Читать книгу ¡Ganar! - Brad Gilbert - Страница 22
Totalmente grandes, totalmente diferentes
ОглавлениеTenemos entonces a dos grandes jugadores, Becker y Connors, con juegos, estilos y temperamentos muy diferentes. Ambos requerían atención especial, un plan específico de juego y una actitud que traté de consolidar incluso antes de verles las caras el día del partido.
Uno capitalizaba mi segundo saque débil. El otro, no. Uno orquestaba a la multitud. El otro, no. Becker se frustraba si el partido se le iba. A Connors le encantaba tanto estar afuera que realmente odiaba que eso terminara. Boris tenía un enorme primer saque y un gran segundo servicio. Jimmy no tenía ni uno ni otro.
Antes de ver a mi rival el día de partido, ya había repasado por completo nuestro historial de partidos, su juego y mi plan de juego. Había repasado mentalmente qué quería hacer que pasara. Y sabía exactamente que quería evitar que ocurriera. Sabía a dónde quería ir y cómo llegar. El nadador olímpico Nelson Diebold dijo después de haber ganado la medalla dorada en 1992: “Una buena preparación mental es tan importante como una buena preparación física”. Es cierto en todos los deportes, especialmente en el tenis.
Ese proceso al que me sometía para estar listo para Becker y Connors (o Lendl, Chang, Courier u otro jugador) es exactamente lo que deberías hacer: prepararte mentalmente para tus Becker y Lendl. Si eres inteligente, no pienses que porque juegas un tenis A, B o C las ventajas no suman. Yo creo que suman incluso más. Esta es la razón.
Los tipos con los que yo jugaba me estudiaban tanto como yo a ellos. También eran maestros en no dejarme hacer lo que intentaba hacer. Tú no tienes ese problema. Muchos de tus rivales son mentalmente perezosos antes y durante el partido.
Depende de tu nivel de juego, pero es probable que no te encuentres ni una vez al mes con un jugador que considere tu juego con seriedad y sepa cómo explotarlo. Además, su modesto nivel de habilidades tenísticas lo hace vulnerable ante un jugador que es bueno explotando oportunidades. Una buena preparación mental temprana es una oportunidad a la espera de que la aproveches.