Читать книгу Contrapunteos diaspóricos - Agustín Laó-Montes - Страница 7
PARTE I MOYUGBA MOYUGBA
ОглавлениеElegguá, dueño de los caminos y de las puertas. Él es el de las llaves y los nudos. Él es el que ata y desata. Es el inicio y el fin de todos los caminos. Es el vigía de los días y las noches. Elegguá mezcla el azúcar con la sangre. Siempre está en acecho, espía de los dioses, y su mensajero, es a quien primero se le saluda y pide permiso; él es el que primero come y bebe. El tambor lo proclama así:
Elegguá awó, Elegguá awó, ñaña
Elegguá awó, Elegguá awó, ñaña
Alaroye masoquio, Elegguá awó ñaña
ARGELIO FRUTOS
(Panteón Yoruba: conversación con un santero cubano, 1992).
Iyalode –este título se le da corrientemente a Ochún– es, en el sórdido episodio en que se convierte en Ochún Ibú Kolé, una bruja que recuerda muy de cerca a la Iyalode jefe de las Iyamí Osoronga de que nos habla Pierre Verger. También en Cuba guarda en un güiro su secreto. Su eiyelé (kolé, el Aura Tiñosa), su pájaro mensajero, simboliza a ojos de todos los fieles el tiempo en que “Iyalode comía carroña, volaba y hacia cosas malas”. Pero Ochún la bruja nefaria no desmerece a Yeyé Kari aberí yin lado moró otá, la Linda Ochún que alegra, brilla anima y que todos ensalzan cuando aparece moviendo su abebé (abanico) de plumas de pavo real. Es que Ochún y todos los Orichas son como las fuerzas de la naturaleza, buenos y malos según las circunstancias y sus “caminos”.
LYDIA CABRERA
(Yemayá y Ochún, 1980)
Orula es el poseedor del secreto de Ifá, el oráculo supremo mediante el cual, se comunica con ellos… Personifica a la sabiduría y a la posibilidad de influir sobre el destino, incluso el más adverso.
Orunmila taladé, Babá Moforibale
(Solo el cielo puede efectuar la salvación, es del que posea la corona. Padre, yo pongo la cabeza en la tierra).
Orunla Iború E
(El cielo salva; el sacrificio se ha llevado a cabo).
Iború Di Boye
(El sacrificio que se lleva conviene; el sacrificio es reconocido).
Dibo sise
(Este sacrificio abre el camino y las causas son completas).
NATALIA BOLÍVAR ARÓSTEGUI
(Los Orishas en Cuba, 1995)
El contrastante paralelismo del tabaco y el azúcar es tan curioso, al igual que el de los personajes del diálogo tramado por el arcipreste, que va más allá de las perspectivas meramente sociales para alcanzar los horizontes de la poesía, y quizás un vate quisiera versarnos en décimas populares la Pelea de Don Tabaco y Doña Azúcar. Al fin, siempre fue muy propio de las ingenuas musas del pueblo, en poesía, música, danza, canción, y teatro, ese género dialogístico que lleva hasta el arte la dramática dialéctica de la vida. Recordemos en Cuba sus manifestaciones más floridas en las preces antifonarias de las liturgias, así de blancos como de negros, en la controversia erótica y danzaria de la rumba y en los contrapunteos versificados de la guajirada montuna y de la currería afro-cubana.
FERNANDO ORTIZ (1940)
Desde mi posición como un antropólogo venezolano trabajando en los Estados Unidos, quiero abordar el Contrapunteo cubano como un libro valioso para estos tiempos difíciles. Tomo este texto como una invitación a cuestionar lo que oculta tanto la Modernidad como la Posmodernidad. Ortiz muestra que la constitución del mundo moderno ha envuelto el choque y desarticulación de pueblos y civilizaciones junto con la producción de imágenes de culturas integradas, identidades fijas, y progreso impecable. Su contrapunteo de culturas hace evidente que, en un mundo forjado por la violencia de la conquista y colonización, las fronteras que definen Occidente y sus Otredades, Blanco y Obscuro, Hombre y Mujer, Alto y Bajo, siempre están a riesgo. Formado y transformado a través de procesos dinámicos de transculturación, el paisaje del mundo moderno debe ser constantemente estabilizado y representado, muchas veces violentamente, en maneras que reflejan el juego de poder en la sociedad.
FERNANDO CORONIL
(en Coronil, 1995)
Mi propia resolución de las antítesis entre el compromiso y la teoría ha sido una perspectiva amplia desde la cual podamos ver ambas cultura e imperialismo, y desde donde la gran dialéctica histórica entre uno y otro pueda ser observada, aunque su gama de detalles solo pueda verse ocasionalmente. Voy a proceder a partir de la premisa que mientras la totalidad de una cultura es disyuntiva, muchos de sus sectores más importantes pueden ser comprendidos como operando juntos contrapuntalmente.
EDWARD SAID (2012)