secreto del éxito - Alberto Shester - Страница 6

A todos mis ancestros y especialmente a Pesci, con su ser y modelo único por incorporarme en la medicina y el altruismo.

A Manuel por alentarme en todo.

A mis padres,

Ana y Lázaro,

por todo lo que me dieron, por el estímulo permanente y sin límites, por su optimismo e incorporación del sentido y propósito de vida. He llegado a hacer realidad mis sueños y deseos más profundos, trasladando al ser humano presente y futuro, una visión humanista de la medicina y una nueva perspectiva de curación.

A mis hijos Melina y Ezequiel.

A mis nietitas Lucía y Camila, por lo que me dan, ser mi continuidad y el futuro.

Por el amor y apoyo incondicional y sin límites.

A un ser muy especial, la doctora Ángela Obsdrzalek, por haberme grabado profundamente que la palabra, por su sentido y significado, pueden cambiar toda una vida, en coincidencia con el genial fisiólogo Iván Petrovich Pavlov, quien descubrió que la palabra y su significado pasa a ser un reflejo condicionado que es determinante en la evolución de todo ser humano.

Al profesor Florencio Escardó, maestro humanista de la medicina argentina, por haberme incorporado con su presencia, actitud, sus sentimientos y emociones, que el recorrido del camino y el logro de los sueños y deseos que dan sentido y propósito de vida, son determinantes en el bienestar, la salud y la felicidad permanente del ser humano.

Al doctor Alfredo Avelín, prócer político, filósofo de profunda espiritualidad, médico, humanista, humilde, altruista, de vocación auténtica, quien transmitió con su ejemplo, su pasión, su entusiasmo y su amor, un legado a través del doctor Alfredo Avelín hijo, el modelo ideal del ser humano para el presente y futuro de la Nación Argentina.