Читать книгу Selfi americano - Curtis Bauer - Страница 12
Regreso a un instante
ОглавлениеNada de esto te sorprende ahora,
¿cierto? No estoy seguro del todo,
me respondí a mí mismo.
O así lo creo.
Debí haberlo hecho.
Una amiga me recomendó abrazar
mi desorientación en este punto, atenderla
y meditar en este estado, convertirlo
en práctica diaria, igual que pasear
o tomar café.
He paseado por esta ciudad
infinidad de veces estos cinco meses.
Hace unos meses no distinguía
Bulnes de Pueyrreidón,
ni las prostitutas de las vecinas de Córdoba.
Estaba aprendiendo a moverme
por los matices de esta ciudad.
Todo ha cambiado:
me abro paso en el subte; mi mujer
sigue sin poder comprar tampones, las mujeres
creen que la protesta cambiará
las cosas; la esperanza, ese aroma
a jazmín que brota en los días templados,
y luego se disipa
y me olvido de que haya existido.
No me esperaba
que mi amiga me dijera que tenía cáncer.
Pensé entonces
que nunca dejaría de pensar en ella.
Esta noche Buenos Aires es una protesta
en respuesta a un asesinato reciente:
una chica de 14, embarazada, muerta
por su novio de 16 y enterrada en el patio de casa
con ayuda de los padres de él.
Ni una menos, Not One Less.
No me he acordado de mi amiga
en el último mes.
Puede que se me haya traspapelado
el asombro
que solía unirse a mis paseos.
¿Se puede habitar siempre
en un estado inestable?
Antes me acordaba de ella
mientras exploraba. La noche
en que le escribí, me respondió
su pareja: Me pesa el corazón.
Tengo que decirte que Jackie murió el viernes pasado.
La muerte, yo esperaba la suya…
pero creí que la volvería a ver,
que podría llegar a contarle
cómo aquí van perdiendo brillo las sorpresas.
No sé adónde
mirar, cómo entender
esto. Tenía una piedra
que le iba a regalar, pero
la tiré a un estanque y observé
cómo se calmaba la ondulación,
se borraba la huella
de cada onda.