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El efecto del espacio ocupado por el
cuerpo sobre el arrastre por forma
ОглавлениеEl espacio ocupado por los nadadores en el agua tiene componentes tanto horizontales como verticales. El componente horizontal concierne a la profundidad del cuerpo. El componente lateral se refiere al espacio que ocupan de un lado a otro.
Alineación horizontal. Un método para reducir el arrastre por forma es permanecer tan horizontal como sea posible a la superficie del agua sin reducir la fuerza propulsora. Las ilustraciones presentadas en la figura 2.3 contrastan una buena y una mala alineación para un nadador del estilo libre.
El nadador de la figura 2.3a tiene una buena alineación horizontal. Su cuerpo está casi horizontal a la superficie del agua y su inclinación desde la cabeza a la punta de los pies es mínima. Como resultado ocupa menos espacio en el agua que el nadador de la figura 2.3b. Este nadador está cometiendo el error demasiado común de tratar de hidroplanear por el agua. Lleva la cabeza alta con la espalda arqueada y, por lo tanto, tiene que realizar un batido más profundo y más fuerte para mantener esas partes del cuerpo por encima del agua. Por lo tanto, su cuerpo se inclina hacia abajo desde la cabeza hasta la punta de los pies de manera que perturba muchas más corrientes de moléculas de agua que el nadador de la figura 2.3a.
En cuanto al batido, los nadadores deben encontrar un camino medio entre realizar el batido lo bastante profundo como para propulsar el cuerpo hacia delante pero no lo bastante profundo como para ocupar más espacio de lo necesario. La profundidad ideal del batido para cada estilo competitivo se describe en los capítulos en los que se habla de la mecánica del mismo.
Figura 2.3. El efecto del espacio ocupado por los nadadores en el agua sobre el arrastre. El nadador en el dibujo superior (a) mantiene una posición horizontal en el agua que le permite ocupar un espacio mínimo. El nadador en el dibujo inferior (b) está tratando de hidroplanear haciendo un batido más profundo. Su cuerpo está inclinado hacia abajo, lo que provoca que ocupe más espacio en el agua.
Se contrastan la buena y la mala alineación horizontal para los otros tres estilos competitivos en la figura 2.4. El nadador de espalda en la figura 2.4a tiene una buena alineación horizontal porque mantiene su cabeza alineada con su cuerpo y no baja excesivamente las caderas. Contrástalo con la nadadora de espalda en la figura 2.4b, que lleva su cabeza demasiado alta y las caderas demasiado bajas, ocupando así bastante más espacio en el agua.
Esta regla general de que los nadadores deben permanecer lo más horizontalmente posible en la superficie del agua se aplica igualmente al estilo libre y a espalda. Mariposa y braza son excepciones a esta regla porque presentan una situación especial en relación con la alineación horizontal. La ondulación del cuerpo y la respiración causarán que los nadadores estén menos horizontales durante ciertos períodos de cada ciclo de brazada. Estos movimientos ondulatorios son necesarios, sin embargo, a causa de la propulsión adicional que proporcionan. Los nadadores de ambos estilos deben encontrar un camino medio entre una ondulación excesiva y mover el cuerpo hacia arriba y hacia abajo lo bastante como para producir una fuerza propulsora adecuada.
Las ilustraciones de mariposa y braza muestran una buena alineación horizontal en la figura 2.4a y una mala alineación horizontal en la figura 2.4b Como ya se ha mencionado, la ondulación es una parte esencial de los aspectos propulsores de estos estilos.
Figura 2.4. Una buena y una mala alineación horizontal en espalda, braza y mariposa. Los nadadores en (a) muestran una buena alineación horizontal, mientras que se ilustran ejemplos de una mala alineación horizontal para cada estilo en (b).
Por lo tanto, mantener una buena alineación horizontal es cuestión de ondular el cuerpo desde una posición horizontal en la superficie hasta una posición inclinada por encima de la superficie. Los nadadores de estos estilos no deben permitir que los movimientos ondulatorios empujen partes del cuerpo demasiado dentro del agua. Una mala alineación horizontal puede resultar del hecho de realizar el batido con demasiada profundidad y/o bajar las caderas demasiado cuando ondulan hacia abajo. Como se explicará más adelante, los nadadores de ambos estilos serán propulsados hacia adelante por la acción de la ola durante el recobro del brazo si ondulan el cuerpo correctamente. Sin embargo, perderán esta fuente de propulsión si ondulan excesivamente. Hablaré más sobre la acción de la ola en el capítulo 3.
Alineación lateral. Los movimientos laterales excesivos también aumentarán el arrastre por forma. Las partes del cuerpo, especialmente las caderas y las piernas, que se balancean lateralmente por fuera del espacio en el agua ocupado por el tronco causarán que los nadadores encuentren más agua, y, por lo tanto, más resistencia al avanzar. Una mala alineación lateral sólo será un problema en el estilo libre y espalda, en los que los movimientos alternos de los brazos y las piernas tienen el potencial de mover el cuerpo por el agua con un desplazamiento serpenteante.
