Читать книгу Del fracaso al éxito - Arturo Crosby - Страница 4
Prólogo
ОглавлениеValidación de una nueva era
en relación al futuro del turismo rural
Son muchos los años que han pasado desde que conocí a Arturo Crosby. Siempre guardamos cierta amistad y respeto educativo. Al margen de que ambos, aunque profundamente enamorados del estudio del turismo, participábamos en diferentes áreas sectoriales del turismo. Y también en trabajos monográficos muy diferenciados. En principio, distanciados en los objetivos y en los métodos de análisis. Por ello, cuando Arturo me invitó a prologar su última aportación bibliográfica (Del fracaso al éxito de la nueva era del turismo rural), aunque extrañado y distante por el contenido, no dudé en aceptar su gentil invitación.
Pienso y considero, sin duda, que el profesor Crosby es un autor convencido de lo que escribe y divulga. Pudiéndose interpretar, por mi interés en escribir igual que él, que el trabajo presentado aporta al conocimiento un desarrollo sobre algo que conoce y divulga con mucha facilidad. Por lo que sin duda su esfuerzo queda siempre bien reconocido. En ese sentido, siempre, y en general, he creído que todo autor escribe y ofrece algo de lo que está muy convencido. A menudo entusiasmado de lo expuesto. En este caso, concretamente relacionado con el turismo rural.
Hay que señalar que las directrices bibliográficas que presenta son muy objetivas, y aunque pueda pensarse que en muchos casos son divergentes, con algún trabajo redactado por mi persona, considero importante destacar que no son numerosos los juicios de valor e interpretación divergentes que podrían identificarse como ciertamente atrevidos. Aspectos que ambos autores manifestamos, deseando facilitar el conocimiento acerca de la realidad del turismo rural. Objetivos que deseo alcanzar e impulsar en el entorno de un desarrollo sostenible, progresivo y enriquecedor. Por lo que se puede valorar que los objetivos que ambos sentimos —como estudiosos— con relación al turismo, en una gran parte de su filosofía son sentimientos y secuencias similares.
Puede afirmarse que el turismo rural en el marco del desarrollo experimentado durante la pandemia referida al año 2021, especialmente durante los meses iniciales, se ha proyectado con optimismo. Y ha creído progresar a causa de la capacidad que posee el turismo rural para crecer y expansionarse, superando los problemas y coeficientes posibles de esparcimiento.
El autor señala inicialmente, como respuesta a sus propias hipótesis, como razonamientos filosóficos «que quizás el turismo y sus expertos deberían buscar una significativa convergencia de intereses y encontrar soluciones que puedan satisfacer al conjunto sectorial a pesar de las dificultades provocadas por la situación». Llamando también la atención sobre un hecho condicionante de todo el posible proceso de evolución de esta clase de turismo. Siempre que se vea influido por una tendencia que se manifieste inductora de la migración y abandono de su espacio en el desarrollo dentro del territorio rural hacia las urbes motivadoras de la propagación urbana «inducida por las carencias existentes, tanto de servicios, infraestructuras, empleos, sanidad, cultura, deporte, comunicaciones, que a la vez son necesarias para promover una gestión eficaz de la actividad». Pero abandonando los principios filosóficos para proceder a integrarnos en una realidad indiscutible, necesariamente hemos de creer que el turismo rural guarda en sus potencialidades inmediatas un marco de expansión muy importante en función de las variables condicionantes que parecen impulsar a esta clase de turismo, tan diferenciado y singular.
Afirmaciones realizadas considerándose que, sin duda, aguarda al turismo rural una tendencia expansiva de fuerte crecimiento. Por lo que se puede hablar inicialmente de grandes posibilidades en el crecimiento de esta clase de turismo, reconociendo la potencialidad que teóricamente ofrece la despoblación rural.
Es evidente que la realidad que ofrece el territorio español, en cuanto a la capacidad de absorción, es muy elevada, pudiendo constatarse la existencia de grandes áreas del territorio semiabandonado. Sin duda, podrían convertirse en áreas de atracción específicas durante un tiempo considerable. Un territorio adecuado para promover nuevas zonas de acogida en los territorios de baja densidad, los cuales pueden convertirse en zonas de atracción de una nueva clase de turismo que permita alcanzar logros significativos en la elevación demográfica. Territorios hoy en proceso de abandono o semiabandono territorial.
