Читать книгу Liderazgo intuitivo - Alexia de la Morena - Страница 11

Оглавление

Capítulo 1

¿De qué hablamos cuando hablamos de intuición?

Son muchas las cosas que pasan por tu mente. Por darte una cifra, más de 60.000 pensamientos al día. ¡Qué barbaridad! ¿Verdad? A qué ni te lo imaginabas… Ahora bien, entre estos pensamientos se nos cuelan algunas intuiciones a las que, en ocasiones, damos vía libre, y en otras no… por nuestro miedo a equivocarnos.

Por ello te desafiamos a que descubras las claves de su desarrollo a través del contenido de este libro. Te aportará numerosas herramientas y técnicas prácticas con las que puedas mejorar tu capacidad de inteligencia intuitiva de una manera rápida y eficaz, y tu potencial para tomar decisiones tanto en tu vida profesional como personal. Con ella encontrarás la mejor versión de ti mismo. Porque no solo conseguirás tener una mayor precisión y eficiencia, es decir, emplear un menor número de recursos y costos (como pueden ser los mentales); además aprenderás a auto superarte y auto motivarte, y así aumentarás la credibilidad y la confianza en ti mismo. Además descubrirás algunas técnicas sencillas para reducir el estrés en el poco tiempo que tienes con todas las responsabilidades que llevas a tus espaldas.

¿Sabías que todos usamos la intuición más de lo que imaginamos?

Sí, correcto, has leído bien, todas las personas tenemos intuición y la usamos en más ocasiones de las que imaginamos… Piénsalo bien, porque curiosamente las utilizamos a diario sin ser conscientes de ello.

Se trata de una habilidad mental práctica para la cual no tiene importancia el cargo que ocupes en la empresa: siempre tendrás unos objetivos que cumplir y puedes beneficiarte de ella si sabes cómo utilizarla.

Las personas que intuyen mejor tienen más probabilidades de lograr sus objetivos que aquellas que no lo hacen. ¿Qué esperas para aprender a utilizarla?

Nuestra capacidad mental, ahora más que nunca, es objeto de interés de variados campos científicos, psicológicos y filosóficos, al aportar a través de numerosas investigaciones información vital a la Neurociencia Intuitiva, sobre nuestra necesidad de saber más sobre nosotros mismos, porque al fin y al cabo es ahí donde se encuentra nuestro mayor potencial. Esos hallazgos permiten en la actualidad identificar como especie humana en qué parte de nuestro cerebro se encuentra nuestra intuición. Más adelante sabrás la ubicación exacta donde se encuentra la intuición y cómo se genera en nuestra mente.

El término “intuición estratégica”, cada vez más en auge, comienza a utilizarse aplicado a la empresa y los negocios. En EE.UU. todo lo relacionado con la intuición y su aplicación al liderazgo y el management se encuentra ya en las instituciones públicas, privadas, escuelas de negocios, cursos de postgrado como la formación directiva y MBA’s en Intuición Estratégica que se imparte en la Columbia Business School, Harvard o Cambridge, entre otros.

Seguro que alguna vez has sentido la intuición… Es esa sensación de experimentar algo o conocer cómo llevar a cabo alguna tarea, sin realmente saber el motivo de por qué esa decisión intuitiva podría ser la más adecuada para ti…, pero lo crees saber.

Y si no… seguro que esta frase la tienes en ocasiones más de lo que crees en la boca: “No sé por qué pero… no lo veo” u otra del estilo “No sé por qué pero… no me gusta”, en la que nuestra mente y cuerpo nos intentan decir algo…, aunque aún no seamos capaces de interpretar esas señales. Seguro que alguna vez te ha pasado que tienes la sensación de que un colaborador, proveedor, conocido… te engaña (“intuyes” que te engaña) o que hay algo que no te dice aunque no sepas exactamente el qué o por qué. De hecho, esto te ha podido pasar hasta con tus parejas: algo te dice en un primer contacto, al inicio mismo de la relación, si “se trata de un sí o un no”, sin apenas disponer de la suficiente información, y que va mucho más allá de la mera atracción física u hormonal. ¿O no te ha pasado?

Hoy día sabemos que la intuición es una sensación que se capta y se percibe consciente o inconscientemente sin la participación previa del pensamiento racional, que se activa de forma única y exclusiva en la especie humana, tal como lo proclamaba el creador tecnológico Steve Jobs: “Ten el coraje de seguir a tu corazón y a tu intuición”.

En numerosas ocasiones se ha puesto en tela de juicio si existen algunas especies de animales con esta misma capacidad. Hasta la fecha, los estudios realizados por científicos demuestran que los animales disponen de “inteligencia instintiva” basada en los instintos, pero no de la intuición, ya que para tener capacidad intuitiva es necesario disponer de intelecto, y tanto el razonamiento lógico como el pensamiento son inherentes al ser humano.

Hasta la fecha, lo que sí se ha podido demostrar científicamente a través de estudios con distintas especies animales, es que existen razas con una capacidad instintiva más desarrollada que otras en la anticipación de catástrofes naturales a través de los instintos como hemos podido comprobar en diversas tragedias sísmicas como la del tsunami que devastó numerosas partes de Indonesia, Tailandia y Sri Lanka en diciembre de 2004, áreas donde la mayoría de los animales que no se encontraban totalmente enjaulados pudieron salvarse, y no sus dueños, antes de que llegara la mortal ola que devastó numerosas áreas geográficas pobladas de monos, leopardos, búfalos, elefantes y 130 especies de aves.

