Читать книгу Desde la universidad a la sociedad - Patricio Donoso Ibáñez, Ignacio Sánchez Díaz - Страница 21
ОглавлениеCarta a los nuevos universitarios
Me dirijo especialmente a los jóvenes que han iniciado su vida universitaria. La educación es la aventura más fascinante de la vida. Es el proceso de transformación personal que se realiza en comunidad, por medio del cual una persona se desarrolla y adquiere un vuelo propio, original, creativo y de gran impacto para la sociedad. Los estudiantes universitarios que han iniciado este año su proceso de formación integral en las diferentes instituciones de educación superior del país son nuestro foco y principal preocupación.
Es importante concebir la experiencia universitaria de manera integral, amplia y multidisciplinaria. Los conocimientos y la formación rigurosa y actualizada en cada una de las disciplinas son muy importantes. Pero hay mucho más. El principal elemento que va a caracterizar este maravilloso período de la vida de ustedes, hombres y mujeres que inician este desafío, es el encuentro y el conocimiento personal. Las universidades son comunidades de estudiantes y profesores de diferentes generaciones que interactúan, se conocen, conversan, discuten, enfrentan ideas y, en conjunto, realizan el proceso de aprender a pensar. Así también, en estas instituciones trabajan profesionales, administrativos y personal de apoyo con gran dedicación y motivación para favorecer esta misión.
Las universidades son comunidades de estudiantes y profesores de diferentes generaciones que interactúan, se conocen, conversan, discuten, enfrentan ideas y, en conjunto, realizan el proceso de aprender a pensar.
Las universidades son lugares privilegiados, donde se conoce el pasado, se analiza el presente y, por sobre todo, se piensa el futuro. Y se piensa con una mirada de bien común, de aporte a la sociedad. Ustedes son protagonistas en esta historia. Por esto es tan importante la vida universitaria: es donde se aprende a compartir, a trabajar en equipo, se fortalecen los valores del respeto, diálogo, vida democrática y, en especial, la preocupación por los más vulnerables y necesitados. De esta forma, es muy importante que ustedes puedan aprovechar sus dependencias universitarias: salas de clases y seminarios, laboratorios, bibliotecas, espacios de convivencia y deportivos. Todos estos son lugares de encuentro, de desarrollo personal y comunitario. Utilicen todo lo que está disponible para aprender, entregar, compartir y conocer al otro.
El sistema universitario es rico y diverso: tenemos universidades complejas y completas en investigación y docencia, otras de orientación docente, universidades estatales, públicas que no son propiedad del Estado, católicas y laicas, regionales, privadas y algunas orientadas a áreas específicas del conocimiento. Es importante conocer el lugar donde cada uno de ustedes ha elegido ingresar, entender su identidad y misión para poder así aportar a ellas. Ustedes tienen el desafío de colaborar a cumplir en forma cabal el ideal de los fundadores. Los estudiantes son factor clave en la expresión del sentido de misión de cada universidad.
Así también, es relevante en su desarrollo personal que las tareas curriculares se complementen con las actividades deportivas, científicas, culturales, de representación estudiantil y de compromiso con el devenir de nuestro país. Los invito a desarrollar actividades pastorales y sociales que tengan como norte el servicio al prójimo.
La comunidad de cada una de las universidades está feliz de recibirlos. Ustedes son jóvenes privilegiados, que han podido acceder a estudios superiores gracias a sus talentos, al esfuerzo personal y al apoyo de sus familias. Y por esto hay que devolver los talentos que han recibido. Es la manera de responder con responsabilidad y generosidad a la sociedad. Los próximos meses estarán marcados por propuestas y debates sobre el programa y la conducción del país. Es el momento de aportar al debate con rigurosidad, esperanza, generosidad y mirada de futuro. El aporte de la juventud es crucial.
Bienvenidos a las universidades de nuestro país. Estudien y trabajen con optimismo, esperanza y gran motivación. La comunidad universitaria espera su aporte en los años que vienen. Trabajen con la pasión de la juventud en estos inolvidables años de sus vidas. Y sigan el mensaje de San Alberto Hurtado cuando dijo que “los universitarios no solo se preparan para ser profesionales y técnicos, sino que son los obreros de un mundo mejor”.
Publicado en el diario La Segunda el 4 de abril de 2013.