Se considera importante reconocer, en la actual identificación territorial, las características que suelen utilizarse como argumentos o razones de la despoblación del territorio:
• Huida de los flujos poblacionales impulsados por el abandono sucesivo de movimientos de población que buscan una clase de sociedad diferenciada con la histórica;
• Avances tecnológicos y sociales que permiten a los ciudadanos que habitan las áreas pobladas con mayores medios, mejores índices de calidad de vida;
• Profundos procesos en los cambios de actitudes y costumbres de las sociedades rurales, que buscan en el abandono histórico, los nuevos modos de vida;
• Puesta en proceso de explotación y desarrollo de recursos que han sido abandonados desde algún tiempo atrás
• Impulso al aprovechamiento de recursos naturales y de caracteres sociales e históricos que permitan la puesta en valor de diversas actividades culturales;
• Consecución de modelos de desarrollo que posibiliten la puesta en valor de diferentes fuentes de mejoramiento económico en el espacio afectado;
• Influencia del objetivo de la diversificación social y cultural de manera que de ese modo pueda convertirse el área afectada en zona de progreso y desarrollo;
• Fijación de una política de desarrollo turístico rural, que fije como condicionante determinante, los espacios naturales, enriqueciendo y mejorando los resultados.
Se puede considerar posible que las estrategias para el desarrollo del turismo rural, necesariamente, hayan de cambiar con relación al carácter que se ofrecen en la actualidad. Se puede aceptar de modo realista que, en la actualidad, la capacidad que posee el auge del turismo rural, especialmente el futuro turístico en espacios naturales, podrá superar las capacidades que hoy pueden obtenerse en cuanto a los beneficios alcanzables. Dependerá de cómo se plantee el desarrollo en el marco de un proceso de crecimiento ajustado y equilibrado. Dentro de lo que puede entenderse —de modo ambicioso— como éxito en la nueva era del turismo rural.
Dentro de lo que se ha considerado como posible —en el escenario del turismo rural—, durante los posibles procesos evolutivos del turismo genérico se ha de entender como realidad llegar a resolver los problemas superados por el turismo rural, conseguido hasta este momento.
• Lograr un crecimiento permanente, controlado, guardando un principio conservador.
• Posibilitar una imagen con significado del turismo rural de resultados superiores.
• Proyectar escenarios más favorables para lograr un futuro turístico rural superior.
• Reordenar la imagen del turismo rural con el fin de conseguir una mejor clase de turismo.
Se ha de considerar que debe plantearse a partir de ahora una estrategia política para el desarrollo del turismo rural. Que considere con mayor voluntad y decisión de acción un turismo rural más completo y adecuado. Condicionado a las necesidades actuales de su promoción y desarrollo. De tal manera creemos entender que se proyecta en el libro de Arturo Crosby, una inquietud por resolver ciertos problemas que se proyectan como complejas decisiones. A considerar de acuerdo con el nuevo turismo rural. Tanto desde la perspectiva de su dimensión como desde sus perfiles caracterizadores. En ese sentido se trata con especial atención tres cuestiones a valorar y a condicionar a futuro.
En primer lugar, ¿en qué forma y dimensión puede el turismo rural aprovecharse de la despoblación de los núcleos aislados, que evolucionan en situación de abandono y desinterés? A menudo por causa del ejercicio de un desarrollo desinteresado. En segundo lugar, ¿debe considerarse y personalizarse, si existe la preocupación por valorar y cualificar las nuevas tendencias turísticas? Con relación a su utilización en el crecimiento y remodelación de un turismo con mayor capacidad de cambio y evolución cuantitativa. Y, por último, ha de considerarse como de gran interés la redacción de inventarios y registros de forma proyección y caracterización de las nuevas formas de turismo rural que se visualizan de cara al futuro.
Es evidente que, con relación a nuestra futura demanda turística, existe en España una enorme potencialidad de crecimiento respecto al turismo rural. Siempre con relación a la oferta real y potencia que actualmente se recibe. O con relación también a la que en estos momentos ofrece un turismo de interior en el territorio español, muy potente por la enorme diversidad de factores influyentes y perfiles ofrecidos. Por lo que debe pues confiarse en la potencialidad del segmento rural como fuente de crecimiento turístico que se ofrece en la realidad turística actual. Por ello, se consideran especialmente tres factores de expansión concretos (intensidad en la dimensión de la oferta, amplitud de la demanda por causa de la expansión diversificadora del turismo rural, y por causa de la capacidad de amplitud potencial de la oferta, por motivos y perfiles) para alcanzar importantes tasas de expansión del turismo rural en España que aportarán significativos flujos de incrementos de este perfil o clase de turismo.
