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El plazo de ejercicio del derecho al desistimiento se articula como un medio de protección del adquirente, que tiene por finalidad ofrecerle la posibilidad de reconsiderar y evaluar mejor las obligaciones derivadas del contrato celebrado. Para lograr ese objetivo se concede al consumidor un plazo dentro del cual podrá desvincularse del contrato lícitamente y sin coste alguno, a su libre albredio, o en atención a la expresión legal, sin necesidad de justificar su decisión6).

El artículo 71 Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios reconoce con carácter general7) tanto al consumidor como al usuario el plazo de 14 días para ejercitar el derecho al desistimiento. Se trata de un plazo de referencia ampliamente reconocido por la normativa sectorial, ya que tanto la Ley de Ordenación del Comercio Minorista,8) como la Ley 16/2011, de 24 de junio, de contratos de crédito al consumo 9) se remiten con carácter general al plazo de 14 días para el ejercicio del derecho al desistimiento.