Читать книгу Perspectivas actuales del feminicidio en México - María Eugenia Covarrubias Hernández - Страница 20
La violencia cultural
ОглавлениеAhora bien, la violencia está ligada a la existencia de pautas culturales vinculadas a la socialización y a la educación de género. A unos y otros varones se les permite ser violentos en rangos y grados distintos. Es así que las masculinidades prevalecientes todavía están cargadas de violencia que se demuestra a través de los deportes, las competencias rudas, la política, las profesiones y hasta a través de los delitos. Es en este cuadro complejo de convivencia entre los géneros, donde se gesta la violencia, sobre todo de hombres contra mujeres.58
El hombre agresor ejerce su violencia hacia la mujer por la convicción de que tiene derecho a someterla, a corregirla porque tiene superioridad moral sobre ella. Tal vez, si nos imaginamos la configuración de ese derecho tradicional y hegemónico en la mente del agresor, estaremos en mejores condiciones de entender la secuencia de violencia que conduce al feminicidio.59
Asimismo, la violencia ha sido asumida como «normal» en la conducta de los varones, entretejida en las prácticas culturales y el arraigo del capital cultural (tradicional) histórico, y ¿por qué?, porque les sigue proporcionando privilegios. A éstos se les puede nombrar como «pactos patriarcales», conceptualizados como formas de pensar y obrar de complicidad entre los sujetos, donde el poder y la violencia se piensan como parte de la supuesta «esencia masculina».60
Entonces, muchos hombres, a partir de esos privilegios se autodefinen como «dueños», «patrones» y «protectores», se creen con la capacidad de decidir el destino del cuerpo femenino, el que debe estar dispuesto a ser poseído, sometido, compartido o domesticado, según voluntad y antojo.61
Asimismo, ciertos discursos (biologicistas) han pretendido justificar el ejercicio de la violencia por parte de los hombres hacia las mujeres, argumentando que responde a cuestiones naturales (como algo innato), de su carácter e identidad masculina. Pero es claro que las masculinidades (forjadas desde la infancia) son construidas en lo social.