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En un lugar llamado Ser…

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Se abrieron 6 portales interdimensionales y en cuestión de segundos se encontraron las 6 tribus en el valle del Ser.

Los maestros y diosas de Ursa, Pegasus, Cygnus del Norte y Cetus, Scorpius, Vela del Sur en representación de sus tribus y mensajeros de otros reinos acudieron al llamado de Miguel.

Se sentaron todos en la mesa transparente redonda, donde cada uno tenía su lugar. Formando un círculo perfecto, donde la representación de los hemisferios norte y sur se unían mediante la conexión del mundo del Ser en que yacían Miguel, Martina y Mira, como guardianes y cinturón de la interconectividad y amor. También en presencia de Isis y Atenea, maestras y diosas de la feminidad.

La mesa mostraba el mapa de las dimensiones y galaxias asociadas.

Se sentaron y empezó la reunión.

—Los hemos convocado de forma urgente, ya que hemos tenido información de los guerreros pleiadanos, quienes nos cuentan que los Zinzer están recolectando el mineral Or en la Tierra, con el cual planean realizar un túnel inter- dimensional —dijo Miguel.

—Y ¿cuál es el problema? —señaló Kasus, maestro del reino de Scorpius.

—Kasus, tómate en serio la reunión —señaló Vik, diosa de Vela, indignada.

—Vik, cómo me hacían de falta tus regaños, estás divina como siempre. Si no me tomara estas reuniones en serio, no estaría aquí.

Vik lo miró de reojo muy seria.

—Será que por esta vez pueden tratar de no pelear y coquetear al mismo tiempo, estamos acá por un tema delicado —señaló Cila, diosa de Cetus.

—Estás celosa, mi Cila hermosa, tengo amor también para ti —dijo Kasus.

—Ya, por favor. No estamos muy seguros de cuál sea la razón para construir un túnel interdimesional, pero viniendo de Zinzer, debemos ser precavidos —señaló Iris.

—Mi estimado Miguel, amigos y señoras, nosotros hemos estado haciendo algunas investigaciones en la materia.

Al parecer, el mineral Or es un conductor muy potente de energía. Podría abrir portales interdimensionales mucho más grandes y fuertes de los que hoy conocemos, pero también podría tener consecuencias perversas en la memoria del universo. Es el único mineral con el que pueden ser absorbidos los pensamientos, memoria y conocimiento ancestral. Al absorber dichos elementos podríamos volver al momento cero.

—¿Eso querría decir que todo el tiempo que hemos estado esperando a que los seres que están en la Tierra recuerden nuevamente su misión, podría perderse o que nunca despertarán? —preguntó Pekt, maestro de Pegasus.

—Más que eso, mi querido Pekt. Podrían ser codificados con una misión nueva, una más acorde con las necesidades de Zinzer.

—Miguel, ¿cuál es el plan? —preguntó Cun, maestro de Cygnus.

—No lo sé. Es por ello que los hemos convocado hoy. Sabemos que cuatro de los cinco enviados despertaron pero hay una que aunque ya ha empezado a despertar todavía no lo ha hecho completamente. Ni siquiera se han encontrado entre ellos. Aunque ella ya ha solicitado res- puestas y señales a las preguntas.

—Pues bajemos. Yo me pido ser quien despierte a la hermosura de Ellar —señaló Kasus.

—Kasus, ella ni sabe que se llama así. Además, no nos es permitido intervenir en su proceso —señaló Uma, diosa de Ursa.

—Nosotros ya enviamos a 13 guardianes y guerreros para el cuidado y custodia de los 5 enviados —señaló Roberto.

—Yo propongo que por medio de esos guardianes y guerreros intentemos hacer el despertar más ágil y efectivo. Utilizar los espejos que tenemos a través de los otros seres en la Tierra. Y darnos un plazo para que cuando estén listos y el cerebro esté adaptado poderles dar la información —señaló Cun.

—Y ¿si utilizamos los canales de las otras dimensiones en las que hoy se encuentran y que ya estén avanzados en información?

—Cila, creo que la dimensión en la que hoy están más avanzados en información es la de la Tierra. Además, no serviría de nada darles la información en las otras dimensiones porque al despertar olvidarían todo de nuevo

—señaló Uma.

—Pero sí podemos utilizar algunos canales dimensionales, como el que se abre en el sueño, si logramos que empiecen a utilizarlo como canal sería perfecto. Porque hoy no saben que nos estamos comunicando por allí —señaló Kasus.

—Por fin un comentario pasable de tu parte —señaló Vik.

—Estoy de acuerdo. Utilizaremos entonces varias vías: los guardianes y guerreros, mediante los espejos de los seres de la Tierra, y la dimensión en el momento rem del sueño.

¿Están todos de acuerdo?

—Pero pongamos tiempos, por favor —señaló Cun.

—Una tera.

—De acuerdo —señalaron todos.

—Nos veremos en una tera nuevamente —cerró Miguel la reunión.

En Rem: Fuego (Tomo I)

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