¿El motivo…? Se cree que son capaces de presentir distintas descargas magnéticas. De hecho, un reciente estudio demuestra que los animales no tienen intuición pero pueden predecir terremotos, diluvios, tormentas y eclipses porque sus perceptores sensoriales recogen los cambios de cargas eléctricas como constató también el científico Friedemann Freund de la Universidad Estatal de San José en California, quien nos explica que, previo a un acontecimiento natural, los animales realizan conductas en las que emplean movimientos raros, asustadizos y conductas de escape y evitación para rastrear cuando posiblemente sienten esa carga eléctrica en el aire capaces de detectar a gran distancia.

En nuestro caso, sí disponemos de intelecto como especie, sin embargo, no somos capaces generalmente de distinguir esos cambios magnéticos. Por ello, la intuición se convierte en clave al tomar muchas de nuestras decisiones. En realidad, la vida nos somete a una multitud de elecciones sencillas y complejas, y solo una pequeña parte de ellas son conscientes, por lo que intentar afinar la intuición en la toma de una elección que se convertirá en una acción, sentimiento, idea beneficiosa o perjudicial para nosotros. Ayudará a que obtengas el mejor resultado.

¿Qué sería de nosotros si en momentos cruciales no hubiéramos empleado la intuición?

Si en ocasiones te has preguntado cómo realmente la intuición te puede ayudar a afrontar decisiones complicadas de vida, trabajo, familia o pareja, en las que debes dar una respuesta rápida y no conoces toda la información, ni dispones del tiempo necesario para contrastar rigurosamente datos, bien sea por falta de tiempo, dedicación o falta de experiencias en el nuevo entorno, enseguida dispondrás de herramientas prácticas para potenciar la intuición.

¿Has tenido alguna vez la sensación de saber cómo hacer algo sin ser capaz de explicar cómo lo sabes? Esa señal es la llave para descubrir una de las habilidades más poderosas que tiene tu cerebro: la intuición.

Hay muchas más cosas perceptibles de las que podemos percibir conscientemente”. (Demócrito, siglo IV a.C.)

La intuición que no sabemos interpretar en ocasiones como ya lo anunciaba Aristóteles es tan antigua como la humanidad y se manifiesta mediante palabras, imágenes, sentimientos o sensaciones.

Debes saber que tienes una extraordinaria capacidad y sensibilidad que se encuentra en la mente de cada uno de nosotros, como ya lo decía William James (1800), padre de la psicología americana.

La sensibilidad intuitiva, y eso... ¿qué es?

La sensibilidad intuitiva es un sistema primitivo de alerta, que a través de señales nos puede advertir de peligros. El psicólogo Daniel Goleman, uno de los autores más importantes en Inteligencia Emocional (cuyos pioneros en el término fueron realmente los autores Greenspan, Salovey y Mayer) habla de la intuición como un sistema primitivo de sensibilidad y alarma del ser humano cuya función sería alejarnos del peligro. Una inteligencia similar a la que también tienen otros animales, como los caballos, los delfines o los primates, sin demostrarse que se trate del mismo sistema.

Seguro que ahora recuerdas distintas situaciones de alerta en la vida o en la empresa, que has vivido (todos lo hemos hecho) y más en los momentos de incertidumbre. Y es normal porque todo ha cambiado: El trabajo ya no es para toda la vida, tu primer amor probablemente tampoco, ni tu ordenador, ni tu móvil… hasta aparentemente las pensiones del sistema público no lo serán…

Las situaciones de alerta, en las que apenas hay tiempo de reacción, actuamos en ocasiones por intuición, como el caso verídico del director del Servicio de Crisis en Nevada, Sam González Silva, que aplica la intuición y el sentido común en el rescate de personas que intentan suicidarse, presionado por situaciones dramáticas en las que velozmente debe actuar y con las que tiene una efectividad altísima en el rescate. Por lo que la intuición en sí es un sistema de supervivencia.

Imagínate la cantidad de veces que pones en práctica la intuición sin ser consciente de ello. Quizá te sorprenda saber que produces más de 60.000 pensamientos con tu mente, según la Fundación Científica Nacional (NSF), lo que significa que tu mente genera más unos 40 pensamientos por minuto (Alexia de la Morena, 2014). Sin embargo, debes saber que de esos infinitos pensamientos aproximados que tenemos de media cerebral cada uno de nosotros, el 90% de ellos es una idea idéntica a la de ayer y la semana anterior, lo que deja muy poco espacio a nuevos pensamientos que se convierten en hábitos que repetimos inconscientemente como patrones de comportamiento en numerosas ocasiones dañinos para ti.

El objetivo es ayudarte a que reduzcas los posibles ratios de error y a tomar decisiones correctas en las que puedas emplear la intuición cuando así lo sientas, ya que tienes una gran capacidad para utilizarla. Para mejorar esta capacidad, debemos trabajar con la reserva cognitiva de la mente:

Puedes ejercitar tu mente a través de nuevos aprendizajes, lectura, idiomas y relaciones sociales, y deporte como ir al gimnasio semanalmente. Esta práctica te ayudará a prevenir mayores riesgos de padecer enfermedades pandémicas del siglo XXI como son por ejemplo las de deterioro cognitivo, las demencias, Alzheimer, Parkinson o enfermedades como la depresión.

Nuestro cerebro, el mayor tesoro a nuestro alcance, mejora tus pensamientos a través de tu propia capacidad plástica, de tal forma que es capaz de cambiar gradualmente nuestra realidad a través de las decisiones que tomas cada día, puesto que tus pensamientos son los que modulan tu comportamiento pasado, presente y futuro.

Liderazgo intuitivo

Подняться наверх