Pero se ha de asegurar con rigor y seguridad que, considerando los perfiles más importantes que desarrolla el contenido del trabajo desarrollado por Crosby, los planteamientos que se han descrito en el marco de las futuras estrategias de desarrollo, pronto se identificarán. Con un conjunto de elementos decisores, o factores, que pronto se habrán de convertir en condicionamientos previos de acción. Convirtiéndose en decisores del futuro, manifestado en párrafos precedentes.
Procesos que podrán acometer y conseguir los instrumentos de acción planteados. Si se tiene en cuenta la necesidad de llegar a fijar y aprobar una política de acción que, ajustada a la realidad de los condicionantes de la estructura, podrá convertirse en un cuadro perfectamente diseñado de estrategias, acciones y medidas de actuación. Capaz de llevar al conjunto de decisiones de actuación a la mejor gobernanza posible, que pueda conseguir el cuadro de objetivos alcanzables desde el futuro turismo rural, que desde la perspectiva de las acciones y decisiones posibles se considera en este análisis. Siempre en función de las capacidades y posibilidades descritas como factores para el desarrollo, que el turismo podría alcanzar en España.
Uno de los aspectos que Crosby trata de explicar con cuidada atención en el capítulo tercero del trabajo que presenta, se corresponde a la exposición de los procesos de innovación en el turismo. De manera que proyecta de manera práctica siete epígrafes analíticos, en un entorno de profunda inquietud, ofreciendo verdaderos y realistas contenidos fruto de su proyección sectorial.
La primera cuestión que trata y promueve el autor en ese capítulo, es su consideración a la importancia y significación del reconocimiento a la innovación en el turismo rural, como algo director y condicionante. Por lo que debe afirmarse de manera rotunda que, al turismo rural, igual que a cualquier otra proyección en el análisis sectorial del turismo, se le habrá de tratar con especial interés, en el entorno de su diversidad, intensidad y capacidad, para que el turismo rural pueda manifestarse como clase de actividad innovadora. A la que se le ofrece una enorme posibilidad de desarrollo, tanto en su perfil cualitativo como en su perfil cuantitativo. Fundamentalmente, porque existe el principio filosófico que reconoce que lo que no innova periódica y continuamente, tenderá a la desaparición.
Asimismo, se destaca como segundo factor potencial de innovación para la utilización de procesos cualitativos referidos a las diferentes clases y formas de destinos rurales, el referido a la oferta gastronómica. Tales como los destinos potenciales para la promoción de nuevas formas de turismo, con proyección —en este caso— a la dimensión cualitativa de la oferta de alimentos y bebidas. Tal como puede ser el turismo gastronómico.
Puede destacarse la capacidad y potencialidad que poseen los caracteres y formas señaladas, como atracciones relacionadas con los recursos naturales, ya que el conjunto de atractivos y elementos de proyección naturalista configuran un rico patrimonio de contenidos que genera un núcleo de interesantes recursos turísticos de gran significado para los viajeros procedentes de otros lugares.
Sin duda, son numerosas las posibilidades que se pueden habilitar para crear, en diferentes lugares, núcleos de atracción de potenciales desarrollos turísticos. Todos ellos pueden convertirse en virtuales elementos de atracción, configurando espacios concretos que pueden y deben convertirse en núcleos de motivación viajera. En ese sentido, de acuerdo con los autores de este trabajo, han de organizarse numerosos núcleos, ricos de recursos, que en todo momento han de servir para crear nuevos circuitos de viajes. Aquellos que posibiliten espacios, hoy apagados en cuanto a su capacidad viajera, puedan convertirse mañana en destinos imaginativos, nuevos y complementarios, y de gran valor cultural. Tal como es el caso del turismo investigador, tecnológico y rural. Insertos en espacios naturales como los bosques, el alpinismo y la historia.
De ninguna manera hoy se puede pensar en definir tendencias turísticas que puedan oscurecer las enormes capacidades de atracción, hoy brindadas en el balance del inventario real del turismo. El cual ofrece un inmenso inventario de posibilidades, en donde, sin duda, se ha de destacar el turismo rural, como ejemplo de alternativas viajeras que con mayor fuerza se procura.
Manuel Figuerola Palomo