Las ilustraciones de la figura 2.5 muestran las vistas superiores de nadadoras de estilo libre con una buena y una mala alineación lateral. La nadadora en la figura 2.5a tiene una forma hidrodinámica mientras que la de la figura 2.5b está serpenteando excesivamente de lado a lado. Estos movimientos de lado a lado de las caderas y de las piernas hacen que ocupe mucho más espacio en el agua que la nadadora en (a). Además, los movimientos de lado a lado hacen que empuje el agua lateralmente y hacia delante. Ambas acciones aumentarán considerablemente el arrastre resistivo.
Figura 2.5. El efecto de movimientos corporales exagerados hacia los lados sobre el arrastre en el estilo libre. La nadadora en (a) tiene una buena alineación lateral. Está moviéndose por un espacio más pequeño en el agua porque está rotando longitudinalmente de lado a lado. Véase el contraste con la nadadora en (b), cuyas caderas y piernas se están desplazando por fuera de la línea de los hombros.
Técnicas adicionales para reducir el arrastre por forma. Los nadadores de estilo libre y mariposa que realizan un recobro muy alto de los brazos por encima de la cabeza pueden fácilmente perturbar su alineación horizontal. El peso de los brazos empujará el torso más hacia abajo en el agua. Los nadadores de estilo libre deben realizar el recobro de los brazos un poco hacia el lado y con el codo flexionado, para desplazar algo de su peso por fuera del cuerpo. Los nadadores de mariposa deben realizar el recobro de los brazos hacia el lado por la misma razón. Los nadadores de espalda deben realizar el recobro directamente por encima del cuerpo, a pesar del efecto negativo que tendrá sobre su alienación horizontal. La alternativa, realizar el recobro hacia los lados, perturbaría aún más la alineación lateral.
En sus esfuerzos por nadar rápidamente algunos nadadores utilizan una serie de movimientos de brazada incorrectos que pueden hacer que el cuerpo se balancee de lado a lado. Los nadadores de espalda y estilo libre pueden perturbar la alineación lateral cruzando la línea media del cuerpo con las manos al meter los brazos en el agua. Los de estilo libre también pueden perturbar la alineación lateral durante el tirón de la fase subacuática de la brazada cruzando demasiado la línea media del cuerpo con los brazos.
Tanto los nadadores de estilo libre como los de espalda pueden hacer que las piernas y las caderas se balanceen de lado a lado realizando el recobro con un amplio movimiento lateral por encima del agua. Un movimiento circular vigoroso hacia el lado con el brazo que realiza el recobro tenderá a arrastrar las caderas hacia fuera y en la dirección en la que se desplaza el brazo. Los nadadores de estilo libre necesitan utilizar un recobro con el codo alto que minimice los movimientos de los brazos hacia fuera. Como se mencionó anteriormente, los nadadores de espalda deben realizar el recobro directamente por encima del cuerpo en una posición extendida para minimizar los movimientos hacia fuera de los miembros y el efecto resultante sobre la alineación lateral del cuerpo. Los nadadores de mariposa pueden realizar el recobro de los brazos hacia los lados sin perturbar la alineación lateral. El efecto potencialmente perturbador de lanzar un brazo hacia el lado será compensado por el movimiento simultáneo hacia fuera del otro brazo en la dirección opuesta, de manera que las caderas no se verán arrastradas hacia el lado sino que seguirán desplazándose hacia delante en línea recta.
Los nadadores de estilo libre y espalda también pueden perturbar la alineación lateral empujando los brazos demasiado hacia el lado durante la primera parte de su brazada subacuática. Un empuje vigoroso de un brazo hacia fuera tenderá a empujar el cuerpo hacia el lado opuesto. Como se explicará en el capítulo 3, los nadadores de estos estilos no pueden evitar desplazar los brazos hacia los lados, incluso un poco, al inicio de su brazada subacuática. Deben hacerlo para colocarlos en una buena posición para aplicar la fuerza propulsora lo antes posible. No obstante, los nadadores de ambos estilos no deben mover los brazos hacia los lados más de lo necesario para realizar un buen agarre, y bajo ninguna circunstancia deberían empujarlos vigorosamente hacia el lado al realizar el agarre.
Los nadadores de mariposa y braza deben desplazar los brazos hacia los lados incluso más que los de estilo libre y espalda cuando realizan el agarre. No deben preocuparse por si estos movimientos laterales perturban la alineación lateral del cuerpo por la misma razón que se describió con relación al recobro de los brazos. Movimientos laterales simultáneos de cada brazo que se realizan en direcciones opuestas anulan cualquier tendencia del movimiento hacia fuera de empujar el cuerpo de lado a lado. Sin embargo, dado que fuertes empujes hacia fuera podrían reducir la velocidad de avance, como en los otros estilos, los movimientos de los brazos hacia fuera deben ser suaves hasta que alcancen la posición del agarre.